MURCIA. La ruta que nos ocupa en esta ocasión recomendamos realizarla en bici y nos adentrará en Los Ramos, una pedanía de la costera sur muy desconocida. Nuestro punto de encuentro esta vez será en la Vereda del Chocolate, en el jardín José Antonio Hernández Navarro, gran escultor nacido en estas tierras, con obras repartidas por todo nuestro territorio nacional.
En el mismo, hay una escultura de bronce del artista, un homenaje a la mujer huertana. Este espacio verde lo preside un gran arco que conjuga varios estilos arquitectónicos, en honor a la tan querida Virgen de la Huerta; fue construido en el año 2017 por los alumnos de la escuela taller del Ayuntamiento de Murcia y proyectado por Hernández.
Desde este punto antes de partir podemos ver en la falda de la sierra las oquedades producidas por las explotaciones mineras de antaño y, más al este, el olvidado castillo de Tabala, construido en el siglo XI, gran baluarte que hace de centinela entre el campo, la huerta murciana y oriolana. Nos adentramos por la vereda antes nombrada, atravesamos la acequia de Beniaján y el azarbe Landrona de rodeo, llegamos a un cruce y giramos a la izquierda circulando paralelos a la autovía.
Continuamos hasta llegar a una rotonda, tomamos la primera salida y pasamos por debajo de la autovía y la línea de alta velocidad, continuamos recto dirección Alquerías por camino Koala, hasta llegar a un pequeño cruce donde nos incorporamos de nuevo a la Vereda del Chocolate, tras haber girado a la izquierda.
Otra vez podemos observar la red de regadío de nuestra huerta. Pasaremos dos pequeños puentes sobre el azarbe de Sangonera y el de Beniel. Sin abandonar la vereda y disfrutando el bello paisaje que nos ofrece la huerta, llegamos al final de esta, en el cruce con el Camino viejo de Orihuela. Nos incorporamos a este torciendo a la izquierda, dirección Torreagüera, y enseguida podremos visionar la milenaria acequia de Benicomay y unos metros más allá, la espléndida Torre de Rocamora, con su pequeña ermita. Antigua construcción que data del siglo XVIII, erigiéndose la ermita posteriormente en el siglo XIX, allí se realizaban las labores propias de la huerta, como la crianza del gusano de seda.
Una vez que hayamos visionado este ejemplo de arquitectura tradicional, cogemos nuestras bicicletas y volvemos por donde hemos transitado anteriormente, dirección Alquerías. Sin desviarnos llegamos a la ermita de la Virgen de la Huerta, construida en el año 1980, bajo proyecto de Hernández, de estilo neobarroco y con frescos en el interior de diferentes artistas incluido José Antonio, el cual también realizó el relieve en estuco de la portada. Recordad que la romería de esta virgen se celebra el ultimo domingo del mes de mayo, donde pasa en la iglesia de San Pedro la única semana que está fuera de su templo.
Frente a la ermita hay un gran jardín, en el mismo podremos avituallarnos o simplemente descansar, escuchando el sonido de la naturaleza. Continuamos con nuestra aventura y seguimos dirección Alquerías, a unos 200 metros, podemos observar a la izquierda la majestuosa Torre Almodóvar, gran edificio señorial con el escudo familiar incrustado en la fachada y culminado por un pequeño torreón. La función de este inmueble del siglo XVIII, como era habitual, sería agrícola y sedera.
Cuando hayamos finalizado nuestra recreación visual, procedemos a dirigirnos por los mismos carriles y veredas, donde previamente hemos dejado huella, pero en sentido inverso, al punto de partida de esta ruta. Una vez que hemos llegado al jardín Hernández Navarro no podemos terminar esta visita a Los Ramos sin mencionar la Cañada real de Torreagüera, legado del Rey Sabio, la antigua estación de tren, que los ramenses han solicitado su puesta en valor como espacio cultural y como no, Casablanca, antigua casona con almazara de finales del XVIII principios del XIX, a los pies del Castellar; todo ello, un tanto abandonado.
Una excusa para visitar de nuevo esta población son las fiestas patronales y de moros en honor a San Pedro, en junio y como anteriormente se ha mencionado, el último fin de semana de mayo, en la romería de la Virgen de la Huerta. Para degustar un aperitivo, recurrimos al buscador de internet, el cual nos informará de todos los locales de restauración existentes en la población, que seguro serán de nuestro agrado.
* Raúl Jiménez y Lorca es cronista de Torreagüera