MURCIA. Juan Carlos Pardo Cano, el presidente ejecutivo de Liwe Española desde 2015, gana relevancia dentro de la estructura de la empresa murciana propietaria de las tiendas de ropa Inside al acceder al cargo de consejero delegado. Pardo sustituye así en el puesto a Fermín Fernando Bernabé Díaz, un histórico directivo de la firma de moda.
Bernabé seguirá vinculado a Liwe a partir de ahora como consejero dominical, un puesto que también ocupa María Dolores Pardo Martínez. El órgano de administración también está formado por Carlos Bernabé Perez y Juan Francisco Gomariz Hernández en calidad de consejeros independientes, al igual que por Juan Francisco Gomáriz Herández como consejero coordinador.
Por su parte, José Angel Pardo Martínez, CEO de la firma, se mantiene como vicepresidente y consejero ejecutivo, un puesto este último que comparte con Juan Carlos Pardo Martínez, quien también ostenta las funciones de secretario. Corona la estructura el ya mencionado Juan Carlos Pardo Cano como presidente y consejero delegado.
Estas decisiones fueron tomadas por el consejo de administración el pasado 28 de junio, en su reunión posterior a la Junta General Ordinaria de Accionistas correspondiente al ejercicio 2022, un ejercicio en el que vio reducido su beneficio en un 90%.
Además de los nombramientos, en aquella reunión se aprobaron las cuentas anuales, la aplicación del resultado, la gestión realizada por el consejo de administración y el Informe Anual sobre Remuneraciones de los Consejeros correspondiente al ejercicio 2022.
El 2022 fue un año marcado por la reducción en el margen de beneficio como consecuencia del incremento en los costes. Tanto es así, que las ganancias netas de Liwe Española quedaron reducidas en más de un 90% durante el 2022 hasta los 470.000 euros frente a los 5,3 millones que obtuvo en el pasado 2021.
Estos datos, contrastan con un incremento en la cifra de negocios del 2,8% hasta rozar los 130 millones de euros. Por su parte, el resultado bruto de explotación (Ebitda) en el 2022 se situó en los 26,9 millones de euros, lo que supone casi un 6% menos frente a los 28,6 millones de euros registrados en el ejercicio precedente.
En el marco de la reestructuración iniciada en el 2019 para el cierre de tiendas, el grupo Liwe Española echó la persiana en 10 establecimientos durante el 2022, pasando de los 378 que tenía repartidas en España, Portugal, Italia y Grecia, a los 368 con los que finalizó el año.
En consecuencia, la plantilla media se vio reducida en un 6% en el pasado ejercicio hasta los 1.228 trabajadores, lo que equivale a perder 88 empleados respecto a las cifras del 2021.