MURCIA. El UCAM ElPozo Murcia FSF retira su equipo de la Primera División femenina de fútbol sala y esto dará lugar a su desaparición. La noticia, que hizo pública este viernes el club a través de su cuenta oficial de Twitter, tiene que ver con el "hartazgo" que han provocado el STV Roldán, que es el otro equipo de la Región con el que ha convivido en la máxima categoría; y la Federación de Fútbol de la Región de Murcia (FFRM).
Así, con esa crudeza, se plantea la historia y Miguel Sánchez, director deportivo del club capitalino y su alma máter, lo cuenta sin tapujos.
"Me he hartado de trabajar con niñas para que luego se lucren otros. El Roldán ha venido reventando nuestro trabajo y se ha llevado al entrenador, Juan Alcaraz, y a tres de las jugadoras de la plantilla como Noelia Montoro y las mellizas Toñi y Lola Martínez. Lo ha hecho sin decirnos nada y algunos quieren que el sol sólo salga para ellos", apunta Sánchez, quien lleva diez años en el club y cuya mujer, Josefa Almarcha, ha venido ejerciendo como presidenta durante las últimas campañas.
Ante la situación generada la FFRM ha permanecido al margen. "Nadie de la Federación me ha preguntado por qué retiro el equipo y no han hecho nada", declara Sánchez, quien ha echado en falta "más apoyo" del órgano que rige el fútbol y el fútbol sala murciano.
El contacto con la Universidad Católica San Antonio de Murcia (UCAM) y con ElPozo, las dos instituciones que han puesto el nombre al Murcia FSF sí han contactado con el dirigente de esta entidad.
"Hablé con Pablo Rosique y con Fran Serrejón y les dije cómo estaban las cosas", expone.
El Desguace París Algaida FS, que milita en Segunda como filial del UCAM FSF; y La Boca Te Lía Futsal Alcantarilla, también de la división de plata y que disputará la fase de ascenso a Primera, han tenido opciones de quedarse con la plaza del conjunto universitario, pero no se han dado las circunstancias para que así fuera.
"Era cuestión de llegar a un acuerdo, pero no hubo entendimiento", señala Miguel Sánchez sin querer dar demasiados detalles.
La decisión parecía estar tomada y "ya no hay vuelta atrás, aunque yo todavía no he dicho que hayamos desaparecido, pero la semana que viene voy a presentar la renuncia", asevera.
"Desde la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) tampoco me han llamado y hubiera agradecido que se interesan un poco más por nosotros", añade sin esconder su cansancio por una situación que ha llegado a su finalización.
"No quedaban muchas más opciones que cerrar el quiosco y no sólo es cuestión de dinero, pues teníamos uno de los presupuestos más bajos de la Primera División femenina con 70.000 euros, pero es que ya estaba harto. Yo me quedo trabajando con los 11 equipos masculinos que tiene el Aljucer FS y es una pena que se acabe así esta historia del UCAM ElPozo Murcia FSF", afirma con pesar quien ha llevado el timón de uno de los clubes históricos del fútbol sala femenino español y que a comienzos de este siglo, entre 2001 y 2005, conquistó dos títulos de Liga, tres de la Copa de España y uno de la Supercopa.