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exposición en El Archivo Municipal de Cartagena

Ramón García, el fotógrafo cartagenero que le hablaba igual a la Reina que a La Pelela

25/05/2022 - 

MURCIA. "Yo me hablo igual con la Reina que con La Pelela", aseguraba el fotógrafo Ramón García, uno de los últimos integrantes de ese imaginario popular de la ciudad habitado por personajes entrañables; a los que todo el mundo conocía aunque no se hubiese cruzado una palabra con ellos y que, de alguna manera, han formado parte del paisaje y la historia más castiza de Cartagena. "El fue uno de los últimos", apunta el cronista oficial de la ciudad Luis Miguel Pérez Adán, comisario de la exposición Ramón García y su Cámara, que hasta el 12 de septiembre se puede visitar en el Archivo Municipal de Cartagena, ubicado en el edificio del Parque de Artillería de la Plaza Puerta de La Serreta.

Bohemio, cordial, despistado, enjuto y algo descuidado en su aspecto -aunque hay alguna foto de joven en la que aparece como un galán de Hollywood- y cartagenero hasta la médula, Ramón García -quien falleció en 2010 a los 93 años- recibe un homenaje pendiente con esta exposición que ya se le prometió en 2007, cuando fue nombrado 'Cartagenero del año'. La muestra es, además, un viaje en el tiempo a través de las imágenes que el fotógrafo -testigo en todos los acontecimientos de la ciudad- captó a lo largo de los 70 años que ejerció la profesión, acompañado siempre por su 'gran amor', su emblemática cámara tuneada a la que bautizó con el título de la que fue su segunda pasión: el pasodoble 'Suspiros de España'.

Cuenta Miguel Ángel Pérez Adán que se calcula que, en tan larga trayectoria, Ramón García llegó a realizar unas 400.000 fotografías, aunque muchas se perdieron en un robo que sufrió en su casa de la calle Honda. No obstante, dejó una colección de diez mil fotografías, de las que 1.400 fueron donadas al Archivo Municipal de Cartagena, junto con diversos objetos personales. Para esta exposición se han seleccionado unas 250 imágenes -además de su famosa cámara 'Suspiros de España' y otras que también utilizó- que se dividen en series según su temática. 

Así, los visitantes podrán contemplar las personalidades que pasaron por la ciudad, conocidos cartageneros, artistas, políticos, imágenes del Cante de las Minas y de homenajes que él mismo impulsó al maestro Álvarez, creador del pasodoble 'Suspiros de España'. También se pueden encontrar 50 retratos de mujeres, fotos del certamen de Miss España que se celebró en 1988 y vistas de la ciudad y de sus fiestas.

Le indicaba al Rey dónde ponerse

Destacan las fotografías que Ramón García realizó a los Reyes de España en todas sus visitas a Cartagena. Tanto es así, que ya era un viejo conocido de Juan Carlos I, al que instaba con cierta confianza a moverse de aquí para allá para lograr un mejor encuadre, llegando el monarca a espetarle que hiciera de una vez la foto. A pesar de eso, debió de tenerle simpatía el Rey al fotógrafo cartagenero, ya que lo invitó a subirse a su helicóptero durante un trayecto de 45 minutos sobre la ciudad. Puede que porque hablaba con ellos "como si lo hiciera con La Pelela", otra cartagenera (vendedora de pescado y de lotería y concesionaria de las sillas de Semana Santa) que también dejó huella en la memoria de los cartageneros. Aún se dice aquello de "nene, gritas más que La Pelela".

El comisario de la muestra señala, como muestra de lo querido que era el fotógrafo, que sólo en La noche de los Museos, la exposición recibió mil visitas. La fotografía del cartel de la exposición es obra de otro gran fotógrafo que ha dado la ciudad, Manuel Díaz Burgos.

Ramón García Pérez nació en Cartagena en 1917, en el seno de una familia ligada a la cinematografía: su padre y sus tíos, los Hermanos García, fueron los primeros en traer el cine a Cartagena en el año 1897, proyectando películas en una barraca en el Paseo del Muelle, donde se alternaba la proyección cinematográfica con variedades. Aunque profesionalmente se formó como orfebre en una platería que había en el callejón de la calle de San Francisco -oficio que le sirvió para tunear su cámara-, pudo más su afición a la fotografía en la que se inició a los 15 años de edad.

Trabajó para diferentes periódicos y recibió tres premios nacionales de periodismo gráfico: uno por un reportaje que elaboró sobre incendio de Refinería a finales de los años sesenta y otro sobre un barco que colisionó en el puerto de Cartagena. También fotógrafo oficial de la Federación de Tropas y Legiones de Cartagineses y Romanos.

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