MURCIA. La pandemia de la covid-19 ha provocado una crisis generalizada en todos los sectores productivos en la Región. En todos menos en uno: la agricultura. Es el sector que en la actual coyuntura tira del carro del empleo, con la creación de 18.600 puestos de trabajo en el último trimestre, según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) elaborada por el Instituto Nacional de Estadística.
Prácticamente la totalidad del resto de los sectores pierde empleo de marzo a junio respecto al primer trimestre, en algunos casos de forma muy acusada. Así, la construcción registró 500 trabajadores menos, la industria 8.800 menos y, en especial, el sector servicios sufrió un intenso retroceso con 24.000 trabajadores menos. Dentro de este ámbito, la evolución más desfavorable la ha vivido el comercio y la hostelería, con 14.500 empleos menos. Por otro lado, el empleo mejoró levemente en información y comunicaciones (+200) o actividades financieras y de seguros (+1.200).
Gracias al buen comportamiento de la agricultura, la Región ha podido frenar la caída del empleo durante el segundo trimestre del año. De hecho, sin esos empleos de la agricultura, la Región de Murcia habría destruido 30.000 puestos de trabajo. Así, se ha situado como la tercera comunidad autónoma que menos ocupados perdió en esos tres meses, sólo por detrás de Baleares y Extremadura. En la actualidad hay registrados 590.100 ocupados, lo que supone un 2,4% menos en el segundo trimestre, mientras que la caída del número de ocupados en España en el mismo periodo fue más del doble y se situó en un 5,46%.
Además, la EPA muestra que la cifra de parados desciende más que la media nacional, con 9.900 personas menos con respecto al primer trimestre del año, pasando de 119.200 desempleados a los 109.300 actuales, lo que supone una caída del 8,3% frente a la subida nacional del 1,7%.
La crisis provocada por la pandemia de la covid-19 sigue costando el empleo a muchos ciudadanos de la Región de Murcia y en términos interanuales tanto las cifras como la comparación con la media nacional es peor. Hay 13.300 parados más que hace un año, lo que supone un aumento del 13,9%, frente al 4,3% nacional. Además, hay 32.000 ocupados menos (-5,2% y -6,1% España) que en el segundo trimestre de 2019. La tasa de paro disminuye hasta el 15,6% frente al 16,5% del primer trimestre y el 15,3% de España.
Por sexos, las mujeres se llevan la peor parte y acumulan menos tasa de actividad y mayor desempleo que los hombres. Así, en la Región hay 344.600 hombres ocupados y 51.200 parados, con una tasa de actividad del 64,82% y una tasa de paro del 12,94%, mientras que la media nacional es del 14,13%. En cuanto a las mujeres hay 245.400 ocupadas y 58.000 paradas, con una tasa de actividad del 49,04% y de paro del 19,12%, mientras que la media nacional se reduce al 16,72%.
La población activa también cae de manera significativa, con 24.600 personas menos en disposición de trabajar (un 3,40% menos). La bajada se debe a la metodología de la EPA, ya que para ser oficialmente considerado como desempleado hay estar en situación de búsqueda activa de empleo, algo difícil de justificar durante el segundo trimestre del año por el confinamiento.
En cuanto al tipo de contrato, la tasa de temporalidad baja un punto y medio y se sitúa en el 28,4%, aunque sigue por encima de la media nacional, que se sitúa en un 22,4%, y disminuyen tanto los trabajadores con contrato indefinido como el de temporales, con 8.000 y 13.000 menos respectivamente.