El centro naval, industrial y naviero de la Fremm preparará a 3.000 alumnos y generará 400 puestos de trabajo

CARTAGENA. El nuevo centro de formación naval, industrial y naviero que pondrá en marcha la Federación Regional de Empresarios del Metal (Fremm), formará a alrededor de tres mil alumnos y setecientos empleados y puede dar trabajo anualmente a cerca de 400 personas. Actualmente, el centro que la Fremm tiene en Murcia genera 800 empleos cada año.

Con una inversión que rondará los ocho millones de euros y una financiación público-privada, las administraciones local y regional han  empezado a mover sus fichas para que este propósito pueda empezar a hacerse realidad este mismo 2023, después de meses de parada. De momento, el Ayuntamiento de Cartagena perfila el borrador de la cesión de los terrenos para poder aprobarlo en Junta de Gobierno a lo largo de este mes. La ubicación en el polígono industrial de Los Camachos no es casual. Este espacio se tiene que convertir en el polígono de referencia de la comarca, si la Zona de Actuaciones Logísticas (ZAL) logra por fin salir de los escollos que ha ido solventando año tras año.

Por otro lado, El INFO -Instituto de Fomento de la Región de Murcia- aprobaba una ayuda de 245.000 euros a la Fremm para la puesta en marcha del centro de formación, tal y como avanzaba Murcia Plaza hace dos semanas.

"Avanza más despacio de lo que nos gustaría", decía Alfonso Hernández, presidente de la federación, pero añadía que si se despejan este año todas las dudas en cuanto a la financiación, "no habría problema para iniciarlo este mismo año".

Recordaba Hernández, que este nuevo proyecto surge por la necesidad: "estamos importando mano de obra. Tenemos la industria aquí y sin embargo, los empresarios no pueden aprovechar que tienen un polo industrial a nivel regional y un polo energético a nivel nacional porque les faltan trabajadores y tienen que traerlos de fuera. Pero no solo eso, sino que hay en marcha proyectos como la industria off-shore y Cartagena no tiene todos los centros formativos necesarios para cubrir esa demanda".

Respecto a la forma de financiación del mismo, admitía que será una colaboración público-privada, con un 70% público y un 30% privado a corto plazo. "Posteriormente, a lo largo del periodo de amortización del centro invertiríamos esos términos. Buscamos fondos europeos, tanto de Next Generation como otros". 

Un 2022 aceptable y un 2023 complejo

Por otro lado, el presidente de los empresarios del metal explicaba que el sector ha cerrado en la Región un  2022 aceptable, "si bien es cierto que en el último semestre ha bajado la cartera de pedidos. La industria regional ha aguantado mejor, pero se está resintiendo la economía y vamos a tener unos meses complicados. El año pasado se pudo salvar a nivel de resultados de las empresas vinculadas al metal, pero nos aguardan unos meses realmente complejos. Si todos vamos en la dirección adecuada, creemos que se pueda salvar de forma similar a la de la pandemia".