MURCIA. Almurarte, la asociación de Antiguos Alumnos y Amigos de Historia del Arte y Bellas Artes y del Patrimonio de la Región de Murcia, ha inaugurado este viernes una exposición en el Centro Social de la UMU en Espinardo en la que reúne '25 expresiones de arte no figurativo' de artistas vinculados a diferentes municipios murcianos.
Los participantes en esta muestra, que se podrá visitar hasta el 14 de octubre, son Aerovi, Aerovi; Cristina Cielo; Nels (Pedro A. Ferrer); Caridad Gil; Diego Maniso (D. Gómez); Gemma Hdez. Almansa; Pepe Hdez. Rubio; Maire Kalkowski; Agustín Lanza; Juan Lorenzo; Domingo Mtez, Garrido; Sergio Mtez. Pinar; Juan J. Molina Villaescusa; Aurora Montoya; Susanduty (Susana Morcillo); Lasoto (Cristina Pedreño); Felicia Puerta; José Luis Rojas; Miguel Ruíz Mazón; Carlos Saeteros; Manuel Sales; Ignacio Segarra; La Santa Patrona (Pastora Tomás); Fernando Vicente; y Carmen Villar.
El comisario de '25 expresiones de arte no figurativo', Pepe Hernández Rubio (coordinador de ALMT) señala que "el punto de inflexión que se produjo en el Arte Moderno de las primeras décadas del siglo XX tuvo mucho que ver con los avances técnicos y científicos, que trastocaron los fundamentos de la realidad conocida. El mundo del Arte se vio afectado por nuevas formas de creación. Pero los precedentes ya se encontraban en el Romanticismo, donde la subjetividad emocional se oponía a la visión convencional de la realidad, e incluso en el Impresionismo de Monet, que apostó por la autonomía expresiva de los colores. Y tanto el Postimpresionismo de Van Gogh como el de Cezanne determinaron el desarrollo de las vanguardias históricas, que forjaron contextos donde la figuración tenía cada vez menos cabida, en favor de la expresión interior. Por su parte, en literatura, los poemas de Rimbaud o de Mallarmé, y en música, las composiciones de Debussy, se convertían en instrumento del alma".
Igualmente, Pepe Hernández apunta que "la búsqueda de espiritualidad (Kandinsky), la depuración y la simplicidad (Mondrian), o la radicalidad formal (Malevich), entre otros, fueron rasgos creativos dispares, pero solo en apariencia, pues tenían en común la desaparición de la referencia del mundo visible. La abstracción era cada vez más asimilada, llegando a instar a una reflexión universal para alcanzar un arte transformador de la Humanidad". Además, añade, que "sabemos que, tanto el Dadaísmo como el Surrealismo fueron movimientos incuestionables que abogaron por la total libertad creadora, sin límites en el empleo de colores, formas o composiciones. Y más tarde, recordemos al Cubismo, al Expresionismo Abstracto o al Informalismo europeo con similares parámetros significativos y estéticos."
El elenco de obras de las '25 Expresiones de Arte No Figurativo' es un reflejo de las nociones anteriores. "Esta exposición pretende ser fuente de emociones y sentimientos. La pulsión interior del artista, la urgencia de plasmar sus obsesiones, su inquietud por investigar en el empleo del material utilizado, o la voluntad por difuminar las dimensiones habituales, son factores de primer orden que caracterizan un arte donde la figuración se reduce a la mínima representación, cuando no es directamente anulada", manifiesta.
"Es un arte donde, a menudo, 'se encuentra antes de buscar', donde no hay nada preconcebido o, por el contrario, donde se ha meditado profundamente lo que se quiere materializar. Es un arte donde caben innumerables propuestas, distintas técnicas, lenguajes y estilos. Pues bien, el grupo de artistas de esta exposición colectiva ha reflejado unas u otras ideas con su trabajo. Pese a la disparidad de sus trayectorias y experiencias, su fidelidad a un Arte inexcusable queda aquí felizmente demostrada", concluye Pepe Hernández.
