ALICANTE. La compañía de energías renovables del empresario alicantino Enrique Riquelme, Cox Energy, ya tiene manos libres definitivamente para poner en marcha su plan de rescate de Abengoa. Tras adjudicarse en abril las filiales concursadas de la multinacional sevillana, Riquelme ha venido inyectando recursos a cuentagotas en Abengoa, a la espera de que se agotase definitivamente la vía judicial.
En junio el juez ya rechazó el último recurso de Urbas, la promotora cotizada dueña de Ecisa que pugnaba con Cox Energy por hacerse con las empresas sevillanas, pero la promotora que preside Juan Antonio Acedo presentó un incidente de nulidad que ha sido definitivamente archivado este mes de julio, tal como ha adelantado este martes El Confidencial. Contra dicha resolución ya no cabe recurso alguno, por lo que Riquelme ya es definitivamente dueño de Abengoa.
Cox Energy ha diseñado un plan a cinco años para nutrir a Abengoa con el trabajo derivado de su pipeline en el sector fotovoltaico, sobre todo en Latinoamérica, y ha pasado los últimos meses desde la adjudicación de abril presentando dicho plan a inversores y entidades financieras para captar capital y renegociar la deuda concursal que debe devolver. Entre otros pasos, el pasado 3 de julio Cox Energy comenzó a cotizar en BME Growth, tras hacerlo desde 2020 en la bolsa de México.
Pese a tener 'congelado' su plan de reflote de Abengoa, Riquelme comenzó a hacerse cargo de las nóminas del personal de la sevillana, e incluso autorizó la contratación de 1.700 empleados más para hacer frente a la carga de trabajo que ha derivado a su nueva empresa. La firma andaluza, así, ha podido ir cubriendo sus compromisos internacionales y ha puesto en marcha algunos proyectos nuevos, aún con el freno de mano puesto.
En cuanto a Cox Energy, tras dispararse en sus primeros días de cotización en España, se ha estabilizado con el paso de los días. Aún así, sus títulos se han revalorizado cerca de un 22% desde que saltó al parqué hasta su último intercambio, este martes (a 2,11 euros la acción). De esta forma, su capitalización bursátil en España roza los 350 millones de euros, frente a los 285 millones en los que se valoró en su salida.