CARTAGENA. La concejalía de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Cartagena ha enviado a información pública la Evaluación de Impacto Ambiental del proyecto de Urbanización de la Unidad de Actuación 1 CP2 en Cabo de Palos, una parcela propiedad de Explotaciones Agrarias del Mar Menor, de 12,50 hectáreas y destinada a suelo urbano.
El plan de actuación tiene como objetivo desarrollar una zona urbanizable destinada principalmente a actividades terciarias, con un uso limitado para viviendas.
El proyecto de urbanización está sujeto a la normativa urbanística vigente, basada en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Cartagena de 1987, y en su versión refundida de 1995. La parcela tiene una superficie de 12,5 hectáreas y permite un uso terciario predominante con la posibilidad de integrar hasta un 30% de edificabilidad para uso residencial, con un número aproximado de 130 viviendas.
El proyecto de urbanización de la Unidad de Actuación 1 (UA1) del Plan Parcial del Sector CP-2 en Cabo de Palos, Cartagena, tiene como objetivo dotar a la zona de las infraestructuras necesarias para el desarrollo de un entorno urbano, tanto en términos de tráfico rodado como en la provisión de servicios básicos.
El proyecto incluye la construcción de cuatro calles principales: Calle "3", Calle G, Calle A y Calle B, las cuales permitirán el acceso y la circulación dentro de la urbanización. Estas vías estarán diseñadas para facilitar el tráfico rodado y el acceso desde la carretera de La Manga. Se contempla, además, la creación de calles secundarias, algunas de las cuales tendrán plataformas únicas que no permitirán la circulación rodada
La construcción de los viales requiere el desbroce de las áreas afectadas y la excavación del terreno, seguido de la compactación y estabilización del suelo para garantizar una base adecuada para los firmes y pavimentos. El firme estará compuesto de varias capas de materiales como zahorra artificial y aglomerado asfáltico, dimensionado para soportar las intensidades de tráfico proyectadas.
Se proyecta una red de abastecimiento de agua potable conectada a la red municipal, con valvulería para facilitar el seccionamiento en caso de roturas. Asimismo, se instalará una red de saneamiento de tipo separativo para la gestión de aguas residuales y pluviales.
La red eléctrica de media tensión será transformada en baja tensión mediante un centro de transformación proyectado, y se distribuirá por anillos subterráneos. Para el alumbrado público, se instalarán luminarias LED de alta eficiencia, con el objetivo de minimizar el impacto ambiental y garantizar un bajo consumo energético.
El proyecto incluye la creación de zonas verdes con especies autóctonas para minimizar el consumo de agua. Se fomentará el uso de pavimentos permeables para reducir la escorrentía, además de pequeños jardines de lluvia que permitirán la infiltración del agua.
En la Evaluación de Impacto ambiental se hace hincapié en que el plan tiene como principal compromiso el respeto al entorno natural, cumpliendo con medidas de protección tanto para la flora como para la fauna. Se destaca la reubicación de especies vegetales protegidas, el uso de especies autóctonas en zonas verdes, y la instalación de sistemas de iluminación de bajo impacto ambiental. Además, se evitará la utilización de alambre de espino en el cercado de las áreas de obra .
La gestión de residuos es un punto clave del plan, en el cual se asegura que toda la maquinaria y vehículos utilizados durante la obra tengan inspección técnica vigente. Las zonas de almacenamiento temporal de residuos estarán delimitadas y protegidas para evitar fugas, y se prohibirá la mezcla de residuos . En cuanto a las emisiones, se controlará el nivel de gases emitidos por la maquinaria y se prohibirá el acceso de cualquier equipo que no cumpla con los estándares.
Para minimizar el impacto visual y ecológico, se ha establecido un estricto control sobre las especies de flora y fauna que podrían verse afectadas. Los ejemplares de flora protegida serán trasplantados a otras zonas dentro del proyecto. Además, se implementarán medidas para proteger los hábitats naturales y fomentar la biodiversidad local, especialmente a través de la selección de especies vegetales autóctonas que requieran menos riego.
El plan establece un programa de seguimiento ambiental continuo durante la fase de obra.