El libro sobre la música de gasolinera del que todos hablan: Oro Jondo y su barroquismo lorquino

MURCIA. "Ni arte, ni diseño; pero no se lo pierdan". Así se refiere el lorquino Juan Sánchez Porta a su proyecto Oro Jondo, bajo cuyo sello crea diseños y obra plástica a partir de unos collages digitales "con un caracter kinki, canalla y barroco". La 'joya' de esta corona -que cabe imaginarse recargada y llena de pedrería- es un calendario kitsch, cuya presentación cada año en Madrid se ha convertido en una divertida cita a la que no falta buena parte del ambiente creativo de la capital (a no ser por una causa mayor como pudiera ser, pongamos por caso, una pandemia mundial). Ahora este artista de lo que él llama "cibercostrumbrismo" - asociado a lo hortera y lo cañí- ha publicado su primer libro, Dame más gasolina (Libros Cúpula), con el que recorre esa música denostada pero "profundamente arraigada en el imaginario popular", que todos hemos visto, y hasta comprado, en los expositores de estaciones de servicio y bares de carretera.

"Es música que se asocia a la clase popular, pero que no ha contado con el apoyo de la crítica y de la industria, por lo que no se ha hablado mucho sobre ella. Pero a mí me parece un tesoro a rescatar, porque ha forjado el imaginario de la cultura popular española", dice Juan Sánchez sobre esos temas que han triunfado sin un reconocimiento explícito. Porque, ¿quién no conoce, por ejemplo, Cuando zarpa el amor, de Camela? Este grupo, el segundo que más discos ha vendido en España, está en el top de la tecno rumba, que según el creador de Oro Jondo "es el estilo más icónico de la música de gasolinera". 

Pero también están en esta selección "toda la rumba vallecana de Los Chichos y Los Chunguitos; el flamenco yeye y pop; toda la balada gitana de Junco, Manzanita y Chiquetete; o las grandes divas de la copla, rollo Isabel Pantoja, Lola Flores y Rocío Jurados, que también son un clásico en los expositores", enumera Juan Sánchez Porta. Por cierto, los diseños llevan incorporados códigos QR vinculados a listas de reproducción de temas, actuaciones, entrevistas o momentos icónicos de los artistas destacados.

"Me encanta lo cañí, lo que se asocia a lo hortera"

Dame más gasolina ha sido un bombazo. "Todo el mundo quiere hablar del libro, porque el que más o el que menos se ha sentido identificado; porque en nuestro bagaje tenemos esta estética", razona el artista lorquino, quien apunta que "me encanta lo costumbrista, lo cañí, lo que se asocia a lo hortera, toda esta cosa tan kitsch, porque, al final, es la estética de la clase media, de la casa de mi abuela en Lorca, donde yo me he criado y donde he visto la televisión". De hecho, asegura que "Oro Jondo es la respuesta de haber crecido viendo Los vigilantes de la playa en una televisión con flamenca y tapete". 

Lo explica: "Yo me acuerdo de estar en casa de mi abuela, con su cuadro con ciervo y con su tapete en el sofá, viendo a Pamela Anderson corriendo con ese bañador y con esas tetas para arriba y para abajo; y era como estar en dos universos contrarios a la vez. Oro Jondo es la fusión de esos dos mundo. La gente se siente identificadas con estas mezclas. Mi proyecto viene de eso, de analizar de dónde vengo y de las estéticas con las que me he criado".

Y ya puestos a analizar, también busca el origen del barroquismo de sus imágenes. "Con el tiempo me he dado cuenta de que a lo mejor la herencia barroca me viene por ser de Lorca". También apunta a que "mi madre tenía una floristería y yo de pequeño la ayudaba a arreglar para las bodas esas iglesias lorquinas con retablos barrocos. Ahora veo lo que hago y pienso que también son retablos barrocos pero con dioses de la farándula, de la cultura popular e iconos de la actualidad". Se trata, en definitiva, de "esa herencia revionada y reformulada con una estética mucho más Internet, que es el medio por el que yo absorbo todo esto y por el que lo expongo y lo vendo". También están presentes en su obra "esas formas orgánicas de las flores y todo ese mundo de fantasía; es lo mismo que hacía mi madre, pero con otro formato y otra técnica".

Cuando fue la voz de una alarma de seguridad

Oro Jondo se ha hecho un nombre en los círculos creativos madrileños, pero el lorquino reconoce que "fácil no fue, me tuve que buscar las habichuelas". De hecho, tras licenciarse en Bellas Artes en la capital tuvo que compaginar trabajos a media jornada durante siete años hasta que se pudo dedicar exclusivamente a su proyecto, de esto hace apenas un año. "¿Sabes la voz que se oye cuando salta una alarma y dice: Está entrando en un inmueble protegido por Securitas Direct, por favor identifiquese con la palabra clave. Pues ese era yo", cuenta. "También estuve en una copistería 4 o 5 años haciendo fotocopias".

Ahora que ya se puede dedicar al cien por cien a Oro Jondo, diseñando camisetas, bolsas, carteles, joyas e, incluso, velas dedicadas a las Spice Girls, Juan Sánchez Porta ya se encuentra preparando el próximo calendario, que espera pueda protagonizar de nuevo uno de esos divertidos eventos que dan que hablar en Madrid; "tengo unas ganas que me muero", confiesa. Por cierto, este mes de mayo (el mes de Eurovisión), la página del calendario, titulada Que te jodan Céline Dion!, es un homenaje a la segunda mejor canción de toda la historia de Eurovisión: Quien maneja mi barca, de Remedios Amaya. Fue, asegura, "un temazo adelantado a su época. Esta canción, aunque de raíz flamenca, es pura sicodelia, y sumando la puesta en escena de Remedios, simple pero impactante al ir descalza, hizo que tanto España como el resto de Europa cortocircuitase por no estar preparados para ver como una gitana tan racial y auténtica mostrase una propuesta tan vanguardista como genuina en un escenario tan mainstream". "Digo que es la segunda mejor canción de la historia de Eurovisión porque la primera es Bandido de las Azúcar Moreno, obviamente", aclara.

Lo cierto es que "esta cosa costumbrista llevada a la estética Internet" dejó de ser exclusiva de creativos alternativos como Juan Sánchez Porta cuando irrumpió en escena Rosalía, que fue todo un bombazo, recuerda el alma mater de Oro Jondo. "Gracias a ella nos reconciliamos un poco con todo ese imaginario cañí, lo asociado con lo choni". Después llegó C. Tangana revisionando los cantantes cañí. "Antes si decías que te gustaba La Húngara te miraban raro, mientras que ahora, a raíz del temazo que han hecho juntos, mola que lo digas". "Por un lado me da rabia, pero por otro pienso que es genial, porque se está reconociendo a esa España de los márgenes y se está valorando lo que antes se criticaba", señala el lorquino que ha convertido el barroquismo de su tierra natal en Oro Jondo.