MURCIA. Devolver el esplendor de los años 50 a una vivienda de Murcia mal reformada en los años 70 desde esta segunda década del siglo XXI. Este 'más difícil todavía' fue el reto al que se enfrentó el estudio murciano Número 26 con un piso de 85 metros cuadrados con vistas al río Segura, ubicado en los conocidos Bloques de Bernal de Ronda de Garay -una de las primeras promociones inmobiliarias ejecutadas entre los años 40 y 50 en la Región-. Allí, Irene quería compartir vivienda y espacio de trabajo con su hija, del mismo nombre. El proyecto de 2020, que se bautizó como Casa Dos Irenes, ha sido objeto de interés por parte de diferentes publicaciones especializadas como Neo2 Magazine, AD España o Diario Design. 

Número 26 -el estudio liderado por Miriam Hernández y José Ángel Rodríguez que no para de recibir premios y menciones por su proyecto Casa MYM- se planteó una restauración imaginaria ya que, además de recuperar partes que ya existían, crearon otras nuevas con la intención de que pareciese que siempre habían estado allí. El piso oscuro del pasado recuperó su antiguo esplendor inspirándose en lo que podría ser el apartamento de un palazzo italiano, lleno de texturas, matices y serenidad. Está en Murcia, pero podría estar en cualquier lugar del mundo.

Espacio y memoria

"Partimos de una estructura rígida y clásica, por lo que hicimos una revisión del espacio y de su memoria", explican desde Número 26, cuyos profesionales crearon "un nuevo entorno, con concepto e identidad". A ello contribuyen los dos arcos que perteneces a la estructura original que se han conservado (uno de ellos se descubrió durante la intervención).

La reforma permitió, además, que la luz invadiese el espacio al añadirse tabiques de cristal. Se eligieron materiales acordes al pasado de la vivienda y se incorporaron otros nuevos para que se integraran en la historia de la casa. Como resultado, mezclas y contrates generan un ambiente único, elegante y con solera en este piso de Murcia.

"Hemos trabajado desde un discurso plástico, en donde interviene toda la selección de elementos, colores y materiales", afirman desde el estudio murciano, que define este estilo como 'neoplasticismo cotidiano'.

Número 26 es, según sus propias palabras, "un estudio de diseño interdisciplinar. Una consultoría creativa. Un proyecto artístico. Trabajamos creando, diseño de Interiores, espacios efímeros, retail, diseño gráfico, de producto, editoriales, dirección de arte. En nuestros proyectos intervienen el diseño, el arte y lo artesanal".