Fotos cedidas por: Alba, Lucía, Sergio y Yolanda. AAOC.
MURCIA. La Catedral de Murcia es historia viva. Así lo destaca la reciente investigación realizada por los alumnos de segundo de Bachillerato del IES José planes, donde los animales que se encuentran en ella se sometieron a estudio y arrojaron resultados sorprendentes como un unicornio, un cerdo, grifos, entre otros.
Para la capital murciana, un punto turístico de visita casi obligatoria es su Catedral, con origen de finales del siglo XIII, en la ubicación de lo que fue la Mezquita Mayor, se inicia el culto y sobre esta, se colocaría la primera piedra de la actual construcción durante el siglo XIV, aunque no se dejó de trabajar en ella hasta entrado el siglo XIX. De ahí que se aprecien distintos estilos artísticos en su estructura, como el gótico, barroco y el historicismo del siglo XIX.
El estudio realizado por los alumnos Lucia Martínez Vicente, Alba María Hernández Expósito, Sergio Valera Martinez y Yolanda Murcia Rodríguez, sobre el Bestiario de la Catedral, se convirtió en una mitoguía para conocer en profundidad y con una visión distinta, los secretos de la Catedral, a través de los animales que habitan en sus paredes. Orientados y documentados por la profesora de Latín y Griego, del Instituto José Planes, Rosa Almaida Martínez, quien, junto con sus alumnos, buscan "fomentar el valor del patrimonio de nuestra ciudad", resalta Sergio, quien orgulloso muestra el trabajo del equipo.
La visión de la mitología, el cristianismo y los animales representados van de la mano, sí, los une el lazo de la divinidad. Los griegos adoraban distintas representaciones, así como los animales poseían su singular significado, como los describe Plinio El Viejo.
En los rincones de la Catedral se encuentran un sin fin de animales, aquí encontrarás un pequeño recorrido, pero esto no será suficiente aún hay más por conocer. Una propuesta es ir identificándolos en el recorrido, o bien, con la guía en mano, buscarlos en los puntos señalados. En sus manos está cómo vivir esta aventura.
Desde sus distintas caras, la Torre de la Catedral esconde una serie de animales, unos mitológicos, otros no, entre los que se encuentran los leones con cuernos, bucráneos, cabras, mantícoras (una quimera con cabeza de león) y las górgonas (cabeza de mujer con serpientes en lugar de cabello). Todos ellos con la intención de generar miedo o arrepentimiento en los feligreses.
Al pararse frente a la Puerta de los Apóstoles, un león, un grifo, un cerdo y dos perros entrelazados se aprecian en el arco que le acompaña. Se presta a la interpretación de algunos pecados capitales como: la ira, a través del cerdo y la avaricia con los perros. Los grifos se asocian a la luz y la fuerza, un águila y un león lo conforman.
En su exterior, la Capilla de los Vélez posee un escudo custodiado por perros, de raza lebrel, que pueden simbolizar la cacería de almas, o bien, ser los guardianes del rebaño. En su interior, guarda a un unicornio, señal de pureza y poder, muy cerca, está el cerdo como señal de sometimiento.
En la Capilla de Junterón, una tortuga como ejemplificación de la sabiduría y la prudencia, quizá su forma pausada de andar la convierte en la espera y paciencia, aunque para el cristianismo es un símbolo de lujuria y bajeza, por no poder superar el nivel del suelo. En un lateral, se aprecia un dragón, señal de fuerza. Los romanos lo consideraban un símbolo de poder, mientras que en la era de Cristo es considerado como una señal del mal, al cual hay que eliminar.
Sólo hay que levantar la vista un poco, y si esto no es suficiente, utilizar el móvil le acercará al resto de tesoros que hay, a lo largo y ancho, del recinto de la Catedral de Murcia y con el Bestiario a mano, disfrutará del trabajo realizado por estos jóvenes que "queremos enriquecer el patrimonio de la Región", así lo destaca Alba Hernández.
