De izquierda a derecha en la primera fila: Begoña Sanz (A&G), Carlos Muro (Banca March), Antonio Jiménez (GVC Gaesco), Javier Gómez (Andbank), Jesús Villegas (Renta 4 Banco), José Gregori (Welzia Management) y José Manuel García (atl Capital). Debajo siguiendo el mismo orden: José María Ferrer (Colectual), Julio de Miguel (Wealth Solutions), Luis Capilla (Mirabaud), Mónica Blesa (Caixa Popular), René Bauch (gCapital Wealth Management), Luis Herrero (Singular Bank) y Héctor García (Diaphanum)
MURCIA. 'Las exigentes medidas 'antimariachis' se llevan por delante 1.108 sicavs entre enero y noviembre'. Así titulaba este diario el pasado 18 de diciembre sobre el contínuo goteo de cierres, transformaciones o integraciones principalmente en fondos de inversión. Por no hablar de la huida hacia otras jurisdicciones -Luxemburgo se lleva la palma- de estas sociedades de inversión de capital variable.
Hablamos de uno de los mayores 'caladores' que históricamente ha tenido la banca privada en España, por lo que debe ofrecer alternativas en la gestión patrimonial. Y no solo eso, que se adaptan a las necesidades de una clientela de alto valor añadido. Private equity (capital riesgo o privado), financiación participativa, sociedades de inversión libre, unit linked (fondos de seguro diversificado), socimis (sociedades anónimas cotizadas de inversión inmobiliaria) ... el abanico sigue siendo amplio.
Ante esta tesitura, y para saber qué alternativas les quedan a los grandes patrimonios -incluyendo las que van a quedar en pie siempre y cuando cumplan los duros requisitos-, Grupo Plaza ha recogido la opinión de 14 destacados financieros. A continuación sus declaraciones:
José Gregori, director de Welzia Management en Valencia
Las sicavs han sido un instrumento muy utilizado por los grandes patrimonios y grupos familiares a la hora de canalizar las inversiones financieras. Sin embargo, con la nueva regulación la mayoría ha optado por disolverse, traspasando el patrimonio a fondos de inversión con pasaporte español. Esta es la primera alternativa, la más evidente, puesto que continuamos beneficiándonos del diferimiento fiscal y ganamos la 'traspasabilidad' que tienen los fondos para las personas físicas. El patrimonio se puede gestionar a través de una cartera de fondos de inversión diversificada, adaptada al perfil de riesgo de cada partícipe y accediendo a 'clases limpias', con un menor coste para el inversor.
Otra alternativa es la constitución de una SIL (Sociedad de Inversión Libre), que tiene menos limitaciones en las inversiones que se realizan, pero exige un mayor nivel de conocimientos por parte de los inversores. También existe la posibilidad de canalizar las inversiones a través de una SCR -Sociedades de Capital Riesgo-, que disfrutan de algunas ventajas fiscales; aunque limitan las inversiones y de hecho estas difieren enormemente de las que se realizaban en las sicavs. La liquidez es menor y los periodos o compromisos de inversión son forzosamente a plazos más largos.
Y, por supuesto, existe la posibilidad de mantener la sicav, cumpliendo las nuevas exigencias para seguir con el tipo reducido, o continuar tributando como cualquier otra sociedad al 25%. Desde Welzia Management, hemos trabajado con cada cliente de forma individualizada, analizando su situación y necesidades, realizando 'trajes a medida' para cada uno de ellos ya que creemos que no hay una solución idéntica para cada inversor.
Carlos Muro, director Territorial Banca Patrimonial Levante de Banca March
Como grupo especializado en banca privada tenemos servicios de asesoramiento y gestión discrecional de carteras (GDC), así como todo tipo de productos exclusivos que se adecúan al perfil de cada inversor. Desde 2016 ofrecemos alternativas para los clientes de sicavs y hemos demostrado una gran capacidad de innovación y anticipación a la hora de lanzar productos para banca privada.
Lo hemos hecho con propuestas rentables en todos los perfiles, desde los ahorradores más conservadores hasta los inversores más sofisticados: Coinversión -líquida en forma de sicav institucionales e ilíquida a través de proyectos de economía real, ámbito en que somos pioneros desde hace más de dos décadas-, servicio de asesoramiento y GDC de valor añadido, fondos alternativos, fondos de fondos de private equity (March Private Equity), inversión sostenible, fondos temáticos (March Asset Management) y productos de ahorro a largo plazo especiales para clientes de Banca Privada y Banca Patrimonial, como los unit linked desarrollados por March Vida.
En esta línea, queremos destacar que nuestras sicavs institucionales -Torrenova, Bellver y Lluc-, suman un patrimonio de unos 1.500 millones de euros a finales de octubre. Cuentan con una larga trayectoria y cumplen con creces los requisitos de la nueva normativa. Los tres instrumentos se enmarcan en las propuestas de Coinversión líquida de Banca March. A través de dichas sicavs, Banca March adapta su oferta de coinversión en activos tradicionales cotizados a los perfiles de inversión conservador, moderado o decidido, respectivamente. Son vehículos diversificados, multiactivos, con visión global y gestión activa. Cualquier cliente puede acceder de forma sencilla a ellos, con una única acción, desde unos 10 euros.
El patrimonio que gestiona Banca March no ha hecho más que crecer, incluso en la situación de mercados tan compleja que se ha vivido este año, porque la entidad cuenta con la oferta de productos más completa y ofrece a cada cliente una solución a su medida. El volumen de negocio de las áreas de banca patrimonial y privada se situaba a finales de octubre en 23.000 millones de euros, con un crecimiento del 19% respecto al mismo mes de 2021.
Julio de Miguel, director de Wealth Solutions en València
Ante la desaparición mayoritaria de las sicavs en España debido a los cambios en la fiscalidad aplicable a estos vehículos introducidos en 2022, surgen dudas sobre posibles alternativas que las sustituyan. Una de las que ha emergido sobre las demás son las Sociedades de Capital Riesgo (SCR), pero en realidad no son muy comparables. En realidad, el vehículo más equiparable a las sicavs serían los fondos de inversión por su tributación más similar; de hecho el patrimonio de muchas sicavs ha acabado en fondos de inversión. Lo único que son productos de inversión colectiva donde se requiere a los inversores definir y construir su política de inversión -y los cambios de cartera- para el caso de los inversores a través de sociedades ahora son más gravosos fiscalmente.
Aunque el mercado se tienda a asimilar ambos vehículos, la realidad es que son bien distintos y es importante entender sus diferencias para ver su idoneidad para cada tipo de inversor. Las sicavs son vehículos que invierten en activos líquidos en su mayoría -acciones, bonos, divisas, fondos de inversión...-, mientras que las SCRs invierten en empresas o fondos de capital riesgo, sin liquidez a medio-largo plazo. Como inversores debemos comprometernos con la SCR un mínimo de varios años, durante los cuales se va construyendo el programa de inversión.
El proceso de inversión en las SCRs es más complejo por varias razones:
Actualmente este tipo de inversiones se han popularizado ya que hay muchos inversores se han inclinado sobre las SCRs por los actuales beneficios fiscales. Sin embargo, estas ventajas no se pueden garantizar de manera indefinida, pues podrían verse modificadas a futuro. Algunos ejemplos recientes de modificaciones fiscales han sido las instalaciones fotovoltaicas del decreto 661, los unit linked, las propias sicavs o las también las socimis. Las modas son peligrosas en las inversiones, como la historia demuestra desde los comienzos del siglo XVII con los tulipanes en Holanda, que llegaron a valer más que las viviendas, pasando por la crisis de las puntocom, las burbujas inmobiliarias o los recientes criptoactivos.
Dicho todo esto pensamos que la forma de tener éxito no está tanto en el vehículo sino en el proceso de inversión, definiendo primero los objetivos patrimoniales y posteriormente como trasladarlos a parámetros de inversión.
René Bauch, cofundador de gCapital Wealth Management EAF
Podemos observar a través de los 'Últimos Avisos, Hechos Relevantes y Otra Información de Interés de sicavs' en la web de Bolsas y Mercados Españoles (BME), vemos casi únicamente aparecen acuerdos de baja, disolución y liquidación con su correspondiente revocación administrativa y baja en el Registro de Sociedades de Inversión de carácter financiero. La controversia social y política, que siempre han suscitado las sicavs junto a la incertidumbre en la regulación y sobre todo con la reciente aprobación de la ley 11/202, ha propiciado a que el número de estas haya disminuido de forma alarmante. Sólo hay que mirar el gran número que han cambiado de domicilio a Luxemburgo estos últimos años. Lo que la nueva legislación pretende es evitar que un número pequeño de accionistas puedan controlar la gestión de una sicav y además beneficiarse de una tributación al 1% en el Impuesto de Sociedades (IS). Quienes no cumplen con la ley de medidas de prevención y lucha contra el fraude fiscal, estarán sujetos a una tributación del 25%. De ahí que varias de las grandes fortunas se han adecuado a las nuevas exigencias legales y van a mantener su sicav, que ahora caerá bajo la inspección de la Hacienda Pública y no de la CNMV.
Conjuntamente se ha aprobado un régimen transitorio de neutralidad fiscal, bastante benevolente por cierto, que permite la exención de tributar por las plusvalías acumuladas para quienes deciden después de la disolución y liquidación reinvertir su cuota de liquidación en IICs (Instituciones de Inversión Colectiva) españolas. Estas pueden ser fondos de inversión españolas o de otro país comunitario, sicavs que cumplen la nueva legislación o en una institución de inversión colectiva libre o hedge fund o fondos de cobertura, lo que viene a ser muy recomendable para quienes quieran seguir beneficiándose del 1% de tributación en el IS.
A la hora de elegir el vehículo financiero, el inversor tendrá que analizar rigurosamente sus necesidades y preferencias. Por ejemplo, los fondos de inversión libre no son recomendables para cualquier inversor -debe ser cualificado-, los niveles de riesgo son más alto y no siempre asumibles por el inversor, la liquidez es menor y los costes de gestión y comisiones suelen ser altos. Sin embargo, si el accionista opta por traspasar inversión a un fondo de inversión podrá elegir los productos que mejor se ajusten a su perfil de inversor y con mayor probabilidad de cumplir con los objetivos financieros fijados. Lo mismo le pasa si elige seguir siendo accionista de una sicav que sí cumple con los requisitos de la nueva ley; y mejor todavía si esta tiene 500 partícipes para aprovecharse de los traspasos fiscales para operaciones futuras.
La transformación de la sicav en una sociedad limitada o anónima es otra posibilidad. En este caso, la inversión no estará sujeta a ninguna supervisión por parte de la CNMV permitiendo la inversión en private equity (capital privado) o inmobiliario, pero la tributación no es la más favorable ya que se realizaría al 25%. Lo verdaderamente interesante en el caso de las sociedades limitadas es podrá acogerse al régimen de empresa familiar y estar exenta de tributar en el Impuesto sobre Patrimonio.
Tras todas estas conversiones/ transformaciones de las sicavs hay siempre un tema de control del patrimonio y tributario. Se ha querido romper el modelo por estar muy 'intoxicado'. Está claro que la mayoría de los accionistas de las sicavs van a traspasar sus cuotas de liquidación a fondos de inversión para mantener la tributación, la liquidez y tener acceso a un universo más amplio de posibilidades de inversión.
Luis Capilla, director del Banco Mirabaud en València
La alta volatilidad y la escalada de tipos que han marcado 2022 han evidenciado lo acertado de la estrategia de Mirabaud: la inversión basada en la convicción, la gestión activa y diversificada, la integración de los criterios ESG/ASG -ambientales, sociales y de gobierno corporativo- y la visión a largo plazo. Unas señas de identidad de nuestro modelo de inversión más relevantes que nunca.
De cara a 2023, en Mirabaud creemos que puede haber buenas oportunidades en soluciones de inversión privada diferenciadoras y exclusivas. En este sentido, lanzaremos propuestas adaptadas a las necesidades de nuestros clientes. Lo haremos poniendo a su disposición la experiencia de un experto equipo de profesionales que les ayudan a superar sus retos, impulsar su negocio y lograr un éxito sostenible a largo plazo.
En private equity hemos desarrollado tres estrategias únicas que contribuyen a la diversificación de la cartera de nuestros clientes:
Desde el punto de vista de la renta fija, el año que acaba de comenzar hay que afrontarlo desde la flexibilidad y adaptación que requiere un mercado agitado y cambiante. Esto permitirá captar las oportunidades que surgirán en el extremo más arriesgado del espectro crediticio, principalmente en empresas de alto rendimiento.
Finalmente, y adelantándonos al eminente cambio de ciclo que se producirá en 2023, en renta variable hay que adelantarse al mercado. Por eso, en Mirabaud ya estamos posicionados para aprovechar esta nueva etapa apostando por empresas que cotizan a niveles atractivos y representan inversiones robustas por derecho propio, con drivers estructurales y temáticos. Asimismo, reforzamos nuestra apuesta por los convertibles, una opción interesante al ser un activo diseñado para entornos complejos por su natural asimetría entre la renta variable y los bonos.
Jesús Villegas, director de Renta 4 Banco en Castellón
Acabamos de terminar un año muy complejo en cuanto a la gestión patrimonial. No me refiero solo a la negativa evolución de los mercados financieros, tanto en renta variable como en renta fija, sino a las dificultades para encontrar ese vehículo adecuado que me sirva para canalizar y gestionar eficientemente el patrimonio familiar. La sicav era ese vehículo que ha pasado a mejor vida y que ahora hay que encontrar ese sustituto que genere estabilidad legal para los próximos años.
Además de los tradicionales fondos de inversión, ETFs (fondos cotizados), valores, emisiones de deuda... encontramos alternativas en los unit linked y los cada vez mas boyantes private equity. Y son estos últimos los que, a priori, pueden satisfacer el objetivo de una gestión eficiente donde se combine una muy atractiva rentabilidad junto a un muy interesante tratamiento fiscal, aunque hay que tener muy en cuenta las características propias de este tipo de inversiones.
La pedagogía y la proximidad es muy importante en cualquier proceso de inversión, pero lo es mas aún a la hora de invertir a través del capital riesgo ya que tiene unas características muy específicas. De hecho, podemos diferenciar entre la inversión a través de Fondos (FCR) y a través de Sociedades (SCR). Mientras que en el primer caso los compromisos suelen ser desde 100.000 euros, en el segundo parten desde el 5% del patrimonio del fondo. Y es ahí donde -cumpliendo una serie de requisitos- las ventajas fiscales son muy interesantes, ya que tanto los dividendos como las ganancias de capital están exentos en el 95% (art. 21 LIS) del IP y sin obviar las cuestiones en cuanto a Sucesiones y Donaciones.
Otros aspectos muy positivos son que se tratan de inversiones a muy largo plazo, que está totalmente descorrelacionado de los mercados, ya que se invierte en activos y en empresas no cotizadas. Todo ello obteniendo unas rentabilidades superiores y que se coinvierte con los gestores del fondo, por lo que los intereses están inequívocamente alineados.
Javier Gómez, director territorial de Andbank en la Comunitat Valenciana
Tras el cambio en el régimen fiscal, la mayoría de los accionistas de las más de 130 sicavs gestionadas por Andbank decidieron disolverlas con acogimiento al régimen transitorio aprobado, que permite a los socios reinventir la cuota de liquidación en instituciones de inversión colectiva españolas con diferimiento en la fiscalidad de las plusvalías acumuladas. Este régimen fiscal favorable ha permitido que, una vez disueltas, los socios personas físicas hayan podido diversificar la cuota que les correspondía en la liquidación en carteras de fondos de inversión -nacionales o extranjeros- manteniendo el régimen de diferimiento previsto en la normativa del IRPF.
Algunas sicavs han optado por su transformación en Sociedades de Inversión Libre. Esta ha sido una opción recomendable a aquellas a las que encajaba la filosofía de inversión y gestión propias de este tipo de estas figuras financieras, con mayor concentración del riesgo y de activos ilíquidos si las comparamos con las sicavs. Otras de estas sociedades han mantenido su condición con tributación al 1% en el Impuesto sobre Sociedades (IS) por cumplir los requisitos de difusión entre accionistas -100 con al menos una participación de 2.500 euros- y otras -en menor medida- han optado por mantener su régimen legal con tributación al tipo general del IS (25%) sobre todo por dos motivos: la posibilidad de ofrecer liquidez a los accionistas y la necesidad de mantener el estilo de gestión. Por último, algunas han renunciado al régimen de sicav, quedándose como Sociedades Anónimas o transformándose en Sociedades Limitadas. En algunos casos con la idea de cambiar su estrategia de inversión -hacia activos inmobiliarios por ejemplo- o la transformación en Sociedad de Capital Riesgo familiar.
Andbank ha ofrecido a cada accionista todas las opciones y esto les ha permitido optar por aquella que más se ajusta a su perfil inversor y de riesgo, puesto que no hemos ofrecido una única solución para todas las sicavs ni para todos los accionistas. La esencia de la banca privada y la gestión patrimonial es la personalización del servicio bajo la premisa de que cada cliente es diferente, al igual que sus necesidades y sus objetivos y estrategias en la gestión de su patrimonio. Tras la desaparición de las sicavs mantenemos esa misma filosofía y cobran protagonismo -yo diría que mayor- otras alternativas eficientes para la consecución de uno de los principales objetivos en la gestión del patrimonio como es la protección del mismo, como son los seguros de vida unit linked que permiten realizar una gestión activa y, además, siguen siendo eficientes en el diferimiento de la fiscalidad.
Antonio Jiménez, director territorial de GVC Gaesco en la Comunitat Valenciana
Se termina el año y nos acercamos a la fecha límite de la Ley 11/2021 de medidas para la prevención y lucha contra el fraude, que entró en vigor el 1 de enero y permitía a las sicavs españolas acogerse al régimen transitorio, pero eso sí siempre y cuando estas decidieran disolverse y liquidarse antes de finalizar el ejercicio 2022. El requerimiento de mantener 100 accionistas con al menos 2.500 euros cada uno para poder continuar con la tributación del 1% y no del 25% ha provocado que más del 85% de las sicavs españolas se disuelvan en nuestro país y busquen alternativas a estos vehículos.
Dentro de las opciones posibles, los accionistas de las sicavs han tenido que plantearse cuál de ellas se adaptaba mejor a sus necesidades. En general, aquellas con mayor volumen han decidido mantenerse como sicavs, otras se han fusionado para cumplir los requisitos de la legislación y una gran parte han optado por acogerse al régimen transitorio y traspasar simplemente sus posiciones a uno o varios fondos de inversión o a un fondo de inversión libre (hedge fund) o a una sociedad de inversión libre, evitando de esta forma la tributación de las plusvalías latentes.
Otros grandes inversores han optado por asumir su coste fiscal y crear un nuevo vehículo de inversión en su gran mayoría en Luxemburgo mediante una sicav luxemburguesa o fondos de capital riesgo.
En definitiva, todo este cambio regulatorio ha forzado que de las 2.334 sicavs que existían a finales de 2021, más del 85% hayan anunciado a fecha de hoy su intención de disolverse. Todo ello con un importe aproximado de unos 11.250 millones, forzando a los inversores a buscar alguna de las alternativas anteriormente comentadas.
José María Ferrer, director general de Colectual
En Colectual ofrecemos a los inversores, tanto particulares como profesionales, un activo de inversión muy poco conocido: los préstamos a empresas. Y se conoce poco porque hasta que aparecimos las plataformas de crowdlending, los préstamos a empresas estaban sólo al alcance de entidades financieras, para quienes históricamente han sido la base de su negocio.
Los préstamos a empresas son operaciones financieras que se conceden tras analizar los proyectos empresariales de los solicitantes y han de ser reembolsadas con los intereses y en los plazos pactados. Constituyen una categoría de inversiones alternativas, que tiene unas características muy interesantes para cualquier inversor:
Todo ello hace que los préstamos a empresas sean un activo ideal para equilibrar carteras de inversión, aportando diversificación y rentabilidad. No obstante, hay que tener claro que son un activo de riesgo. Es necesaria una gestión profesional en la generación, análisis y selección de los proyectos, para mitigar los riesgos y evitar problemas.
Colectual es una compañía regulada por CNMV donde seleccionamos proyectos de compañías de calidad, que puedan acreditar con su actividad la generación de recursos para el reembolso del préstamo. Ponemos el foco en sectores resistentes a la crisis y compañías con ingresos recurrentes.
José Manuel García, socio director de atl Capital en la Comunitat Valenciana
Con la regulación sobre difusión accionarial que se exige a este tipo de sociedades -al menos 100 participes con un capital mínimo de 2.500 euros- se hace muy difícil el desarrollo de este tipo de vehículos en la práctica a futuro. De hecho, la inmensa mayoría se han liquidado en este ejercicio acogiéndose al régimen provisional facilitado por el legislador. Centrándonos en las distintas opciones que tienen los grandes patrimonios para canalizar sus inversiones, destacar que las opciones son múltiples y variadas donde la elección de unas u otras dependerá de la casuística, objetivos y necesidades de cada grupo familiar.
En el plano de la inversiones financieras cotizadas, deberíamos distinguir si el inversor final será persona física o jurídica. En el primer caso, operar a través de fondos de inversión con el libre traspaso fiscal que permiten nos parece una fórmula plenamente eficiente y que, además, facilita la inversión en un universo muy amplio de activos. En el caso de inversor persona jurídica, y al no existir el libre traspaso entre fondos, las posibilidades se limitan de manera considerable. En todo caso, existen alternativas en otras jurisdicciones para patrimonios elevados que permiten optimizar las inversiones financieras, como por ejemplo el caso de Luxemburgo dónde existen distintos vehículos con un funcionamiento muy similar a las sicavs españolas.
El caso de la inversión a través de Fondos o Sociedades de Capital Riesgo (FCR o SCR) nos parece una alternativa muy sólida para grandes patrimonios, tanto por las rentabilidades que ofrecen como por la diversificación. Dichos instrumentos invierten en activos ilíquidos o no cotizados -empresas en crecimiento, startups, infraestructuras, fondos de capital riesgo...-, por lo que teniendo en cuenta la temática de la inversión no nos parece un sustituto de las inversiones financieras, sino un complemento. En nuestra opinión, cualquier grupo familiar tendría que tener bien compartimentado la parte que dedica a activos financieros y la parte de alternativos o ilíquidos. Como estructurar jurídicamente cada activo dependerá del caso de cada grupo familiar.
Luis Herrero, director de Singular Bank en València
Las personas físicas que han optado por disolver las sicavs en las que participan ante el endurecimiento de los requisitos para poder mantener el régimen fiscal especial de estos vehículos -tributación al 1% en el Impuesto sobre Sociedades- articularán su inversión a futuro mayoritariamente a través de participaciones en diversos fondos de inversión, entre otras razones, porque la inversión en fondos es una de las exigencias para poder disolver la sicav con neutralidad o diferimiento fiscal de las plusvalías.
La disolución de la sicav ha tenido peor acogida en aquellas situaciones en que los socios mayoritarios son personas jurídicas, ya que éstas no pueden hacer ulteriores traspasos entre fondos de inversión con diferimiento fiscal por lo que han estos casos ha sido frecuente la transformación de estas sociedades en otro tipo de vehículo.
La inversión en vehículos de capital riesgo (FCR y/o SCR) está despertando un creciente interés entre los inversores por su protección' frente al incremento de la inflación, la creciente volatilidad de los mercados tradicionales cotizados -renta variable y renta fija- y la diversificación y descorrelación que ofrece cuando se incluye ésta clase de activo en las carteras financieras.
Esta estrategia de inversión en capital riesgo es distinta a la perseguida a través de las inversiones en sicavs y/o fondos UCITS, dado que estos últimos vehículos se utilizan para la inversión en activos líquidos negociados en mercados organizados y la inversión en vehículos de capital riesgos se focaliza fundamentalmente en la inversión en activos privados no cotizados y, por tanto, ilíquidos siendo además su horizonte de inversión el largo plazo (8-10 años).
Mónica Blesa, directora de Banca Privada de Caixa Popular
Caixa Popular dispone de una amplia gama de productos y servicios para ofrecer diferentes alternativas a los grandes patrimonios. La clave está en el asesoramiento personalizado que ofrecemos, donde lo más importante es tener en cuenta las características de los clientes desde todos los puntos de vista, personal, familiar, empresarial y, obviamente, fiscal. En la banca de grandes patrimonios es vital realizar un traje a medida a cada cliente, intentando comprender correctamente cuáles son sus objetivos vitales para poder ajustar nuestras recomendaciones a lo que cada uno necesita.
Disponemos desde los productos más sencillos para cubrir las necesidades diarias de los clientes, hasta productos y servicios más complejos como pueden ser la gestión discrecional de carteras, donde el cliente delega la toma de decisiones a un gestor profesional en base a un perfil de riesgo y horizonte temporal determinado, el asesoramiento en fondos nacionales e internacionales, sin olvidarnos de las inversiones con aspectos ASG/ESG, el asesoramiento en renta fija o renta variable de cualquier tipología o país, la recepción y transmisión de órdenes con una amplísima gama de fondos y ETFs.
También contamos con una oferta en inversiones alternativas ilíquidas, pues esta tipología de clientes busca con buen criterio una amplia diversificación de sus inversiones. Todo ello con una visión global del cliente que tenga en cuenta la planificación fiscal adecuada de sus inversiones.
Begoña Sanz, banquera privada de A&G
Desde A&G ofrecemos a nuestros clientes todas las opciones más adecuadas ante el cambio de ley; recordemos que la última ley de medidas de prevención y lucha contra el fraude fiscal establece nuevas condiciones para que las sicav sigan tributando al 1% en el IS -cada uno de sus al menos 100 socios deben alcanzar una inversión mínima de 2.500 euros o, de lo contrario, tendrán que tributar por un 25% de su beneficio-, y en cuanto al régimen transitorio para la disolución bonificada, se ha permitido durante 2022 acordar la disolución y liquidación de estas sociedades sin costes fiscales y diferir la tributación de las ganancias derivadas de la liquidación, siempre que los accionistas reinviertan la totalidad de su cuota de liquidación en otras instituciones de inversión colectiva.
Esta sería la primera alternativa: acordar la disolución de la sociedad de inversión de capital variable, liquidar los activos y traspasarlos a fondos de inversión convencional para no tener que tributar por las plusvalías latentes. El fondo de inversión podrá estar domiciliado en España o posteriormente en otro país comunitario donde los de Luxemburgo son los que tienen más tirón. Esta alternativa puede resultar interesante para las personas físicas pero no tan eficiente para las personas jurídicas.
En cualquier caso, la normativa financiera y fiscal española plantea otras alternativas nacionales e internacionales como destinar el patrimonio a un fondo de inversión libre o a una sociedad de inversión libre. Los dueños de las sicav también podrían asumir el coste fiscal de la liquidación (IRPF) e iniciar un nuevo vehículo como un fondo de inversión especializado en Luxemburgo (SIF-Lux).
Otra opción es iniciar un proceso de redomiciliación, que podría ser un SIF o una sicav luxemburguesa. Asimismo también pueden optar por transformar la sicav en una sociedad anónima o una sociedad limitada; en otro vehículo de inversión SIL, SCR así como fusión con otra sicav o FCP. Lo importante es que cada cliente tenga la solución más idónea y por eso en A&G contamos con un equipo experto desde hace más de 20 años para planificar el patrimonio.
Héctor García, socio de Diaphanum y responsable de la zona de Levante
La situación que se ha vivido estos últimos años con las sicavs ha supuesto que las entidades especializadas en gestión de patrimonios hayan tenido que esmerarse en buscar alternativas óptimas para los clientes que han decidido abandonar ese formato de inversión. Es cierto que las posibilidades eran múltiples, pero solo unos pocos han conseguido continuar con la sicav como vehículo y la mayoría han tenido que derivar sus ahorros a distintas formas de gestión.
No cabe duda que la sicav es prácticamente la mejor versión fiscalmente, sobre todos para los mas proclives a tener una gestión activa y personalizada, pero su cambio de régimen ha provocado que se ponga el foco en otras ideas como las carteras de fondos gestionadas, los unit link, los compartimentos o incluso las sociedades de capital riesgo. Ninguna es perfecta pero por lo menos el abanico es amplio para poder elegir y buscar el mejor traje a medida.
El mundo de la gestión patrimonial se basa en la atención y servicio a cada perfil y circunstancia de inversor de manera personalizada. Una vez más se ha demostrado que lo que subyace ante cualquier 'tsunami' normativo como el que ha acabado con muchos años de régimen fiscal de las sicavs es la búsqueda de soluciones eficientes y a medida. Todo ello ha provocado el desarrollo distintas vías de salida, así como nuevas formas de mejorar las carteras. Y no solo con activos tradicionales sino con la inclusión de los famosos productos ilíquidos que mejoran -y demostrado está- el binomio rentabilidad/riesgo.