CARTAGENA. El consejero de Fomento, José Ramón Díez de Revenga, ha tenido que salir al paso de las críticas y quejas que se han proferido sobre el aspecto que presenta el carril bici de La Manga, cuya nueva pintura no ha pasado desapercibida para nadie. "Chapuzas Manolo y Benito" , "Qué burrada" y "Parece la orilla del mar" son algunos de los comentarios pronunciados estos días por parte de los vecinos sobre una obra, todavía sin acabar, que pavimentará seis kilómetros del itinerario ciclista del inicio de La Manga del Mar Menor y la recorrerá de norte a sur con una longitud total de 18 kilómetros.
Díez de Revenga, ante las protestas, de las que se hizo eco este periódico, reaccionó con un mensaje en las redes sociales en el que prometía un final feliz. "Me llegan quejas sobre acabados deficientes en el carril bici de La Manga", decía. "Esa obra está sin acabar, así que lógicamente ese no es el aspecto que tendrá finalmente", comentaba, apostillando: "No se preocupen, que el resultado final será impecable. Estamos dejando La Manga bonita para turistas y visitantes".
Precisamente los vecinos de La Manga no están para bromas, y menos con las obras que cada verano asaltan la zona y se convierten en un engorro para los que allí tratan de pasar su época estival. Al ver el estado que presentaba el aspecto del carril bici, muchos de ellos acudían a las redes sociales para expresar su malestar. Algunos, incluso, dibujaron de forma irónica una semiesfera para asemejar los manchurrones a medusas.
La actuación de Fomento, que se enmarca en la estrategia regional La Manga 365, cuenta con una inversión de 836.000 euros cofinanciada al 80% por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder) y el resto por la Comunidad. Fuentes de la Consejería explicaban a este diario que la obra no está acabada y que cuando lo esté, se asegurarán de que esté en perfectas condiciones, por lo que no presentará el aspecto actual, que tantas críticas está levantando entre los visitantes y vecinos de la zona. "Cuando concluyan las obras, como todas las que se contratan desde la Consejería, se supervisará y si se encuentra algún desperfecto o error, se subsanará", detallaban las mismas fuentes.
En distintas partes de este tramo se ha utilizado el pavimento denominado slurry, que tiene propiedades antideslizantes y ofrece una mayor resistencia a los rayos ultravioletas, los cambios climatológicos y el tránsito de vehículos de bajo peso tipo bicicletas. Otra de las cualidades de este material es que es fácilmente perceptible por los usuarios, al disponer de un tratamiento de color azul sobre el aglomerado en la mayor parte del trazado y de marcas viales del mismo color en acera. Curioso, dicen en las redes sociales, que este 'slurry' antideslizante no haya previsto que lo que sí se iba a deslizar era la pintura.