Tomás Baño, apoyado por López Miras, busca revalidar la victoria del PP en Librilla

MURCIA. La gobernabilidad de Librilla, un municipio del Valle de Guadalentín poblada por 5.300 habitantes, sufrió muchas turbulencias al inicio de la legislatura. En julio de 2020, apenas un año después de los comicios, el popular Tomás Baño se convertía en el tercer alcalde tras las renuncias del también popular Francisco Rubio -se marchó por razones personales- y la independiente María del Mar Hernández. Ahora, tres años después de su toma de posesión, Baño se ha propuesto revalidar la victoria del PP en las urnas y afianzar la estabilidad del Ayuntamiento.

La Biblioteca Municipal acogió este martes la presentación de la candidatura, que contó con la presencia del presidente de la Comunidad y líder regional del PP, Fernando López Miras. El propio Baño reconoció que se sentía "orgulloso" de poder presentar su candidatura y manifestó que, pese a haber vivido una legislatura "muy complicada",  cuenta con "la energía renovada" para trabajar por Librilla y por sus vecinos "e intentar poner al municipio donde merece estar".

"Tomás Baño, desde la Alcaldía, ha dado a Librilla estabilidad y crecimiento, a pesar de las dificultades de esta legislatura en la que no era fácil tomar decisiones", subrayó López Miras, convencido de que el alcalde y próximo candidato "ha sido garantía de búsqueda de consensos, de alejarnos de la tensión y de la crispación de la izquierda". Por ello, "apostar por él es hacer una apuesta segura y conseguir su reelección", ya que, a su juicio, "ha dado sobradas muestras de ser el alcalde que necesita Librilla".

Librilla fue un municipio gobernado durante muchos años por el PP. El bastón de mando fue 'azul' desde 1991 hasta 2015, salvo un paréntesis socialista entre 1999 y 2003. Esta tendencia se rompía en 2015. Unión Progresista, que había empatado en concejales con el PP, recibió el apoyo del PSOE y Mar Hernández se convertía en la primera alcaldesa. Cuatro años después, el PP volvió a vencer en las urnas, esta vez sin empate, con cinco ediles frente a los cuatro que sacaron PSOE y UPrL. La falta de acuerdo entre estos dos últimos grupos aupó a los populares a la Alcaldía.