Cuando los niños se despiertan el 25 de diciembre ven sorprendidos como, al levantarse de la cama, Papá Noel les ha dejado sus esperados regalos para que los disfruten en las fechas navideñas. Sin embargo, paradójicamente, casi nadie sabe de dónde viene esta costumbre y, sobre todo, ¿quién fue Papá Noel y si realmente existió?
El personaje de Papá Noel está inspirado en la persona real de San Nicolás de Bari, nacido en el año 270 en la pequeña y desaparecida ciudad marítima de Patara (región de Licia, Turquía). Sus padres eran cristianos acomodados, lo educaron en la fe y San Nicolás destacó por su carácter piadoso y generoso. Sin embargo, tuvo la mala suerte de quedar huérfano muy joven de ambos progenitores.
Heredó una gran fortuna y, según la hagiografía escrita por San Metodio - arzobispo de Constantinopla - decidió cumplir la parábola evangélica del joven rico y destinarla a atender a los necesitados, enfermos y pobres pero, sobre todo, a los niños.
San Nicolás fue nombrado obispo de Myra (Anatolia, actualmente Turquía). Su biógrafo Miguel el Archimandrita relata en su libro ‘Vida de San Nicolás’ que recorría las calles dándoles regalos a los niños, prestando especial atención a los más pequeños, débiles, indefensos y a los que estaban sin familia. Llegaron a ser tantos los regalos que repartía que la gente le decía que eran demasiados, a lo que el Santo respondía: «Sería un pecado no repartir mucho, siendo que Dios nos da tanto».
El episodio más conocido del Santo ocurrió cuando un hombre devoto no podría casar a sus tres hijas porque carecía de dinero para pagar la dote. Esto significaba que se quedarían solteras y, probablemente, se verían obligadas a prostituirse. San Nicolás se enteró y arrojó en tres noches tres bolsas llenas de monedas de oro por la ventana de la casa para que las hijas pudieran contraer matrimonio.
La tercera noche el padre permaneció despierto para descubrir quién era el misterioso benefactor. Cuando lo vio cayó de rodillas dándole las gracias, a lo que San Nicolás le imploró que no le dijera nada a nadie de lo que había hecho en favor de sus hijas.
San Nicolás recibió sepultura en Myra pero en el siglo XI su tumba corría peligro de profanación por las guerras entre religiones. En consecuencia, sus reliquias fueron trasladadas en 1087 a Bari, ciudad situada en la región meridional italiana de Apulia, en donde se encuentran a día de hoy. Asimismo, dadas las obras que realizó, es el patrón de los niños.
Es de destacar que San Nicolás de Bari nunca llevó renos pues iba montado en un caballo y junto a él llevaba un burro en el que cargaba los regalos que les daba a los niños"
Pero la leyenda de convertir a San Nicolás de Bari en Papá Noel comenzó antes, en la época en la que los vikingos empezaron a invadir toda la zona del Mediterráneo y se apropiaron de la historia piadosa del Santo con los niños. Se la llevaron a Escandinavia, la exportaron llamándolo ‘Sinterklaas’ y le colocaron su iconografía nórdica: las mejillas sonrosadas, la piel muy blanca, los duendes, la nieve, el trineo y los renos. Es de destacar que San Nicolás de Bari nunca llevó renos pues iba montado en un caballo y junto a él llevaba un burro en el que cargaba los regalos que les daba a los niños.
Y fue en el siglo XIX cuando Papá Noel es exportado a Estados Unidos por los migrantes procedentes de Europa del Norte. Por aquel entonces era representado todavía vestido de verde asociado a las tradiciones europeas hasta que en 1931 Coca-Cola realizó una gran publicidad vistiéndolo de rojo - para difundir los colores de la marca de refrescos - popularizando a nivel mundial el personaje y la imagen que hoy se tiene de él.
Pero, a día de hoy, San Nicolás continúa estando pendiente de los niños. Uno de los episodios donde lo hizo fue en el bombardeo sobre Bari ocurrido el 2 de diciembre de 1943 durante la Segunda Guerra Mundial. Fueron hundidos 27 barcos, causó cientos de muertos y casi mil heridos. Tal fue su magnitud que ha pasado a la historia como «el segundo Pearl Harbor».
Durante la confusión del bombardeo, un niño se separó de su madre quedando desaparecido. Sin embargo, horas después llamó a la puerta de su casa estando sano y salvo. El niño contó cómo un hombre - al que describió con el aspecto de San Nicolás - lo ayudó, lo protegió y lo llevó de regreso a su casa.
En España le llamamos Papá Noel pero en otros países tiene muchísimas denominaciones siendo las más comunes San Nicolás y Santa Claus - que son los verdaderos nombres el Santo - ‘Père Noël’ en Francia, ‘Babbo Natale’ en Italia, ‘Father Christmas’ en Reino Unido, ‘Joulupukki’ en Finlandia o ‘Ded Moroz’ (Abuelo del Invierno) en Rusia. Asimismo, en Chile se le llama ‘Viejito Pascuero’ y, en Costa Rica, ‘Colacho’
En España le llamamos Papá Noel pero en otros países tiene muchísimas denominaciones siendo las más comunes San Nicolás y Santa Claus - que son los verdaderos nombres el Santo - ‘Père Noël’ en Francia, ‘Babbo Natale’ en Italia, ‘Father Christmas’ en Reino Unido, ‘Joulupukki’ en Finlandia o ‘Ded Moroz’ (Abuelo del Invierno) en Rusia. Asimismo, en Chile se le llama ‘Viejito Pascuero’ y, en Costa Rica, ‘Colacho’.
La conclusión es que, cuando los niños reciben los regalos en Nochebuena, se los lleva San Nicolás de Bari, un hombre cuya existencia está demostrada históricamente y que se distinguió por su atención y generosidad con los niños.
La conclusión es que, cuando los niños reciben los regalos en Nochebuena, se los lleva San Nicolás de Bari, un hombre cuya existencia está demostrada históricamente y que se distinguió por su atención y generosidad con los niños
De ahí que, tras pasar siglos desde que falleció, no haya dejado en su empeño de continuar entregando regalos a los pequeños en la madrugada del Día de Navidad llenando de sonrisas los rostros de millones de niños de todo el mundo y de felicidad los hogares de sus familias.
Como casi todo en esta vida, Papá Noel tiene un origen religioso, como nuestros nombres, nuestra cultura, nuestra historia, nuestras fiestas y nuestras tradiciones.