La reposición del claustro dominico de Lorca que sobrevivió a los terremotos de 2011 acabará en agosto

LORCA (EFE). Los trabajos de reposición de los arcos de piedra de un claustro dominico del siglo XVII que tuvieron que ser desmontados en Lorca para evitar que se desplomaran tras los terremotos de 2011 concluirán el próximo agosto, ha dicho a Efe el director de los trabajos, Teodoro Campoy.

Los operarios trabajan ahora en la colocación, piedra a piedra, de los arcos de la panda inferior del claustro, después de que el proyecto haya tenido que ser modificado en varias ocasiones por la aparición de relevantes hallazgos arqueológicos.

Entre ellos se encuentran las pilastras que sustentaban los arcos y una parte del fuste de las columnas, que fueron seccionadas en la remodelación que se hizo del claustro y que permanecían enterradas en el subsuelo.

Ahora han sido reintegrados y la panda inferior de arcos es sustancialmente más alta al recuperar la altura de las columnas y devolver la posición de las arquerías a su posición original.

Como consecuencia de los numerosos daños que ocasionaron los seísmos de mayo de 2011 en el conjunto, las tres fachadas de arcos tuvieron que ser desmontadas, previa numeración y clasificación de cada una de sus piezas y trasladados a un almacén donde han permanecido los últimos años.

Ahora ese enorme puzle de casi 600 piedras está siendo colocado pieza a pieza por los técnicos sobre una estructura portante de hormigón para poder sujetar los arcos a la estructura con unos anclajes especiales antisísmicos.

En su colocación se está utilizando la misma técnica que se empleó en el montaje original con mortero a base de cal.

La concejala de Cultura en funciones, Ángeles Mazuecos, ha dicho que se trata de un proyecto "muy complicado" y ha recordado que la obra estuvo parada algo más de dos años por la modificación del proyecto, que ha contado con una financiación autonómica superior a los 360.000 euros.

A ese dinero el Ayuntamiento aportó 47.000 euros de fondos propios para la última fase de las excavaciones y la modificación del plan original para que estos restos sean también visitables, que era uno de los objetivos del equipo de Gobierno.

Mazuecos ha agradecido a la comunidad propietarios del edificio colindante, que ha cedido parte de los balcones para poder recolocar las arquerías en la posición que ocuparon en el claustro de Santo Domingo.

Para ello ha sido necesario retranquear parte de los balcones para poner el claustro en su posición original, bajando el nivel del suelo de la plaza hasta alcanzar el pavimento primitivo y la base de las columnas de las que arrancan los arcos.

Hasta 2011 el claustro del antiguo convento de frailes dominicos se encontraba anexionado a este edificio de viviendas y compartiendo protagonismo con el Conjunto Monumental de Santo Domingo.

La edil se ha mostrado convencida de que el claustro se convertirá en un importante atractivo turístico y cultural, ya que será accesible y visitable, contará con balaustradas de cristal, que permitirán ver el interior y dispondrá de una iluminación ornamental que resaltará los volúmenes de los arcos del antiguo convento.

El pavimento original del claustro, de losas de barro, ha sido retirado y trasladado al Museo Arqueológico por su fragilidad