En un acto de enero: el presidente de la Asamblea Regional, Alberto Castillo, y el jefe del Ejecutivo, Fernando López Miras; detrás, el alcalde de Murcia, José Antonio Serrano, y el delegado del Gobierno, José Vélez. Foto: EDU BOTELLA (EP)MURCIA. La Región no puede esperar más. No debería tener que esperar a las elecciones del próximo año para acordar y poner en marcha un plan que permita hacer realidad todo su potencial de desarrollo.
La Región precisa que nuestro presidente regional se reúna con los partidos políticos, empresarios y sindicatos y alcanzar los consensos necesarios para la puesta en marcha de un Plan de Actuaciones que permita sacar a la Región de la situación en que se encuentra, entre 15 y 20 puntos por debajo de la media nacional, como se puede constatar en el cuadro, y situarla en al horizonte del 2030 en el entorno de la media nacional.
Los datos hechos públicos por la AIReF en su ultimo informe indican que, al contrario que en el pasado (durante las etapas de crecimiento la Región lo hacía por encima de la media nacional), el crecimiento del intertrimestral del PIB durante el pasado año 2021 ha ido separándose del crecimiento medio nacional. Concluye con un crecimiento interanual estimado del PIB al cuarto trimestre del 2,10%, muy por debajo del 5,20% estimado de media nacional. Ello es consecuencia de los muros que condicionan y frenan su desarrollo; muros que son preciso derribar y ello no será posible sin el acuerdo y el compromiso de todos.
"Un plan para que, gobierne quien gobierne, se haga realidad y la Región pueda situarse en la media nacional"
La necesidad de impulsar un acuerdo con el resto de los partidos políticos no es ya una opción, sino una necesidad apremiante para consensuar un plan que permita sumar todos los esfuerzos y demandar juntos del Gobierno de España la programación y realización de las infraestructuras ferroviarias, portuarias y viarias pendientes desde hace décadas. Son vitales para poner en valor todas las potencialidades de la Región; singularmente es la estratégica situación de El Gorguel en la fachada mediterránea. Hay que contribuir con el resto de los puertos para configurarse como referente en el sur como entrada a Europa ganando de dos a tres días en relación con los puertos del norte en la entrada a Europa de los tráficos intercontinentales, a la vez que una muy importante mejora medioambiental.
La Región necesita acordar un plan que se centre en la Región y en su desarrollo; un compromiso vital para reducir a cero el diferencial negativo en que esta situada la Región en cualquiera de los ratios socioeconómicos. Ello solo será posible a través del diálogo y la negociación; un plan para poner en valor todas sus potencialidades y conformar un entorno fiscal y regulatorio que incentive la inversión y atraiga emprendedores y talento.
Un plan de actuaciones e inversión en el horizonte de 2030 que incluya apoyos fiscales a la inversión, reducción de impuestos y burocracia, para que, gobierne quien gobierne a nivel regional y nacional, se haga realidad y la Región pueda situarse en torno a la media nacional.
Un plan que para apoyar la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación en las universidades, hospitales y centros de investigación. Que permita una mayor atracción y apoyo a los investigadores, y singularmente a los jóvenes emprendedores en las nuevas tecnologías de la Información y la Comunicación, fabricación de productos informáticos, electrónicos, eléctricos, industria 4.0, digitalización, servicios avanzados, TIC,...
Un plan que impulse nuevas oportunidades y sinergias entre los sectores de la logística y el inmobiliario, el 'real estate', el 'e-commerce', así como avanzar hacia la economía circular, la sostenibilidad medioambiental, y la energía 'verde'. La Región y sus principales ciudades deben conformarse como polo de atracción de inversores y talento.
Un plan para la promoción exterior de la Región como destino inversor por las excelentes oportunidades que ofrece tanto en la industria como en los servicios avanzados, en el turismo y en la logística dada su estratégicas situación en el Mediterráneo.
Es un hecho que la Región no puede desarrollar plenamente su potencial turístico y congresual si no se crean nuevas plazas hoteleras. Por ello es necesario un decido apoyo a la construcción de hoteles, desarrollando a nivel regional una normativa especial para su realización, volúmenes, exención de tasas, fiscalidad, a la vez que apoyar el desarrollo de todas las actividades complementarias, buscando la complicidad y la implicación de inversores hoteleros, así como de operadores y agencias turísticas, llevando a cabo una oferta unitaria de los centros de congresos de la Región en los mercados congresuales.
Es absolutamente necesaria la reducción de la burocracia y del gasto público, unificando consejerías y departamentos, privatizando la televisión y la radio regionales, a la vez que implantar el silencio administrativo positivo para facilitar el desarrollo e implantación de nuevos proyectos, impulsando una mayor libertad de apertura y cierre de los establecimientos.
La Región no puede ni debe esperar más para poner en valor todas potencialidades y las ventajas de su estratégica situación en la fachada mediterráneas. Y para ello necesita de la negociación y el acuerdo con todos los partidos políticos y singularmente entre los dos históricos que se han turnado en el Gobierno, el PSOE y el Partido Popular. Seguir retrasando el acuerdo es seguir perdiendo oportunidades de desarrollo social y económico.
