La formación de izquierdas rechaza al alcalde socialista y pide su dimisión, pero no negociará con los populares
MURCIA. El alcalde Jesús Amo se llevó este viernes una derrota... para poder seguir avanzando. El bastón de mando del PSOE peligra en Moratalla, pero todo puede salir a pedir de boca para el regidor socialista si tiene éxito su arriesgada maniobra. Es decir: el alcalde, ante la situación de desbloqueo de los Presupuestos, sin actualizar desde 2016, planteó una cuestión de confianza para sacar adelante las cuentas. Si prosperaba, se aprobaba ipso facto el Presupuesto; si fracasaba, se abría un periodo de un mes para que los dos grupos de la oposición -es decir, el PP y Ganar Moratalla IU- presenten una moción de censura. Si no hay moción, quedarían automáticamente validados los Presupuestos.
El primer paso se cumplió este viernes: la oposición, formada por los cinco ediles del PP y los dos de Ganar IU, tumbaron la cuestión de confianza al alcalde, que gobierna en minoría con seis concejales. Ahora se abre el plazo para que se registre una moción de censura. Una circunstancia que a día de hoy no tiene los visos de cumplirse, porque la formación de izquierdas no está por la labor de facilitar un Gobierno local del PP, tal y como han dejado claro sus dos representantes municipales. Así las cosas, Amo podría respirar dentro de un mes y llevarse un triunfo político que le permitiese avanzar en la legislatura, con Presupuestos ya renovados.
"Es una maniobra indigna y surrealista de Jesús Amo", lamenta a Murcia Plaza el coordinador regional de Izquierda Unida, José Luis Álvarez-Castellanos, que confirma que su formación no quiere al alcalde pero tampoco propiciará un Gobierno del PP. El dirigente aduce que las cuentas son fundamentales para optar a los fondos europeos "y por eso se ha apresurado a hacer esta maniobra Amo, que hasta ahora no había llevado un proyecto de Presupuestos desde 2017". Álvarez-Castellanos asegura que recurrirá al PSOE regional "para explicar lo que está pasando en Moratalla" y ofrece su apoyo a respaldar "el Gobierno local socialista siempre y cuando el alcalde se vaya y sin necesidad de que Ganar forme parte del Ejecutivo". De no ser así, advirtió, "comprometería el futuro electoral de Moratalla".
El alcalde planteó la cuestión de confianza como fórmula para desatascar la situación después de que los dos últimas votaciones de las cuentas (26 de noviembre y el 29 de diciembre) se saldaran con sendos fracasos. En el pleno de este viernes, el regidor manifestaba que no pensaba dimitir y reiteró su voluntad de negociar para desbloquear los Presupuestos, prorrogados desde 2016. Amo gobierna el municipio desde 2017. Accedió al bastón de mando tras el pacto con Ganar, que ostentó la Alcaldía entre 2015 y 2017 con Candi Marín. Pero desde 2019 lo hace en solitario. Por su parte, el PP, muy críticos también con el alcalde, cuya cabeza igualmente reclaman, se abren a negociar una salida y encontrar una solución al conflicto.