MURCIA (EFE). La ministra española de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma), Raquel Sánchez, afirmó este domingo a Efe que el Gobierno aprobará en el próximo Consejo de Ministros del 18 de enero la Ley por el Derecho a la Vivienda, que permite a las comunidades autónomas limitar el precio del alquiler en las zonas tensionadas a las empresas propietarias de más de diez viviendas.
"Sí, la aprobaremos en el próximo Consejo de Ministros del día 18 de enero y la previsión es que podamos llevar a una segunda lectura y por tanto, aprobar ya definitivamente en el Gobierno esa ley tan esperada. Y partir de ahí empezar lógicamente la tramitación parlamentaria", afirmó tras la presentación en el Pabellón de España en la Expo Dubái del Global Mobility Call, primer congreso mundial sobre la movilidad sostenible que tendrá lugar el próximo junio en Madrid.
El Consejo de Ministros aprobó el pasado 26 de octubre el anteproyecto de Ley por el Derecho a la Vivienda en primera lectura, con la intención de enviarlo al Congreso como proyecto de ley antes de que terminarse el año.
Y es que este texto ha sido negociado durante un año por los socios de Gobierno y ha sido uno de los principales focos de tensión política entre ellos en lo que va de legislatura.
Sánchez señaló desde Dubái que "en breve" tendrán el informe del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y consideró que está "todo preparado" para llevar este proyecto de ley al Consejo de Ministros del 18 y para "su posterior tramitación", e indicó que no están "preocupados" por el contenido del informe.
El texto modifica algunos aspectos de la Ley de Enjuiciamiento Civil, por lo que es preceptivo un informe del CGPJ, aunque este órgano declaró la semana pasada que no había dado tiempo material a elaborar el documento para finales del mes pasado, ya que el Ministerio de Transportes lo pidió a principios de diciembre, por lo que se retrasó la segunda lectura.
Además, esta ley ha provocado recelo en el sector inmobiliario, que coincide en que su aprobación reducirá la oferta, empeorará el mantenimiento de los inmuebles y conducirá el mercado de alquiler a la economía sumergida.
Sin embargo, Sánchez aseveró que el texto del anteproyecto de ley ha tenido al final una "acogida positiva" en el sector inmobiliario.
"Yo creo que más allá de algunas críticas puntuales que se han producido, pero que quiero decir y avanzar que han sido muy puntuales y que es verdad que en un primer momento se generó cierta inquietud por parte del sector, puedo aventurar a decir que ha sido una acogida positiva por el sector", señaló.
La ministra agregó que también ha tenido una acogida "positiva" por el "conjunto de la sociedad" y, por tanto, espera que "ese mismo consenso de la sociedad también se consiga en el Parlamento" y que se pueda tener "lo antes posible" la aprobación de una ley que calificó de "histórica".
Para los arrendadores particulares y las empresas propietarias de menos de diez viviendas, el texto prevé -solo en zonas tensionadas- que el inquilino pueda pedirles prórrogas anuales del contrato hasta un máximo de tres años con la renta congelada.
Otros puntos del texto es penalizar las viviendas vacías, pues el anteproyecto prevé que los ayuntamientos apliquen un recargo del 50 % en la cuota líquida del impuesto de bienes inmuebles (IBI) a las que permanezcan desocupadas sin justificación más de dos años; del 100 % si está vacía más de tres años y del 150 % si el propietario tiene cuatro inmuebles desocupados en el mismo término municipal.