MURCIA. A menos de cuatro meses para las elecciones, María Marín (Cartagena, 1968) se siente decepcionada a la vez que ilusionada. Decepcionada porque la legislatura ha resultado un tiempo "perdido para la ciudadanía", con un Gobierno regional que "ha aprovechado para desregular leyes y beneficiar a sus redes clientelares y a la gente más rica". A su juicio -siempre muy crítico y sin pelos en la lengua-, el saldo democrático tampoco ha sido favorable: "Hemos sido una vergüenza para toda España". Así lo esgrime en una entrevista con Murcia Plaza: "No tenemos el Gobierno que la gente eligió en las urnas, sino el resultado de una compraventa de diputados para mantener a López Miras en su asiento". Sin embargo, quien ha sido una de las portavoces más contundentes de la oposición y quien será la candidata de Podemos a la Comunidad también se muestra ilusionada por la campaña electoral porque "esta tierra necesita una transformación profunda", una meta que sólo puede pasar de "la mano de Podemos". Su objetivo es muy claro: "Desalojar al PP de San Esteban".
El primer gran acto de la campaña se celebra precisamente este sábado en el Cuartel de Artillería, en Murcia. Podemos presentará ante la militancia a sus 21 candidatos arropados por la ministra de Igualdad, Irene Montero, que llega a la Región con su ley del 'sólo sí es sí' en el ojo del huracán. Marín respalda sin fisuras esta norma que "protege de forma integral a las mujeres". Considera que el tiempo le dará la razón y descarga toda la responsabilidad de las reducciones de penas en la interpretación de los jueces. "En una minoría de jueces reaccionarios", subraya, remarcando que "el resto de la judicatura sí la están aplicando correctamente".
-Le pregunto por la actualidad más inmediata. El TSJ ha emitido un comunicado contra usted. Le recrimina que había dado "información falsa" y la acusa de actuar por "intereses partidistas y electoralistas" por sus críticas sobre el caso de un hombre que quedó libre tras abusar de una menor.
-El TSJ puede hacer los comunicados que crea oportunos. Pero ya está bien. Al igual que la ciudadanía señala a otros poderes del Estado cuando se equivocan, como el Ejecutivo o el Legislativo, ante el Poder Judicial estamos en nuestro derecho de criticar aquellas sentencias que no nos gustan. Sea como fuere, la sentencia es la que es. Los datos son objetivos: un señor que abusaba de su sobrina de diez años está en la calle tras pagar una multa de 1.000 euros. El TSJ puede decir lo que quiera, pero nosotras pensamos que eso no hubiera sido así de haber juzgado con la 'ley del sólo sí es sí'. No han tenido en cuenta los agravantes: una menor de edad y el parentesco del tío. Por esos motivos, entre otros, hemos creado la ley del 'sólo sí es sí' para que esas sentencias dejen de darse y porque lo fundamental es poner el consentimiento de las mujeres en el centro.
"El PSOE siempre recula cuando le presionan desde la derecha: le tiemblan las piernas"
-Es la segunda vez que el TSJ se dirige hacia usted. Y no es precisamente un poder que se pronuncie habitualmente en política…
-No suelen entrar en las tensiones políticas porque desde que en 2004 presentaron 200 recursos de inconstitucionalidad a la Ley de Igualdad del Gobierno de Rodríguez Zapatero no habían encontrado ninguna ley que pidiera derechos para el feminismo. La ley del 'sólo sí es sí' surge por un escándalo social a raíz de la sentencia de La Manada. Los jueces fallaron que era abuso y uno de ellos dijo que había "jolgorio". La gente se echó a la calle. Ahora, aprobada la ley, vuelve a salir esa parte de la judicatura reaccionaria que está en contra del avance de los derechos de las mujeres. Como ya vimos en 2004, se repite el mismo patrón. Y quiero dejar muy claro que no criticamos a la judicatura en su conjunto. Es más, y lo ha dicho la ministra cientos de veces, la mayoría de jueces y juezas de este país están aplicando la ley correctamente. Pero una minoría de jueces reaccionarios están creando con esas bajadas de penas una alarma social que no debería producirse. Hasta la Unión Europea reconoce que es una ley buena y que hay replicarla en todos los países, pues protege a las mujeres de manera integral con independencia del delito sexual, al no haber diferenciación entre abuso o agresión. Y protege tanto si denuncian como si no. Eso se ha corregido. Y también defiende esta ley la fiscal de la Sala de Violencia sobre la Mujer, Teresa Peramato.
-Entonces, ¿por qué han reducido la condena a más de 300 agresores sexuales? ¿Por qué han excarcelado a una treintena de violadores? ¿Dónde falla la ley?
-Ayer leía que esos datos que se dan en los programas, con un contador, no tienen una base sólida. El Ministerio de Justicia no tiene los datos exactos del número de reducciones ni del número de juzgados en los que se han producido. Esos medios que están dando "300 casos" deberían explicar de dónde sacan esas cifras. La derecha mediática está usando esta ley no sólo contra la ministra sino también contra el Gobierno de coalición que intentan cargarse. Han encontrado un filón.
"¿QUÉ MIEDO TIENE EL PP A DAR EXPLICACIONES SOBRE EL PUERTO Y HACER UNA COMISIÓN DE INVESTIGACIÓN?"
-Pero, al margen de la precisión del contador, existen esas reducciones de penas. E insisto: ¿qué ha fallado en la ley para que eso suceda? ¿No ve errores?
-El derecho transitorio, que es lo que se debería estar aplicando correctamente, dice que si la pena que en su momento se impuso al condenado cabe dentro del nuevo rango de la ley nunca se debe revisar a la baja. Lo estableció también el decreto de la Fiscalía General del Estado y lo han dicho reputados juristas de nuestro país, como Martín Pallín. La mayoría de los jueces no están rebajando las penas. Pero hay unos cuantos que han decidido coger este tema como ariete contra el Gobierno de coalición. Eso es lo que está sucediendo.
-Sin embargo, el propio PSOE, miembro de la coalición, se abrió a reformar la ley por los "efectos indeseados".
-No nos extraña el PSOE. Estamos a cuatro meses de las elecciones. Podemos es un partido firme en sus posiciones: defendimos que había que subir el SMI y se nos echó todo el mundo encima, diciendo que íbamos a la ruina. Y fue todo lo contrario: tenemos la inflación más baja de toda Europa, aunque es alta. Cundo sacamos el ingreso mínimo vital decían que el país se iba al desastre. Nuestra ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, se empeñó en que había que poner un tope al gas, y todo el mundo se nos tiró encima. Pero se puso. Al PSOE le tiemblan las piernas ante unas elecciones autonómicas y municipales.
Nuestros compañeros y compañeras le piden al PSOE que no se deje influenciar por las presiones de la derecha mediática, judicial y política. Que se mantenga firme. Aunque es una ley impulsada por Podemos, también pasó por el CGPJ, por los ministerios, por los servicios jurídicos de los grupos de la Cámara y por el Ministerio de Justicia, que es quien tiene que dar el visto bueno. Nadie apreció ningún error. El PSOE siempre recula cuando le presionan desde la derecha. Si hubiese sido por la ministra Calviño, las principales medidas del escudo social contra la pandemia no se hubieran puesto en marcha. Habría pasado como en la crisis con Mariano Rajoy. Calviño era prácticamente la misma receta del PP. Ayer escuchaba al expresidente Zapatero, que contaba que él había pasado por lo mismo y que estaba seguro de que en unos años la ley será reconocida en nuestro país.
-En conclusión, ¿esas reducciones sólo son consecuencia de jueces reaccionarios?
-Se deben a la interpretación. ¿Por qué en La Rioja con 54 sentencias interpretadas por diferentes jueces no hubo una sola reducción de pena? Rebajar las penas depende de la voluntad del juez.
-El sábado viene Irene Montero a Murcia, con todo el foco mediático puesto en su ley.
-Es un orgullo de ministra. Es una mujer que se ha dejado la piel para recoger todas las peticiones y las luchas históricas del movimiento feminista. Ha aguantado carros y carretas, con presiones de todo tipo, hasta sacar la ley. Pero también ha sacado la Ley Trans, que era una deuda histórica de nuestro país desde los tiempos del franquismo, con tanta gente maltratada con aquella Ley de Vagos y Maleantes que trataba a las personas trans como auténticos desechos. Nunca ha existido un plan de Estado en conciliación familiar. Y la ministra Montero lo ha puesto encima de la mesa para que de verdad las mujeres puedan ser madres y desarrollar sus carreras profesionales.
Y quiero recalcar que desde la primera reducción de penas la ministra Montero ha propuesto mejoras al PSOE, que hasta ahora no había aceptado ninguna. Esta semana plantearon una batería de propuestas: doblar juzgados de Violencia sobre la Mujer, ampliando competencias; reforzar la Fiscalía de la Violencia sobre la Mujer… Una serie de medidas contra ese efecto no deseado, que no es por un fallo en la ley, sino por la interpretación de una minoría de jueces de esa ley.
"LA LEGISLATURA HA SIDO UN FIASCO. ESPERO QUE LA HISTORIA LA RECUERDE CON MUCHA VERGÜENZA"
-¿Montero está al tanto de lo que pasa en la Región?
-Sí, está al corriente de los problemas de la Región. Ha venido varias veces. La relación es muy estrecha. Y nuestro secretario general regional es diputado [Javier Sánchez Serna] y lleva siempre las problemáticas de la Región. La comunicación es muy fluida, también con Ione Belarra. Son personas muy accesibles y muy sensibles ante los problemas sociales de los territorios. Hay mucho contacto y conocen bien la Región. Este sábado nos reunimos con la militancia para explicar a la gente qué tipo de Región queremos. La ministra viene a arropar a nuestros candidatos y candidatas, todos elegidos en primarias, ya que vamos a estar presente en el 90% de la población de la Región.
-Le pregunto por el último escándalo político: el Puerto de Cartagena. ¿Nos queda mucho por saber? ¿Tiene acceso a alguna información?
-No, no tengo acceso información. Por cierto, recuerdo que cuando salió el escándalo de la vacunación irregular pedí dos veces la información de los altos cargos vacunados, pero no me la dieron. Como diputada tengo derecho a recibir esa información en un plazo de quince días, aunque no puedo difundirla, según el reglamento de la Asamblea Regional.
Sobre el Puerto, los propios trabajadores pidieron hace cuatro meses reunirse con López Miras para contarle lo que pasaba, pero él se hizo el loco. Los trabajadores comentan que esto es la punta del iceberg. Si la Fiscalía quiere investigar, que estoy segura que sí, puede que salgan más cosas.
"EN LA OPOSICIÓN ME HE SENTIDO MUY SOLA EN MUCHOS MOMENTOS, SIN EL PSOE"
-¿Cómo valora la gestión del presidente en esta crisis?
-Es lamentable. Pero es su táctica habitual. Cuando hay un problema muy gordo, utiliza la estrategia del avestruz: mete la cabeza en el agujero y espera a que escampe. Podemos fue el primero en pedir la comparecencia del presidente en la Asamblea y registramos la creación de una comisión de investigación. Si hubiese voluntad política, se podrían depurar responsabilidades y saber qué pasó. Se puede hacer, pero ni el PP ni sus socios tránsfugas van a votar a favor. López Miras debe dar cuenta de lo que está sucediendo. Y si no tiene nada que ver con altos cargos del PP o con otra enésima trama corrupta del PP, entonces ¿qué miedo hay? Y nuestro compañero en el Congreso [Sánchez Serna] ha hecho una petición al Ministerio para que se haga una auditoría general. Me molesta, como cartagenera que soy, que una ciudad maravillosa e histórica como Cartagena sea noticia por un enésimo caso de corrupción del PP. No se lo merece.
-¿Qué tal lleva la convivencia en el Grupo Mixto, con diputados de Cs y de Vox?
-Lo llevamos con educación. Otra de las intenciones de López Miras y del PP era dinamitar el Grupo Mixto, porque era la principal oposición de la legislatura. Aunque seamos de distintas ideologías, hemos puesto un poquito de inteligencia para que no pasara lo que quería el PP: que nos matáramos entre todos y no saliera nada. Sellamos un acuerdo de reglamento y de momento todos lo estamos cumpliendo.
-Con respecto al PSOE, ¿se ha sentido sola en la oposición?
-Sí, en muchos momentos. Me sentí muy sola con el 'pacto del nitrato'. Me pareció increíble que el PSOE votara a favor de una ley que procedía de la Fundación Ingenio y que no abordaba los problemas del Mar Menor en origen, pues sólo tomaba decisiones al final de las tuberías. Fue increíble que votaran conjuntamente con el PP. Me acuerdo que votaron a favor de la enmienda a la totalidad del PP contra mi propuesta de que la Balsa Jenny eliminara los residuos. El PSOE y Podemos somos diferentes. Pero tenemos claro que para darle una vuelco a la Región necesitamos un Gobierno de coalición como el que tenemos en el país. Con sus más y sus menos, los resultados para los españoles y españolas han sido buenos.
-¿Cómo recordará la historia a esta legislatura?
-Espero que la historia la recoja con mucha vergüenza. En términos democráticos ha sido un auténtico fiasco. El Gobierno no ha salido de las urnas, no lo ha elegido la ciudadanía. Eso de por sí invalida todas las decisiones tomadas.
-¿Veremos alguna sorpresa más en esta legislatura?
-No lo sé [ríe]. Al ser enero un mes inhábil, no sé nada del resto de diputados.
"SIEMPRE ESTAMOS ABIERTAS A QUE SE SUMEN MÁS FORMACIONES A LA COALICIÓN CON IU"
-¿Habrá una candidatura unitaria de toda la izquierda en las próximas elecciones?
-Lo hemos dicho hasta la saciedad. Estamos muy contentos con el acuerdo que llegamos el día 17 con Izquierda Unida. Y lo repetimos: es un acuerdo abierto a más formaciones políticas. Lo que quieran hacer el resto de formaciones son cuestiones internas de ellos. Habrá que preguntarles a ellos. El otro día se formó Coalición Verde, con un acuerdo entre Más Región y Equo. Bien está. Pero, insisto, siempre en todo momento, desde que empezamos las negociaciones, estamos abiertas a que se sumen más formaciones.
-Más Región y Equo aducen que formaron Coalición Verde porque estaban "hartos de esperar" y quieren que se le reconozca en una mesa de negociación a cuatro.
-Nosotros hemos llegado a un acuerdo con Alianza Verde, y ellas nunca han salido diciendo que estaban cansadas de esperar. El señor Urralburu es libre de actuar como crea conveniente. Eso habría que preguntarle a él; yo no estoy en su cabeza.
-¿De verdad Podemos quiere a Urralburu en una candidatura única? ¿Estarían dispuestos a compartir espacio con el líder morado que en 2019 se marchó para irse a Más País?
-Nos equivocaríamos si habláramos constantemente de nosotros mismos, y Podemos no está en esas. Nosotros estamos en el trabajo diario. Aunque sea un mes inhábil, en enero no hemos parado. Y queremos construir una alternativa transformadora para que la ciudadanía de la Región no esté a la cola en salarios, en servicios sociales, en fracaso escolar… Todos los que estamos a la izquierda del PSOE tenemos la responsabilidad de construir una alternativa para sacar a la Región del pozo que nos metió el PP. No estamos para hablar de Fulano ni de Mengano. Pudimos hacerlo desde que este señor [Urralburu] se marchó, pero no lo hemos hecho nunca en la legislatura.
-¿Es realmente posible esa alternativa? Ni una sola encuesta ha pronosticado una suma que dé opciones a la izquierda en la Región…
-Es muy posible, sí.
-¿Cómo?
-Todo el mundo ha sido consciente de los dos años que hemos pasado en pandemia. Han saltado por los aires las costuras de servicios públicos asentados como la sanidad y la educación. Tenemos unos niveles brutales de listas de espera. Para visitar al especialista tienes que esperar más de 200 días. La gente es consciente de lo que ha sucedido. Y no lo hemos palpado antes con tanta intensidad. Por eso hay mucha gente que está reaccionando y se está dando cuenta. Yo creo que sí es posible. Estoy muy convencida. Eso sí: hay que explicar mucho, hay que hablar mucho con la ciudadanía y hay que moverse. Por eso Podemos nunca se calla. Y contamos las cosas como son, tanto fuera como dentro de la Asamblea. Como así nos han visto los periodistas: a nosotras no nos tiemblan las piernas cuando hay que decir algo o hacer algo.
"PODEMOS ESTÁ MÁS VIVA Y COHESIONADA QUE NUNCA"
-¿Y cómo piensan romper la barrera histórica del 60%-40% (bloque conservador-bloque progresista) del electorado de la Región?
-Es difícil, eso es evidente. Pero también lo hemos visto en España. Nadie daba un duro por Pedro Sánchez en aquellas primarias contra Susana Díaz… Cuántas veces nos dijeron que no era posible un Gobierno de coalición entre PSOE y Podemos. El PSOE incluso nos llevó a una segundas elecciones donde metió a 52 diputados de la ultraderecha. Las principales medidas progresistas han venido de los Ministerios de Podemos. ¿Por qué no es posible en la Región si ocurrió en España?
-La evolución electoral de Podemos de las últimas elecciones autonómicas no es muy halagüeña. ¿Les preocupa esa tendencia?
-Podemos está más viva que nunca. Y más cohesionada que nunca. Tenemos un equipo fabuloso, muy convencido de que este es el mejor proyecto para la gente de la Región. Si nosotros no trabajamos por los servicios públicos, no lo va a hacer nadie. Siempre vamos a estar ahí.