MURCIA. La Guardia Civil de la Región ha llevado a cabo la operación 'Jonás', una investigación dirigida a esclarecer el robo de grandes cantidades de pescado en varias granjas de engorde de pescado del litoral cartagenero, que ha culminado con la detención in fraganti de dos personas como presuntas autoras de cinco delitos de robo con fuerza, y de los delitos de daños a la propiedad y contra la salud pública. Las pérdidas ocasionadas a las empresas propietarias de las explotaciones ascienden a 65.000 euros.
La investigación se inició en el mes de junio, cuando varias empresas dedicadas a la cría en cautividad de especies marinas denunciaron ante la Guardia Civil las continuas pérdidas que venían sufriendo a consecuencia de una serie de robos de pescado en sus explotaciones sitas en El Gorguel-Cartagena.
Los perjudicados también dieron cuenta de los daños ocasionados en las instalaciones, así como que días después de cometerse los robos aparecieron otros tantos animales muertos en las propias jaulas de engorde, fruto del estrés padecido, todo lo cual les había generado pérdidas valoradas en 65.000 euros.
Desde ese momento, la Benemérita dio inicio a la operación 'Jonás, una investigación que les permitió conocer que los hechos se venían produciendo de madrugada, cuando los trabajadores de las piscifactorías se retiraban, momento que era aprovechado por los supuestos furtivos para aproximarse a las granjas, cortar la malla que forma el cercado de las jaulas e introducir redes de gran tamaño con las que sustraían, en pocos minutos, grandes cantidades de pescado.
Los numerosos dispositivos establecidos por la Guardia Civil resultaron positivos cuando, en una de estas vigilancias, los guardias civiles detectaron la presencia de una embarcación sin luces junto a una de las granjas de engorde de El Gorguel-Cartagena.
Los agentes aguardaron en tierra la llegada de la embarcación y sorprendieron a los tripulantes con 385 kilos de corvina, valorada en el mercado en 2.400 euros, que resultó incautada.
Las piezas fueron trasladadas a la Lonja de Cartagena donde se constató que parte del pescado se encontraba contaminado, debido al contacto con carburante, derramado de una garrafa que llevaban en la embarcación para abastecer el motor fueraborda, con el consiguiente riesgo para la salud pública.
Las pesquisas practicadas a continuación permitieron conocer que los sospechosos, con un abultado historial de denuncias por infracciones en materia de pesca, seguridad marítima, seguridad sanitaria y medio ambiente, estaban presuntamente relacionados con los anteriores robos por lo que resultaron detenidos como presuntos autores de cinco delitos de robo con fuerza, y de los delitos de daños a la propiedad y contra la salud pública.
Según se desprende de la investigación, los ahora detenidos, vecinos de las localidades de La Unión y Los Nietos, se hacían a la mar en pequeñas embarcaciones sin matrícula u otras marcas identificativas y aprovechaban sus conocimientos de la zona para elegir el punto en el que descargar las capturas, lugares de dificil acceso donde la presencia policial podía ser detectada con facilidad.
Después, aprovechando la alta demanda de estos productos durante la temporada estival, al parecer, ofrecían el pescado a establecimientos de hostelería del Levante español, sin las suficientes garantías sanitarias para el consumo humano.
La operación 'Jonás' ha culminado con la detención de dos hombres, de 33 y 48 años, que junto a los efectos incautados y a las diligencias instruidas han sido puestos a disposición del juzgado de Instrucción de Cartagena.
Los productos pesqueros decomisados, que se encontraban en buen estado para su consumo, han sido donados a la beneficencia.
