MURCIA. Una nueva instalación de autoconsumo industrial aterriza en la Región. Se trata de la sede del Centro Tecnológico de la Conserva y la Alimentación (CTNC) ubicada en Molina de Segura, que cuenta a partir de ahora con 230 placas fotovoltaicas que, con una potencia total de 108 KW, producirán hasta 170.000 kW para abastecer a esta institución de la energía que necesita para llevar a cabo su actividad diaria.
De esta forma, evita la emisión de 51 toneladas de CO2 a la atmósfera cada año a la vez que permite reducir el precio de la factura de la luz. "Con esta inversión, el centro tecnológico se mantiene firme en su camino hacia la sostenibilidad energética", ha manifestado Pablo Flores, director general del CTNC. En este sentido, Flores ha manifestado que "el objetivo es limitar el gasto energético en electricidad y las emisiones de efecto invernadero contribuyendo a la lucha contra el cambio climático".
Con esta inversión, el CTNC, continúa en su proceso de evolución constante y firme hacia la sostenibilidad energética. Esta iniciativa se suma a otros proyectos de eficiencia energética como la sustitución de todo el sistema de alumbrado del Centro por luces led, permitiendo mejorar notablemente el consumo de energía.
El Centro Tecnológico Nacional de la Conserva y Alimentación es una asociación empresarial, sin ánimo de lucro, referente en tecnología alimentaria, cuya principal actuación es promover la innovación y el desarrollo tecnológico del sector agroalimentario a nivel nacional.
Este Centro tiene su origen en la Asociación de Investigación de la Industria de Conservas Vegetales fundada en 1962; por tanto, cuenta con más de 50 años de experiencia, lo que lo valida como principal agente dinamizador de la I+D+i y motor impulsor de la competitividad de las empresas.
Su principal función es la investigación, aplicada a mejoras en procesos de fabricación, nuevos elaborados y técnicas, normalización de características y calidades, nuevos métodos de ensayo, revalorización de productos y productividad, entre otros.
Más allá de las grandes plantas de producción fotovoltaica, la Región ya destaca por la concienciación de sus empresas con este tipo de energía renovable. De hecho, el número de horas de sol de los que dispone la Comunidad murciana ha convertido a las instalaciones fotovoltaicas para el autoconsumo en la tendencia del sector industrial como medio que contribuye a reducir la factura eléctrica en un momento en el que la factura de la luz marca cada día máximos históricos y también ayudan a reducir las emisiones de CO2 a la atmosfera.
En consecuencia, encontramos en este territorio hitos como el de la mayor planta fotovoltaica para autoconsumo instalada sobre una cubierta de toda España. Construida por la empresa Cubierta Solar, esta instalación se encuentra en Alhama de Murcia y dispone de una capacidad de 3,25 MWp para satisfacer las necesidades de PC Componentes, la empresa detrás del proyecto.
No obstante, la Comunidad de Regantes de Mazarrón ocupa el primer puesto entre las compañías murcianas que más energía solar generan con dos plantas fotovoltaicas que suman más de 10,15 MWp de potencia. Construidas por la empresa ciezana Esfera Solar, la primera de ellas se construyó en 2019 sobre un embalse de riego y se convirtió al momento en una de las más grandes gracias a una potencia pico de 1,6MWp (1.600 kilovatios). El pasado año se completó la segunda instalación sobre suelo que aportó 8,55 MWp de potencia.