Era el último superviviente de los diputados naranja de la novena legislatura

Juan José Molina deja la política: "Me quedo con los primeros cuatro años de Cs en la Asamblea"

16/03/2023 - 

MURCIA. El diputado de Ciudadanos Juan José Molina deja la política. "Aunque uno nunca cierra la puerta del todo", confiesa a Murcia Plaza. Pero ya ha comunicado a su partido que no figurará en ninguna lista electoral en los próximos comicios del 28 de mayo. "Ni tampoco en otra fuerza política", advierte. Simplemente se aparta, aunque seguirá militando en Ciudadanos, tras haber perdido "la ilusión y las ganas" en los últimos tiempos. "Desde la moción de censura la Asamblea Regional se ha convertido en un erial, ya no se alcanzan acuerdos", lamenta. Ahora medita si volverá a ejercer la docencia -era profesor de Dibujo en un instituto de Molina de Segura- o si se volcará en sus dos grandes pasiones, la pintura y la escritura . "Lo único seguro es que prefiero hacer un parón y reflexionar" porque "ocho años son muchos y han sido intensos".

Juan José Molina es el último superviviente del Ciudadanos primigenio: fue uno de los cuatro bisoños diputados naranjas que en 2015 tomaban posesión del escaño, dispuestos a cambiar las cosas en la Región de Murcia. Aquella fue, a su juicio, "la etapa más bonita". Y con la que se queda ahora que se marcha. "La experiencia en política ha sido bonita y yo me llevo lo mejor: la novena legislatura [2015-2019], donde llegamos a muchos acuerdos y donde hubo pactos por unanimidad", señala, recordando aquellos tiempos en los que Ciudadanos ejercía en la oposición y era protagonista de grandes acuerdos como el consenso que propició la reforma del Estatuto de Autonomía, hoy aparcada .

2019 fue un punto de inflexión. Ciudadanos entró en el Gobierno regional y lo hizo aliándose con el PP, el partido gobernante de los últimos 28 años. Molina fue nombrado portavoz parlamentario. De los primeros dos años se queda con la Ley de Recuperación y Protección del Mar Menor, que vio la luz con el apoyo de PP, PSOE y Cs (39 diputados en total). "Fue un empeño nuestro de nuestro partido y también mío", recalca. Pero llegó la moción de censura y con ella todo cambió por completo. Molina fue el único de los seis diputados que se mantuvo fiel a Martínez Vidal y a Ciudadanos. Desde entonces ambos convivieron en el ostracismo parlamentario. "Los tránsfugas dominan el Parlamento. Han tergiversado nuestro voto", dice con amargura. "Así no es posible hacer política seria". 

Su compañera de bancada, y portavoz del Grupo Mixto, reaccionaba con cariño a su adiós: "Ha sido un enorme placer compartir esta legislatura contigo y aprender de tu experiencia política", escribía Martínez Vidal. También lo hacía la concejala murciana Paqui Pérez: "Compañero con mayúsculas. Un regalo haber compartido estos ocho años", aseguraba, parafraseando a Maya Angelou: "La gente olvidará lo que dijiste, olvidará lo que hiciste, pero nunca olvidará como la hiciste sentir".

El todavía diputado -la Asamblea sigue hábil hasta el 31 de marzo- teme que Ciudadanos desaparezca. "Lo tiene muy difícil", reconoce. "Vamos a ver si resistimos en la travesía por el desierto". Su último movimiento interno fue apoyar a Edmundo Bal, que fue la lista perdedora en las primarias ante Patricia Guasp. "Era partidario de un cambio radical en el partido, pero acepto lo que salga de las urnas", asevera. No guarda rencor a Ciudadanos. "Me da pena su situación. Es malo para el país. Porque un proyecto de centro es necesario: equilibraba la ventaja y sentaba a la mesa en la misma mesa a unos y otros". Con todo, pese a que no se involucrará en la campaña, está convencido de que la Región requiere de un cambio de ciclo: "28 años son muchos. Se crean vicios y situaciones indeseables".

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