La entidad conservacionista reprocha que el Ayuntamiento de Murcia -"más preocupados de las luces de colores y del espectáculo efímero"- haya gastado más de 742.000 euros en tres años y no se vean soluciones reales para la conservación del arrabal andalusí de los siglos XII-XII
MURCIA. La Asociación para la Conservación de la Huerta y el Patrimonio de Murcia (Huermur) ha denunciado los derrumbes detectados en numerosos muros, y el lamentable estado de conservación del yacimiento arqueológico de San Esteban en pleno centro histórico de la ciudad de Murcia, plagado de geotextiles rotos y andrajosos, y una larga ristra de desperfectos.
Huermur ha puesto en conocimiento de la dirección general de Bienes Culturales por registro el pésimo estado de conservación del arrabal andalusí del siglo XII-XIII, así como los derrumbes de muros detectados en el yacimiento que ostenta la categoría de Bien de Interés Cultural BIC, el agotamiento de los geotextiles, y la proliferación de vegetación.
En el escrito de denuncia, la entidad conservacionista ha solicitado acompañar a los técnicos de la administración regional en la visita de inspección, para poder comprobar de primera mano de qué forma inspecciona la Consejería de Cultura e intentar buscar una explicación a la situación actual.
Huermur critica la ausencia total de colaboración de la Consejería de Cultura a la hora de poner punto y final a la degradación que sufre este patrimonio arqueológico, más de una década después de su descubrimiento en 2009, ya que a día de hoy ni se ha puesto en valor, ni musealizado, ni conservado adecuadamente pese a la enorme cantidad de anuncios y promesas del Ayuntamiento de Murcia.
En el mismo sentido, critica los retrasos injustificados de Cultura a la hora de responder a los escritos de Huermur sobre el mal estado de San Esteban, pues el último registro presentado es del mes de diciembre y a día de hoy no hay ni respuesta, pese a que la sede de la dirección general de Bienes Culturales está a escasos 300 metros del yacimiento.
La entidad conservacionista ha registrado un documento donde se atestiguan los derrumbes de muros medievales, que ya se producen por toda la extensión del yacimiento, así como el agotamiento de los diversos geotextiles de protección, de las distintas intervenciones (blanco, negro y marrón, en función de la fecha de su colocación). Además, se atestigua la proliferación de vegetación y maleza en los distintos recintos del BIC, así como incluso el nacimiento y crecimiento hasta de una palmera entre los muros medievales del yacimiento.
Igualmente, la entidad conservacionista denuncia que el Ayuntamiento de Murcia ha gastado más de 742.000 euros de dinero municipal en el yacimiento en tres años, con convenios por valor de 388.289 euros y contratos menores por importe de 354.0147 euros, y a día de hoy no se ven soluciones reales y efectivas para la adecuada conservación y puesta en valor de este arrabal andausí que se cae literalmente a pedazos.
Huermur reprocha que se esté gastando el dinero en convenios con entidades universitarias bajo una opacidad total, pues la entidad recuerda que ha tenido que recurrir al Consejo de la Transparencia la negativa de la Universidad de Murcia a dar la relación de pagos procedentes del ayuntamiento con motivo de las actuaciones en el yacimiento, que finalmente ha tenido que ser facilitada.
El yacimiento, que no cuenta todavía con el debido Plan Especial de Protección, y que debería haber aprobado el Ayuntamiento de Murcia por mandato legal en 2013, según indica Huermur, ha tenido más intervenciones en su entorno y en elementos que no fomentan su propia conservación, como son aceras, barandillas de diseño, luces variadas, focos de colores LED y canaletas clavadas en el yacimiento, que en la propia protección real y efectiva del conjunto monumental, muestra única del urbanismo medieval andalusí.
Huermur considera que este derroche es un dispendio injustificable, propio de responsables “manirrotos”, más preocupados de las luces de colores y del espectáculo efímero, que de la protección efectiva de “la mina de oro” que definió un experto internacional como José María Luzón, cuando conoció el yacimiento de San Esteban hace años.
El colectivo urge a la Consejería de Cultura y al Ayuntamiento de Murcia a que coordinen acciones reales de protección y conservación del conjunto arqueológico-monumental, que eviten que se sigan derrumbando muros de casas y calles, ya que la intervención que vienen financiando a la Universidad de Murcia se reduce a un escaso porcentaje de su superficie y unas pocas construcciones, a pesar de la ingente cantidad de dinero inyectada en los últimos años en esta excavación, concretamente 388.289 euros en tres años.
La entidad recuerda que, en comparación con lo que se aporta a otras excavaciones de relevancia por toda la geografía regional y municipal, se ha financiado durante varios años una intervención en un espacio reducido del yacimiento, mientras se ha dejado a su suerte al resto del conjunto patrimonial, y los efectos de este abandono están a la vista de cualquiera que se asome al yacimiento de San Esteban, denuncian desde Huermur.
