Foto: INMA G. PARDO
CARTAGENA. Raquel le decía a su hermana unos días antes de ser asesinada por su expareja: "A mí no me va a hacer nada". Esta frase resuena en pleno centro de Cartagena, teniendo como altavoz una silueta negra que se ha eregido en memoria de las 52 mujeres víctimas de violencia machista en lo que va de año. Esta instalación efímera de 4 metros de altura, diseñada por Estudio Paparajote, forma parte de la campaña 'A mí no me va a hacer nada', con la que el Ayuntamiento de Cartagena aborda el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres.
Así, se quiere poner el foco en que más de un 30% de mujeres no denuncia porque no considera la violencia que sufre "suficientemente grave". Esta percepción distorsionada del riesgo es, una responsabilidad compartida de toda la sociedad. Se recuerda, además, que en muchos casos, los agresores actúan cuando les dicen que les van a dejar o creen que la mujer no va a volver. Recoger las cosas de casa o la separación en sí, pueden ser factores de alto riesgo y ha de hacerse bajo el acompañamiento de personas especialistas.
Estudio Paparajote -dirigido por Pilar Larrotcha y Sonia de la Iglesia, y especializado en diseño con perspectiva de género- ha presentado como elemento central de impacto, una figura negra de 4 metros de altura, situada junto al Ayuntamiento, en la que se recogen los 52 nombres, la edad y el lugar donde se produjeron los asesinatos. Se completa con un circuito de mupis por la ciudad de Cartagena.
La instalación estará en esta ubicación durante todo el mes de noviembre.