MURCIA. La concesión de una subvención de 300.000 euros por parte del Gobierno regional va a permitir la ejecución de la primera fase del Plan Director del yacimiento arqueológico de Los Torrejones, en Yecla, que visitaron este miércoles la consejera de Cultura, Carmen Conesa, y la alcaldesa de la localidad, Remedios Lajara.
La subvención aprobada por el Consejo de Gobierno el pasado 26 de octubre está dirigida a la conservación y la protección de unos restos arqueológicos "que nos hablan de nuestra historia y que están considerados entre los más importantes de la Región datados en la dominación de Roma", afirmó Conesa.
De esa cantidad, la mayor parte, 217.000 euros, se destinarán a proteger el yacimiento mediante la colocación de cubiertas sobre los baños árabes que se encuentran en el mismo, la zona más frágil, mientras que 71.000 se dedicarán a la intervención para la conservación de los restos y 12.000 corresponden a la redacción de proyecto.
La consejera subrayó que destinar una cantidad relevante a la arqueología "representa siempre una inversión productiva en el conocimiento de nuestro pasado y, consecuentemente, en conocernos mejor a nosotros mismos, que somos producto de nuestra historia y de las civilizaciones que la forjaron".
"Estamos dando un paso importante para el estudio, la conservación y la divulgación de este importante yacimiento, porque se comienza el proyecto por lo más urgente, como es poner a salvo el área que se considera en riesgo. También, porque de este modo vamos a valorizar el yacimiento de Los Torrejones, evitando su deterioro, y se atiende a la especificidad de que estamos ante un yacimiento 'vivo', en el que la actividad principal va a ser exclusivamente, durante los próximos años, la investigación arqueológica y científica", aseguró.
La importancia de los hallazgos realizados en Los Torrejones, especialmente a partir de 2015, motivaron que el Gobierno regional subvencionara la redacción de un Plan Director para el yacimiento.
La financiación recién aprobada, se orienta a una primera fase de las actuaciones propuestas en ese Plan, que se corresponde con los baños árabes, descubiertos en diciembre del año 2008 y construidos, probablemente, en el tránsito de los siglos XII al XIII. Como todos los baños andalusíes, se componían básicamente de dos áreas: el recibidor o sala de reposo y el baño propiamente dicho, formado por tres salas de distintas temperaturas: baja, templada y caliente, que recibía el calor de un horno.
La intervención que se propone contempla la necesidad de unos estudios previos, fundamentales para saber con seguridad el estado de conservación concreto de cada material y el grado de intervención que permite.
Un segundo nivel de actuación serán las tareas de reconstrucción volumétrica de los pilares de ladrillo almohade que actualmente se hallan fracturados y desmoronados, la consolidación de las estructuras y de los distintos elementos que se hallan en esta zona noroeste del yacimiento y un tratamiento hidrorrepelente.
Como trabajo final, se propone cubrir de manera singular la zona de los baños mediante bóvedas de cañón de longitud variable según el tramo a cubrir, apoyadas en vigas de madera de gran canto y éstas sobre reducidos pilares situados de la forma menos invasiva posible sobre terreno para que ningún elemento del yacimiento se vea afectado. Esta propuesta se basa en la decisión de hacer que los baños se protejan desde el primer momento de vigencia del Plan y que dicha protección no sea temporal, sino que alcance un carácter definitivo.