MURCIA. El Colegio Oficial de Economistas de la Región de Murcia presentó la semana pasada su barómetro número 29 que recoge la preocupación expresa por el futuro del pequeño comercio. Y es que este sector es uno de los que más tardará en recuperarse del golpe que deja la pandemia en toda la actividad económica, según el estudio.
Los comerciantes corroboran la difícil situación que se les viene encima en los próximos meses. "La situación que vivimos es muy complicada desde la Navidad, las ventas han caído y las rebajas de este año han sido muy flojas", lamenta Carmen Piñero, presidenta de la federación de Comercio de la Región de Murcia (Coremur).
Según cálculos de Coremur, entre un 15% y un 20% de los comercios regionales, que ascienden a unos 22.000, ya se han visto abocados a echar la persiana. Eso arroja una cifra que oscila entre los 3.300 y los 4.400 comercios. Y la previsión que hacen para este año no es mejor, ya que estiman que los negocios abocados al cierre podrían llegar al 40%.
El comercio minorista representa el 12,5% del PIB y, tal como defiende Piñero, tiene un gran impacto en la vertebración de las ciudades y en el empleo. "Cuando contratamos a alguien, suelen ser contratos estables e indefinidos", indica. Por eso defiende un plan de rescate que sostenga los negocios porque "si el comercio minorista no sobrevive, nuestra economía se hunde".
Una de las preocupaciones del sector es que los consumidores se centren tanto en las grandes plataformas y dejen a un lado al pequeño comercio, que es el que crea riqueza a nivel local. "Antes de comprar en una gran plataforma pediría que se compre en un comercio cercano, porque somos la economía real. Yo pediría a los clientes que se planteasen si comprar las 24 horas a un click es lo mejor, es pagar por adelantado, no comprar. La compra en Internet no es un avance, es un cambio", asevera la representante de la asociación que aglutina a los pequeños comerciantes de la Región.
Piñero destaca que han solicitado un plan de ayudas directas a fondo perdido para el pequeño comercio, porque "lo que nos ofrecen son préstamos, que no son la solución". Esta es una necesidad imperiosa y que puede evitar parte de la debacle que viven cada día. "Los establecimientos que cierran ya no volverán a abrir, son comercios perdidos porque muchos de los comerciantes se quedan con un lastre económico imposible de superar", lamenta Piñero.
Las tiendas más castigadas "han sido las de las zonas con más restricciones y en los sectores, el textil se ha visto muy afectado". No obstante, Piñero espera que en seis meses, "la mayoría de la población se haya vacunado y haya una subida del tono económico que lleva a un aumento del consumo".
Preguntada por si los pequeños comercios han aprovechado la pandemia para dar un paso al frente en la digitalización, la presidenta de Coremur asegura que "ya estábamos siguiendo ese camino, pero es cierto que se ha acelerado el proceso".