MURCIA. Si Jimena Amarillo (Valencia, 2001) se dedica al arte de cantar es por la película Los chicos del coro Christophe Barratier, (2004). Cuando sucede esta entrevista, tiene la banda sonora frente a ella. Fue la primera película con la que empezó a hacer versiones al violín, sus primeros tanteos en la música. Este sábado 30 de julio ofrecerá un concierto en la Terraza de la Muralla del auditorio El Batel de Cartagena, dentro del ciclo de las Xtraordinary Nights. Pero antes, este jueves, llevará su pop urbano al Atlàntida Mallorca Film Fest, programado del 24 al 31 de julio en la isla balear. Su cita en el festival de cine nos sirve para mantener una conversación sobre sus filias y fobias audiovisuales y hacer un llamamiento: “Me fliparía componer una banda sonora porque es literalmente lo que hago todos los días. Me pongo a tocar instrumentos, guardo las canciones y no me sirven para nada”.
- ¿Cuál es tu primer recuerdo asociado al cine?
- Mis padres siempre han sido de esos que te sientan en un sofá y te hacen ver películas de época para que te culturices. Mi primer recuerdo es la pereza de pasar tres días viendo Matar a un ruiseñor (Robert Mulligan, 1962). Le pillé manía.
- ¿Cuáles fueron las series televisivas de tu infancia?
- Muchas de dibujos de Cartoon Network, como Phineas & Ferb y Hora de aventuras. Humor absurdo como soy yo. En acción real, Art Attack.
- ¿Con qué frecuencia ibas al cine antes de la pandemia?
- En ocasiones especiales. No soy de ir al cine de continuo.
- ¿Prestas atención a las bandas sonoras?
- A lo que más. Además, como he estudiado un grado de sonido, desmonto las películas y me centro en el foley, en la música, en el sonido en las películas antiguas…
- ¿Cuáles son tus compositores de música de cine favoritos?
- Yann Tiersen, porque Amélie es la mejor banda sonora del mundo. Es súperbonita. También me gusta Ludovico Einaudi. En general soy de bandas sonoras más musicales que cantadas.
- ¿Qué valoras en una banda sonora?
- Que vaya acorde con la imagen, que pegue. Si es una imagen triste, la canción también ha de serlo. Ha de emocionarme, la he de sentir.
- Tu música favorita, Silvia Pérez Cruz, ha compuesto canciones para proyectos cinematográficos. ¿Has estado atenta a esta faceta de su carrera musical?
- Totalmente. El tema de Cerca de tu casa es una canción al piano, sin voz, que es una locura..
- Una de tus películas favoritas es Charlie y la fábrica de chocolate, ¿te sabes las canciones de los umpa lumpas?
- Me meo. No te voy a mentir, me sé alguna. Ahora que tengo más idea, lo he estudiado y me fijo más.
- Defines tu música como pop moñas sin complejos, ¿qué hay del cine moñas?
- Veo horterismos, porque las cosas horteras me encantan. Americanadas rollo Love Actually.
- ¿Cuál fue la última película que viste en una sala?
- Fui con mis amigos a ver en la Filmoteca Pepi, Luci y Bom
y otras chicas del montón (Pedro Almodóvar, 1980). Alaska es la mejor.
- ¿Te llamó la atención la música que la acompañaba?
- La película es un cuadro en sí y la música también.
- ¿Qué vínculo tienes con el género musical?
- Eran las películas que más me ponían mis padres. He visto Grease (Randal Kleiser, 1978) cinco veces. Mamma Mia (Phyllida Lloyd, 2008) es muy divertida. No puede no gustarte. Pero, en cambio, La La Land (Damien Chazelle, 2017) no me gusta una mierda.
- El desamor es el principal ingrediente de tus letras, ¿asocias tu música al género dramático o al romántico?
- Romántico, porque no hay que exagerar. Soy una chica de contrastes, en mi vida estoy muy alegre, pero las canciones me salen así. Drama paso porque me agobio.
- Hay cantantes que evolucionan a actrices como Björk y y Debbie Harry, y viceversa, caso de, por ejemplo, Leonor Watling y Najwa Nimri. ¿A qué crees que responde ese trasvase entre el cine y la música?
- He estado dándole vueltas a ese tema últimamente. En el disco lo noto en la voz con la que canto. He llegado a frustrarme al darme cuenta de que estaba grabando una canción rap en la que parecía un pingüino mudo frente al micrófono. Se nota mucho en la actitud, hace falta hacer acting. Para grabar y canciones y que se sientan has de cantar desgarrado o rapear con energía. A veces voy al estudio y no me siento con el estado de ánimo. Al cantar se actúa igual. Menos en el caso de Los Punsetes, aunque si lo piensas bien, cuando ella se planta ahí, es otra forma de actuar.