Fotos: MIAMI OPEN
MURCIA. Un Carlos Alcaraz épico disputará las semifinales del torneo ATP Masters 1.000 de Miami, en Estados Unidos, después de ganar con remontada por 6-7 (5), 6-3 y 7-6 (5) en 2 horas y 22 minutos al serbio Miomir Kecmanovic en un encuentro más que exigente y en el que ha dado muestras de su fortaleza mental para vencer incluso sin encontrarse demasiado cómodo durante buena parte del choque. Ahora buscará la final en el duelo que le enfrentará al polaco Hubert Hurkacz, quien defiende el título que logró en 2021 y viene de eliminar al ruso Daniil Medvedev.
Tras haber superado ya al húngaro Marton Fucsovics, al croata Marin Cilic y al griego Stefanos Tsistipas sin haber cedido ningún set, el tenista murciano, de 18 años y que es el decimosexto jugador del mundo, saltó a la pista central del Hard Rock Stadium siendo favorito ante un adversario cuatro años mayor, que ocupa el puesto 48 de la ATP y al que se medía por primera vez en su carrera.
El partido, sin embargo, no comenzó bien para Alcaraz pues Kecmanovic ganó sus dos primeros saques y entre medias le hizo el "break" para colocarse 0-3. Alcaraz estaba acelerado de más y eso lo aprovechó su rival para seguir mandando.
Carlos empezó a mejorar asegurando sus siguientes servicios con solvencia y en el séptimo juego del set por fin le rompió el saque a Miomir remontando un 40-0 con cinco puntos seguidos al resto.
Con el 3-4 echó la bola al aire para empatar y el pupilo de Juan Carlos Ferrero, ya más suelto, no falló con dos "aces".
El balcánico reaccionó para seguir llevando la iniciativa, pero el de El Palmar ya estaba metido de lleno en el encuentro y, mostrando su mejoría a la hora de sacar, logró el 5-5.
El choque se convirtió en un intercambio de cañonazos y así se llegó al 6-6 y con ello al "tie break".
En la muerte súbita cada jugador fue ganando sus saques hasta el 4-4, momento en el que Alcaraz tomó una mínima ventaja. Sin embargo, Kecmanovic reaccionó y, con tres puntos seguidos, se llevó la primera manga después de 51 minutos de intensa batalla.
Era el primer set que perdía "La Roca" esta semana en Miami y le tocaba remontar para llegar a semis. Seguramente escocido por el desenlace de ese "tie break" Carlos devolvió a su oponente el parcial que éste le había endosado en el primer set, un 3-0 que le hizo dominar en busca de forzar el desempate. A partir de ahí, con ir ganando su saque, casi siempre de forma holgada, le bastó para conservar la renta (4-1, 5-2 y finalmente 6-3) para el 1-1 después de otros 36 minutos.
Con el español llevando normalmente la iniciativa pero con el serbio respondiendo con firmeza y con piernas para llegar a casi todas las bolas, el pase a la penúltima ronda del torneo se resolvería en el tercer set, el cual comenzó con Kecmanovic al saque.
Cada jugador fue ganando su servicio a pesar de los esfuerzos del rival al resto y así se sucedieron los empates unos tras otro hasta el 6-6. Sí, otra muerte súbita para conocer el nombre del ganador.
Ahí Alcaraz se vio nuevamente por detrás (1-3, 2-4 y 3-5) pero es Alcaraz y con cuatro puntos seguidos, los últimos del encuentro, se llevó una victoria épica con 102 puntos ganados por los 99 de su contrincante.
No es de extrañar que Carlos, exhausto como su rival tras otros 55 minutos de lucha, se arrodillara para celebrarlo pues es un triunfo de muchísimo mérito y que le permitirá jugar su segunda semifinal consecutiva en un Masters 1.000, tras la perdida hace un par de semanas contra Rafa Nadal en Indian Wells. En esta ocasión quiere elevar el listón y verse en una final.
El murciano, que se acordó de su entrenador, ausente al tener que volver a Valencia por la repentina muerte de su padre, se lo dedicó a ambos: Juanki y Eduardo junto a un corazón, su firma en la cámara al acabar el choque.
Un detalle más de la grandeza de este chico que tratará de tumbar también a Hurkacz, quien a sus 25 años es el décimo jugador del ranking y que ha superado en cuartos de final por 7-6 (7) y 6-3 a Medvedev, un año mayor y actual número 2 del circuito.