Y los museos de Cartagena volvieron a obrar su magia 

CARTAGENA. Ambientazo. Eso es lo que había en las calles de Cartagena este sábado, cuando la ciudad recuperó la celebración presencial de uno de sus eventos más emblemáticos: la Noche de los Museos. No fue igual, pero fue 'Una noche posible', que ha sido como se ha bautizado a esta edición.

Una de las diferencias fue que, por primera vez y debido a la covid, las actividades se desarrollaron durante todo el día para evitar las aglomeraciones de años anteriores y garantizar las medidas sanitarias. También que para acceder a los distintos espacios, rutas y talleres fue necesario mostrar un documento de carácter nominativo, que acreditase la inscripción previa al mismo; mientras que en los eventos sin inscripción previa se redujo el aforo al 50%.

En total, los cartageneros pudieron disfrutar de 19 espacios museísticos y 18 rutas y visitas guiadas para grupos de entre 7 y 15 personas. Los niños también tuvieron su Día de los Museos dedicado a ellos, con 10 talleres infantiles, algunos virtuales, y 2 visitas guiadas. 

Además, las personas que no pudieron asistir de forma presencial a las actividades tuvieron la oportunidad de disfrutar del patrimonio de Cartagena desde sus casas, ya que se mantuvo La Noche Virtual a través de las redes del evento.

Turistas de fuera con noche incluida

La Noche de los Museos de Cartagena ha alcanzado tal dimensión que es capaz de despertar el interés de los numerosos visitantes de fuera de la ciudad. Por esa razón, la organización del evento, en colaboración con la Asociación Agrup Hoteles, ofreció a los turistas que pernoctasen en la ciudad una visita guiada por todas las estancias y obras de arte del Palacio Consistorial, uno de los edificios cumbre del Modernismo en Cartagena. También pudieron disfrutar de los pases para los espectáculos de danza y copla programados en el Patio de las Herrería del Museo de la Artillería.

Como siempre, el evento contó con la participación de numerosos voluntarios sin cuya ayuda desinteresada no hubiera sido posible esta celebración tan especial y tan esperada por los cartageneros.