MURCIA. Los mercadillos más pequeños del municipio de Murcia están ya funcionando a medio gas desde el lunes pasado con los puestos de alimentos frescos y a un tercio de su capacidad, pero los más grandes como los de La Fama, Santa María de Gracia, El Palmar o Sangonera la Verde aún tendrán que esperar al mes dos semanas para volver a reiniciarse. Aunque ya se maneja una fecha para que se vuelvan a montar: sería el martes 2 de junio, para el de El Palmar.
Pero para poder ganar espacio y que se puedan instalar un mayor número de puestos, desde el Ayuntamiento se ha puesto sobre la mesa un cambio de ubicación de los mercados más grandes que contemplaría que el de La Fama de los jueves se trasladase a La Fica o que el de El Palmar de los martes se instalase en el entorno del conocido como edificio de 'Los Colorines', detrás de las destilerías Bernal.
Así se lo ha planteado el concejal de Comercio, Mercados y Vía Pública, Juan Fernando Hernández, a los vendedores ambulantes en una reunión que ha tenido lugar este viernes. Hernández ha explicado a Murcia Plaza que se ha reforzado la plantilla de inspectores de mercados y que ya se han hecho las mediciones para llevar a cabo los cambios tanto en La Fica como en El Palmar tras pedir a Patrimonio posibles ubicaciones para ampliar los puestos.
El edil es consciente de la difícil situación por la que pasan los comerciantes y detalla que "estamos intentando por todos los medios dar una solución a su situación para que puedan retomar la actividad el mayor número posible, ya que están entre la actividad económica y la Política Social y tendríamos que dedicar más recursos en ayudas si no hay una solución lo antes posible".
No obstante, la última palabra la tienen los vendedores ambulantes, que preparan manifestaciones para la semana que viene, y que están estudiando si aceptar la propuesta de un cambio de ubicación.
Otra de las propuestas que se ha puesto sobre la mesa es que ya la semana que viene se empiecen a incorporar los puestos de textil y calzado, algo que el portavoz de la asociación de vendedores ambulantes de Murcia, Juan Vinagre, considera urgente, ya que "los pequeños comercios de ropa pueden abrir pero nosotros no podemos instalar nuestros puestos de textil y una gran parte del millar de profesionales de nuestro colectivo están en situación crítica".
En la ciudad de Murcia han abierto los mercadillos más pequeños, con un aforo reducido y estrictas medidas de seguridad.