Papeletas con las dos candidaturas. Foto: Juanchi LópezMURCIA. Finalmente los miembros de la Cofradía de Jesús (Los Salzillos) podrán celebrar el próximo martes 8 de septiembre sus elecciones al Cabildo. La Dirección General de Salud Pública no ha puesto ningún impedimento “siempre que cumplan con la normativa vigente”. Lo harán en dos sedes para no provocar aglomeraciones: los electores con apellidos de la A a la N en la Iglesia de Jesús y de Ñ a la Z en el Obispado. El acuerdo se dividir a los electores se alcanzó esta noche tras una reunión convocada de urgencia en Palacio Episcopal con la Comisión Electoral y representantes de las dos candidaturas.
La Comisión Electoral de la Cofradía había remitido un escrito a la Consejería de Salud solicitando autorización para la celebración de la jornada. Desde el Gobierno regional no han considerado necesario autorizar o desautorizar el acto, pero sí se les recuerda que “cualquier acto/evento tiene que cumplir con la normativa vigente”, en referencia a evitar las aglomeraciones, el uso de mascarilla y guardar las distancias de seguridad, además de cualquier otra medida higiénico-sanitaria destinada a evitar cualquier riesgo de contagio.
Estas polémicas elecciones, en cualquier caso, ya comenzaron el pasado martes cuando quedaron instaladas hasta cuatro mesas en el Obispado para comenzar a recibir el llamado ‘voto en ausencia’. Incluso decidieron ampliar el horario y suprimir la cita previa para dar cabida al gran número de cofrades que habían decidido adelantar la votación ante cualquier eventualidad que pudiera producirse en las que se están convirtiendo en uno de los procesos electorales más conflictivos en la historia de la Cofradía en sus 400 años de historia.
La fecha fijada -martes 8-, en un día laborable, no ha convencido a la mayoría de los 3.000 cofrades que conforman una de la cofradías con más historia en la Región. Estiman, de un lado, que la convocatoria en martes puede restar afluencia a las urnas y, de otro, que el horario establecido de 10 de la mañana a ocho de la tarde, tampoco contribuye a una participación masiva del cuerpo electoral al coincidir con la jornada laboral.
Y mientras Los Salzillos (también conocidos popularmente como 'Los Moraos') continúan su proceso para la renovación de un Cabildo hasta ahora presidido por Antonio Gómez Fayrén, las candidaturas de los dos aspirantes (Emilio Llamas -quien se define como ‘oficialista’ y asegura que cuenta con el apoyo del Obispado- y Juan Dólera) mantienen una campaña ‘boca a boca’ y cuidando enviar mensajes a través de las redes sociales, lo que está expresamente prohibido en las Constituciones de la Cofradía, de 2010 (página 77), y que ya supusieron la anulación de la pasada convocatoria de diciembre, cuando algún familiar del candidato Llamas habría enviado mensajes a través de estas redes.
Entonces, el Obispado proclamó presidente al candidato Francisco Sardina; posteriormente revertió su decisión, y nombró una gestora (Comisión Episcopal) y una nueva Comisión Electoral que debía convocar las elecciones de esta y la próxima semana.
Este fue uno de los momentos en los que comenzó a 'torcerse' el proceso, por cuanto las citadas Constituciones establecían que ante la anulación de una candidatura por incumplir alguna de las normas, la decisión no podrá ser recurrida: "Queda rigurosamente prohibido que ningún candidato haga acto alguno público ni privado de comunicación, ni colectivo ni de forma individualizada. El incumplimiento de esta obligación anulará su candidatura en el momento en en que fuera constatado por la Comisión Electora, y sin que quepa contra esa decisión recurso ordinario alguno".
Esta parte del artículo 107, junto a los artículos 104, 108 y 109 de las Constituciones fue suprimido por orden el Obispo ante de la actual convocatoria. El decreto fue firmado por el obispo el 15 de junio de 2020.
