La hostelería, el comercio y el turismo de Archena claman contra el "ataque directo" del Gobierno por las restricciones

MURCIA. Archena se revuelve contra las restricciones del Gobierno regional. En un duro comunicado, el sector de la hostelería, el comercio y el turismo de Archena se unen para expresar públicamente su disconformidad con el Ejecutivo murciano ante las nuevas medidas aprobadas para frenar el avance de los contagios, entre las que se incluye la reducción de aforos al 30% en los interiores de tanto de restaurantes y bares como de locales y tiendas comerciales en 13 municipios situados en riesgo alto o nivel 3 (entre ellos, la propia Archena). 

Los representantes de estos tres sectores aseguran que la decisión del Gobierno es un "ataque directo que vuelve a poner en riesgo sus negocios y cientos de puestos de trabajo en plena temporada de verano". Por ello han lanzado una campaña en redes sociales, titulada 'SOS a la Hostelería, Comercio y Turismo de Archena' en señal de protesta. También buscan apoyos y movilizar al conjunto de la población ante esta decisión que "perjudica directamente el funcionamiento normal de sus negocios". 

Los empresarios esgrimen en su comunicado que se ha pasado "de forma injusta' del nivel 1 al nivel 3 (nivel de alerta alto) con una incidencia de 82,4 por cada 100.000 habitantes. Justifican sus argumentos comparando sus datos con otros 17 municipios de la Región con mayor índice de incidencia, por lo que lamentan que "sólo hayan castigado a Archena". "Esto no atiende a ningún criterio sanitario o epidemiológico razonable o lógico", dicen, exigiendo una explicación" justa y comprensible" y una rectificación por parte del Ejecutivo autonómico".

La catalogación de nivel 3, añaden, supone la reducción del aforo en locales comerciales y hosteleros al 30% y diferentes limitaciones en la organización de eventos culturales, turísticos y de ocio. Los tres sectores, por tanto, no entienden la medida "sin base ni criterio racional". Y concluyen: "Ponen en riesgo nuestros negocios y cientos de puestos de trabajo en plena temporada de verano por una decisión política sin justificación. Somos un municipio turístico y vivimos de nuestros clientes".