MURCIA. Tener las sienes plateadas va a ser la tendencia de aquí a pocos años, formando parte de lo que se denomina la 'Silver Economy'. Tenemos un problema demográfico muy acuciante a nivel global que va a impactar en la economía. Concretamente se proyecta que en el año 2050 se habrá doblado el número de personas (1.500 millones) que sobrepasen los 65 años, es decir, el doble de los que hay ahora. La población mundial está creciendo, ya hemos pasado la barrera de los 8.000 millones de personas y el mayor temor para las economías es que estamos envejeciendo muy rápido.
Aunque la población mundial está creciendo, no lo hace al mismo ritmo que antes. La baja natalidad de estas últimas décadas no ha poblado suficientemente las capas de edad productivas de la economía de las que dependen las pensiones. En el siguiente gráfico se puede apreciar cómo el ratio de crecimiento poblacional mundial está bajando.
Por otra parte, la esperanza de vida ha aumentado significativamente con los avances en la medicina y con las mejores condiciones económicas y sociales provocando que las capas altas de la pirámide poblacional global están engordando continuamente.
Actualmente la proporción de mujeres mayores de 65 años supera al de los hombres, y se calcula que esta diferencia aumentará aún más en el futuro ya que la expectativa de vida en las mujeres es mayor.
En el documento 'Finanzas y desarrollo de marzo 2020' del Fondo Monetario Internacional (FMI) se pone de relieve que "la demografía puede incidir poderosamente en la velocidad y el proceso de desarrollo económico". El impacto producido por el envejecimiento poblacional de los países desarrollados afectará profundamente a todos los países lastrando el crecimiento económico y la utilización de recursos, pero será menor que el impacto generado por el menor crecimiento demográfico.
La reducción de la población activa -y al mismo tiempo de trabajadores especializados- en las economías desarrolladas que sustentan las pensiones en una situación de una alta demanda de recursos sanitarios y sociales representan un reto para las diferentes economías. Pero no todos son retos, también surgen oportunidades alrededor de esta nueva tendencia demográfica. Ahora se trata de sacar provecho de dichas oportunidades, pero antes definamos el concepto.
La 'Silver Economy', tal como define la Unión Europea (UE), es "la suma de toda la actividad económica que atiende las necesidades de las personas de 50 años o más, incluidos los productos y servicios que compran directamente y la actividad económica adicional que genera este gasto".
La participación y la importancia de la 'Silver Economy' en la economía de un país es por lo tanto fácilmente calculable. Solamente en Europa se estima un aumento desde 199 millones de personas en 2015 a 222 millones en 2025 o un 43% de la población, con una contribución al PIB de 4,2 trillones a 6,4 en 2025. Esto representa una previsión de un crecimiento de 5% anual durante este período que necesitará de medidas por parte de la UE como el Smart Silver Economy project para implantar una estrategia común en Europa con el fin de estimular el crecimiento económico generado por los mayores de 50 años. Europa no es la única en tener una visión positiva de la 'Silver Economy'; el informe del Banco Mundial sobre el envejecimiento Golden Aging expone que las sociedades que envejecen no están predestinadas a experimentar un estancamiento o una disminución en los niveles de vida.
El impacto económico de la 'Silver Economy' en Europa
Fuente: https://ec.europa.eu/newsroom/dae/document.cfm?doc_id=50754
El envejecimiento de la población mundial va a tener un impacto significativo en las inversiones de cara al futuro. Los inversores deberán tener en cuenta estas tendencias demográficas descritas, al tomar decisiones de inversión. Y, en consecuencia, es muy posible que deban ajustar sus estrategias a dichas tendencias. Existe una oportunidad de negocio para productos y servicios enfocados a las necesidades de este segmento de la población. Además, con la reducción de la población activa menor de 50 años, los mayores ocuparán puestos de mayor responsabilidad y productividad, unidos a un desarrollo tecnológico no visto hasta ahora (IA, Chat GPT, Realidad Aumentada (RA), Internet de las Cosas IoT,…)
La demanda de la 'Silver Economy' deberá ser satisfecha y, por tal motivo, se están intentando promover soluciones tecnológicas y sociales que ofrezcan una respuesta adecuada. La siguiente lista ilustra estas necesidades: Salud conectada/ Robótica/ Turismo Silver/ Monitorización de constantes vitales a nivel doméstico/ Desarrollos de residenciales adaptados- smart homes/ Implementación de hábitos saludables con el uso de la tecnología/ Educación especial y estilo de vida/ coches autónomos. Como podemos observar, la tecnología tiene un peso muy relevante en esta nueva tendencia de demanda, es la llamada SilverTech.
El sector financiero no iba a dejar escapar esta oportunidad de inversión. El inversor minorista y profesional tienen disponibles varias alternativas ya sea con formato ETF o como fondo de inversión. La creación de estos productos temáticos responde a una demanda por parte de los inversores, quienes identifican un buen indicador de que una esta tendencia demográfica se está afirmando.
René Bauch es asesor financiero de la EAF alicantina gCapital Wealth Management, EAF que asesora el fondo Gestión Boutique gCapital Total Market (ES0116831050). Puede contactar con el autor para solventar cualquier duda o interesarse por los servicios de gestión patrimonial de gCapital escribiendo a bauch.rene@gcapital.es o info@gcapital.es
Aviso legal: En ningún caso la presente publicación supone una recomendación personalizada o informe de inversión. Es un artículo meramente informativo. Bajo ninguna circunstancia podrá entenderse que el presente documento constituye una oferta de compra, venta, suscripción o negociación de valores u otros instrumentos. Su autor por tanto no responde bajo ninguna circunstancia por la utilización o seguimiento del mismo.