incursiones berberiscas 2022

Los piratas 'vuelven' a Los Alcázares para llenar de vida el municipio en su fiesta pagana

15/04/2022 - 

LOS ALCÁZARES. Con la llegada de la primavera, poco a poco la Región de Murcia va recuperando sus fiestas y actividades que la pandemia, durante 2020 y 2021 obligó a suspender. En algunos casos, incluso, son tres años sin la celebración, ya que las lluvias impidieron en muchos casos la celebración en 2019 de esos eventos. Sucede con la feria náutica de San Pedro, o las procesiones marrajas en Cartagena. Todo eso ya es pasado y 2022, pese al alza de los precios, parece que es el de la vuelta a la normalidad.

En ese regreso a las costumbres, el municipio de Los Alcázares celebra la Fiesta de las Incursiones Berberiscas en el Mar Menor. “Es la única fiesta pagana en plena Semana Santa en España”, señala el concejal de festejos del municipio, José Carlos Castejón. Estas fiestas transportan a alcazareños y visitantes a los siglos XVI, XVII, XVIII y XIX, tiempos difíciles para sus antepasados que vivían bajo la amenaza de la piratería berberisca. En esa época la población de la albufera marmenorense sufría frecuentes razzias de corsarios procedentes del Norte de África. La amenaza latente de estos piratas motivó la construcción de una densa red de torres vigía que se extendía por el litoral murciano, con el fin de defender a sus habitantes del peligro berberisco. En Los Alcázares queda como testimonio de estas hazañas pasadas la Torre del Rame o Ramí, que, de origen árabe, experimentó remodelaciones durante la repoblación castellana para prevenir el peligro de las incursiones berberiscas.

Unas fiestas que se celebran desde 1999, como alternativa en la Región a las procesiones de Semana Santa. Desde este jueves, y hasta el domingo, el municipio acoge un mercado medieval y un campamento festero alrededor de los cuáles se celebran varios actos que recrean esa época en la que los piratas eran la gran amenaza de la zona. Este peligro corsario fue el detonante de la despoblación experimentada por el campo del Mar Menor durante el siglo XVI. En el siglo siguiente, el incremento de la amenaza pirata y la violencia de sus ataques a haciendas obligó a los habitantes de la zona a retraer sus ganados de las proximidades de la marina, llevándolos a zonas del interior del campo cartagenero.

Unas fiestas en las que la población se implica de forma muy directa, con muchas peñas participando de lleno en las actividades. “Hay muchas ganas. Desde las 10 de la mañana y hasta las once de la noche, la gente está participando en todas las actividades”, señala Castejón. El regreso de las fiestas berberiscas supone una señal más de que, en este 2022, todo lo que la pandemia suspendió, vuelve. Y con ello, la alegría a las calles.

Noticias relacionadas

next