Los precios de la Región recuperan fuerzas: subida interanual del 2,7%

MURCIA (EFE/MP). Los precios de la Región de Murcia sufren una ligera caída durante julio respecto al mes anterior, pues se redujeron en un 1% durante este periodo. No obstante, la tasa de variación anual continúa siendo positiva y ya alcanza el 2,7%. Asimismo, en lo que va de año el IPC de la Comunidad ha aumentado un 1,3%, de acuerdo con los datos del Instituto Nacional de Estadística.

Por su parte, la media nacional aumenta esta variación anual hasta el 2,9%, aunque también muestra un descenso respecto al mes de junio con 0,8% menos de valor.

De esta forma, los datos publicados este viernes por el INE confirman los avanzados hace dos semanas y profundizan la tendencia alcista de la inflación emprendida en marzo (1,3%) que continuó en abril (2,2%), mayo (2,7%) y junio (2,7%).

Por sectores, en el último mes los que han sufrido subidas han sido el transporte (0,8 %); hoteles, cafés y restaurantes (0,6%); ocio y cultura (0,5%) y bebidas alcohólicas y tabaco (0,5%). Mientras, se han mantenido estables los precios en enseñanza y medicina.

Además, han tenido descensos en el IPC el vestido y calzado (-14,4%); menaje (-1,4%); vivienda (-1,1%); alimentos y bebidas no alcohólicas (-0,2%); otros (-0,2%) y comunicaciones (-0,1%).

En el cómputo anual, los incrementos se han registrado en transportes (10,1%); vivienda (8,8%); hoteles, cafés y restaurantes (1,4%); alimentos y bebidas no alcohólicas (1%); vestido y calzado (0,9%); enseñanza (0.6%) y otros (0,5%).

Mientras, han bajado en comunicaciones (-3%); medicina (-1,1%); ocio y cultura (-0,7%); menaje (-0,4%) y bebidas alcohólicas y tabaco (-0,1%).

El INE explica que entre los factores que presionaron al alza los precios destacan los hoteles, cafés y restaurantes, que se encarecieron un 1,1% (un punto y medio más que en junio) ante la subida del precio de los servicios de alojamiento, que en julio de 2020 bajaron.

Los alimentos y bebidas no alcohólicas se encarecieron un 1,7%, seis décimas más que en junio, debido a que los aceites y el pescado subieron cuando el año pasado bajaban y a que las frutas se han abaratado menos este año que en 2020.

Las comunicaciones también presionaron el IPC al alza, ya que aunque su precio bajó un 3% en julio, lo hizo en menor medida que en junio ante la estabilidad de los precios de telefonía y fax.

Por el contrario, el grupo de vivienda presionó a la baja los precios en julio debido a que su encarecimiento, del 9,4%, fue un punto y medio inferior al de junio después de la rebaja del IVA de la electricidad abaratara la factura de la luz, que en 2020 subió.

Asimismo, la evolución de los precios de carburantes y lubricantes para el transporte personal, que suben menos este año que el pasado, moderó la inflación del transporte al 8,5%, cuatro décimas menos que en junio, lo que contribuyó a frenar la escalada del IPC general.

En julio, la inflación subyacente -que no tiene en cuenta los precios de la energía ni de los alimentos no elaborados por ser los más volátiles- se situó en el 0,6%, cuatro décimas por encima de la de junio y 2,3 puntos por debajo del IPC general.