El mercado no parece comprar las advertencias de que la economía acabará viéndose reflejada sobre su marcha, tal y como explica el analista
MADRID. Los bancos centrales han hablado y han dejado claro que la moderación será el perfil principal para este 2023. La consideración de que el deterioro económico será suficiente para alcanzar los objetivos de inflación, así como los pronósticos de crecimiento -que siguen sin proyectar una recesión ni en Estados Unidos ni en Europa-, una tasa de desempleo -que en EE UU apunta a que 1,75 millones de personas se irán al paro- y un proyecto de alzas en los tipos de interés que no ha terminado -pero que cada vez está más cerca de hacerlo- son claves en la moderación.
Con este escenario también hemos visto como los resultados empresariales, que con permiso de los extraordinarios de los bancos, dejan potencialmente un gran perdedor: las tecnológicas. Las MAAMNG -antes FAANG- como son Meta Platforms, Apple, Amazon, Microsoft, Netflix y Alphabet (Google) decepcionaron con carácter general en sus resultados; y no porque no fueran buenos, ya que en algunos casos tanto los ingresos como los beneficios finales superaron la cifra del año anterior, sino porque en en la mayoría de los casos fueron peores que las estimaciones de consenso.
El sector tecnológico global se enfrentará a grandes retos durante 2023 y en conjunto se estima que puedan recortar empleos entre 150.000 y 170.000 trabajadores. El sobredimensionamiento de algunas de ellas les lleva a tomar este tipo de decisiones que en algunos casos puede suponer incluso la supervivencia financiera del negocio.
A modo de resumen de lo acontecido esta semana, el Comité Abierto de la Reserva Federal americana (FOMC) decretó un aumento de tipos de 25 puntos básicos hasta un rango de 4,50-4,75%. La decisión estuvo en línea con las expectativas del mercado y la declaración no incluyó cambios importantes en comparación con la reunión de diciembre.
Se mantiene la frase de que las subidas de tipos en curso son apropiadas y plantea dudas sobre si los tipos alcanzarán un máximo del 5%, como indican los mercados monetarios, o si la FED seguirá subiendo más allá de marzo. En la conferencia de prensa posterior, Powell dejó estos datos clave a tener en cuenta:
En este sentido, Powell fue bastante moderado durante la sesión de preguntas y respuestas y los mercados así lo reflejaron.
Por su parte, el Banco Central Europeo (BCE) subió al día siguiente en 50 puntos básicos los tipos de interés hasta el 3%, acorde a lo estimado mientras espera que subiendo significativamente, pero a un ritmo constante. Lo que es más importante, el BCE enfatizó que tiene la intención de elevar otros 50 puntos básicos en la reunión de marzo.
Por su parte, el ritmo de reducción de la cartera de bonos APP se confirmó en 15.000 millones de euros al mes a partir de marzo. Los titulares clave de la institución presidida por Christine Lagarde fueron los siguientes:
El mercado no parece comprar las advertencias de que la economía acabará viéndose reflejada sobre su marcha. Pero los datos de empleo ahora mismo son la clave más importante para pronosticar el deterioro real de la economía, así como las consecuencias que tendrá durante este 2023. ¿Habrá recesión? Ya lo veremos….
Darío García es analista de XTB