MURCIA. El Índice General de Precios de Exportación de los productos industriales registró un aumento interanual del 7,7% el pasado mes de abril, su mayor repunte desde enero de 2011, según los datos publicados este viernes por el Instituto Nacional de Estadística.
En esta subida viene empujada principalmente por la Energía, que incrementa su tasa más de 59 puntos, hasta el 107,2%, y se sitúa en su nivel más alto desde el comienzo de la serie, en enero de 2006.
Por su parte, los precios de importación de dichos productos subieron un 6% en comparación con abril de 2020, tasa más de cuatro puntos y medio por encima de la del mes anterior.
Con las cifras de abril, los precios de las exportaciones encadenan cuatro meses consecutivos de avances interanuales, mientras que los de las importaciones suman dos meses de tasas positivas (abril y marzo), tras trece en negativo, según datos publicados este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Entre los sectores industriales con influencia positiva en esta evolución destacan la Energía, que incrementa su tasa más de 59 puntos, hasta el 107,2%. Este comportamiento es consecuencia de la subida de los precios de la Producción, transporte y distribución de energía eléctrica, frente a la bajada registrada en abril del año pasado. También influye que los precios del Refino de petróleo descendieron en 2020 más que este mes.
Por su parte los Bienes intermedios, con una variación del 8,5%, más de dos puntos por encima de la del mes anterior, debida al aumento de los precios de la Fabricación de productos químicos básicos, compuestos nitrogenados, fertilizantes, plásticos y caucho sintético en formas primarias, que disminuyeron en 2020.
Cabe destacar también, aunque en menor medida, que los precios de la Fabricación de productos básicos de hierro, acero y ferroaleaciones suben este mes más que en abril del año anterior.
Bienes de consumo no duradero, cuya tasa anual del 1,1%, más de un punto superior a la de marzo, está causada por el incremento de los precios de la Fabricación de aceites y grasas vegetales y animales, frente a la bajada reflejada en 2020.