Así, los participantes en el estudio que mejoraron su dieta mostraron niveles más bajos de glucosa, un menor peso corporal y un perímetro de cintura más reducido tras un año de seguimiento.
Los investigadores analizaron datos de 6.647 personas con alto riesgo cardiovascular, valorando parámetros que definen el riesgo cardiometabólico como los niveles de triglicéridos y colesterol LDL y HDL en sangre, la presión arterial, la glucemia, el peso corporal y el perímetro de la cintura.
La disminución del riesgo cardiometabólico podría deberse a la actividad antioxidante, antiinflamatoria, antiaterogénica y antimutagénica de los distintos compuestos presentes en fruta y verdura.
El IISPV ha indicado que la mayoría de los estudios previos habían demostrado que la cantidad de fruta y verdura tiene efectos positivos, "dejando a un lado la variedad" que, a su vez, refleja el distinto contenido en fitoquímicos.