MURCIA (EP). La vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, y la ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, han anunciado que reforzarán las inspecciones de trabajo en las empresas para combatir la precariedad y temporalidad de los jóvenes; y Díaz ha revelado que ha sido "amenazada de muerte" por la realización de estas inspecciones.
Así lo han avanzado este lunes 5 de julio en el marco de la firma de un convenio entre el Organismo Estatal Inspección de Trabajo y Seguridad Social (OEITSS) y el Instituto de la Juventud (INJUVE), que facilitará realizar acciones de colaboración conjunta para mejorar las condiciones laborales de las personas jóvenes.
"Ser joven no puede seguir siendo sinónimo de precariedad. Necesitamos -y para eso es este convenio-, reforzar las inspecciones para acabar con esa temporalidad, con esa parcialidad y esos mecanismos que utilizan algunas empresas para precarizar los trabajos de la gente más joven", ha explicado Belarra.
Por su parte, Yolanda Díaz, ha revelado que ha llegado a ser "amenazada de muerte por sectores productivos de este país porque no les gusta que se hagan inspecciones de trabajo".
La ministra de Trabajo ha celebrado que este lunes, con la firma de este convenio, "se da un paso singular que nunca se había hecho en este país" con el objetivo de "colocar el paro juvenil en el centro de todas las actuaciones".
"Esta firma a la que hoy asistimos es un importantísimo hito en la redefinición de nuestras obligaciones con la juventud española", ha destacado Díaz, que ha estado acompañada en el acto por el director general del Organismo Estatal de Inspección de Trabajo y Seguridad Social, Héctor Illueca, y la directora general del Instituto de la Juventud, María Teresa Pérez.
Según ha subrayado, "ser joven no puede volver a ser un factor de exclusión a la hora de acceder a un empleo digno" ni ser "equivalente a 'contrato precario y sin garantías'". "Tenemos que romper esa injusta correspondencia entre juventud y precariedad", ha insistido.
Para ello, además del refuerzo de las inspecciones de trabajo para comprobar el cumplimiento de las condiciones laborales de los jóvenes trabajadores, el convenio contempla también otras actuaciones como la programación de acciones formativas sobre los temas que puedan resultar más interesantes para los jóvenes trabajadores.
Asimismo, difundirán, especialmente a través de la página web del INJUVE y de sus redes sociales, los mecanismos legales de denuncia formal y de comunicaciones al buzón del fraude, con el fin de potenciar su utilización por parte de los jóvenes que puedan estar sufriendo "abusos" en este sentido; y elaborarán campañas de difusión relativas a los derechos laborales de los jóvenes y la lucha contra la precariedad.
Por otro lado, preguntada por si corre peligro que la reforma laboral pueda estar pactada con los empresarios, Yolanda Díaz ha ironizado diciendo que "las propuestas que hace el Ministerio de Trabajo en relación con la transformación del mercado laboral español son tan marxistas como las que propone Joe Biden, el Papa o el comisario de Empleo y Trabajo de la Comisión Europea".
La ministra ha defendido que lo que están haciendo en la mesa de diálogo social es "cumplir por primera vez con la recomendación de la Comisión Europea". Según ha dicho, España tiene "una enorme anomalía que se llama precariedad y temporalidad, con unas cifras aberrantes".
En este sentido, ha añadido que "por primera vez en la mesa de diálogo social están trabajando con mucha ambición para cumplir con la recomendación y se ha mostrado convencida del compromiso de los agentes sociales con la estabilidad en el empleo.
"La normalidad va a ser un contrato indefinido, un contrato formativo y, lógicamente, tendrá que haber un contrato temporal con causa, para que se acaben los abusos", ha zanjado, asegurando que se va a "dejar la piel" para llegar a un acuerdo.