Von der Leyen en la presentación del proyecto Eurodrone. Foto: ECFRBRUSELAS. La empresa Das Photonics SL, una spin-off de la Universitat Politécnica de Valencia (UPV), y la cartagenera Saes, empresa especialista en acústica y electrónica submarina, han sido adjudicatarias de sendos proyectos dentro del último Programa Europeo de Desarrollo Industrial en materia de Defensa (Pedid).
La Unión Europea (UE) prepara a sus fuerzas armadas con alta tecnología e inteligencia artificial, en un esfuerzo por reducir las dependencias tecnologías de terceros países y el desarrollo de la inteligencia artificial con software propio que la hagan autónoma respecto a otras potencias. El presupuesto para defensa de la legislatura actual 2021-2027 es el más alto de la historia de la UE, con casi 8.000 millones de euros.
El proceso de selección, en el que han participado estas empresas, ha incluido 26 nuevos proyectos que recibirán financiación con cargo a un presupuesto de más de 158 millones de euros. Además, otros dos importantes proyectos de desarrollo de capacidades han recibido una subvención de atribución directa por valor de 137 millones de euros en el marco del PEDID. Este programa ha contado con una dotación de 500 millones de euros para el período 2019-2020.
El PEDID es precursor del actual Fondo Europeo de Defensa (FED), nacido en 2021 con un presupuesto de 7.953 millones de euros para esta legislatura y que impulsa la participación de Pymes con un 30% de participación. La adopción del primer programa de trabajo anual del Fondo Europeo de Defensa (FED) para 2021 allana el camino para el lanzamiento inmediato de 23 convocatorias de propuestas que recibirán financiación de la Unión Europea (UE) por un valor total de 1.200 millones de euros para apoyar proyectos colaborativos de investigación y desarrollo en defensa.
La empresa cartagenera es la Sociedad Anónima de Electrónica Submarina SME (SAES), especialista en acústica y electrónica submarina, con sede en Cartagena. Esta empresa tiene un convenio de colaboración público/privada con la Cátedra SAES de la Universidad de Murcia desde hace más de diez años. Participa en el proyecto Mine Risk Clearance for Europe (MIRICLE) junto a otras 17 empresas, con sedes en ocho países de la UE. El proyecto está presupuestado en 9.804.192,48 euros, con una financiación europea de 8.999.611,80 euros.
Su objeto, que se desarrollará en 24 meses, es buscar soluciones para detectar, identificar, contrarrestar y protegerse contra las amenazas de las minas, incluidas las que operan a muy grandes profundidades. MIRICLE utiliza la inteligencia artificial con robots para respaldar la toma de decisiones en una guerra con minas aisladas, una red de comunicaciones y un buque de contramedidas de minas (MCM).
En el caso de la Universitat Politécnica de València, se trata del proyecto SIGNAL, en el que participan otras dos empresas de Finlandia y Portugal para el desarrollo de drones o RPAS. La Universitat lidera este proyecto, con una duración de 30 meses, a través de Das Photonics SL, cuyo director de cátedra es Javier Martí Sendra. Se trata de una empresa spin-off del Centro de Tecnología Nanofotónica (www.ntc.upv.es), que desarrolla productos innovadores basados en tecnología fotónica para sectores de altas prestaciones como defensa y seguridad, aviónica/aeronáutica, satélites/espacio y telecom.
El proyecto tiene un presupuesto total de 3.062.014 euros y la Unión Europea (UE) contribuye con 2.492.526,63 euros. SIGNAL tiene como objetivo desarrollar una carga útil innovadora para mejorar la resiliencia en entornos electromagnéticos complejos y/o saturados, para ser instalados en pequeñas plataformas flexibles como drones tácticos.
El último ciclo financiero del PEDID apoya el desarrollo de varias capacidades de defensa en ámbitos tan diversos como la seguridad marítima, la conciencia situacional cibernética o el combate terrestre y aéreo. En particular, se seleccionaron para su financiación 26 nuevos proyectos con un presupuesto de más de 158 millones de euros, en los que han entrado las dos empresas de Cartagena y Valencia. Estos proyectos se centran en las capacidades de vigilancia tanto aéreas como marítimas, la resiliencia en la detección química, biológica, radiológica y nuclear o en el Sistema de Aeronaves No Tripuladas - drones-, y en las capacidades de gama alta, como ataques de precisión, combate terrestre o combate aéreo.
El ciclo del PEDID 2020 impulsa la cooperación reforzada en materia de defensa, con una amplia cobertura geográfica, ya que participaron en los proyectos 420 entidades de 25 Estados miembros. Además, ha contado con una fuerte participación de las pymes, que representaron el 35% de las empresas con un beneficio del 30% de la financiación total.
Margrethe Vestager, vicepresidenta ejecutiva para Una Europa Adaptada a la Era Digital, ha dicho que el FED “fomentará la competitividad de la UE y contribuirá a lograr nuestras ambiciones tecnológicas, con una participación significativa de empresas de todos los tamaños procedentes de todos los rincones de Europa y con un 30% de la financiación destinada a las pymes”.
Thierry Breton, comisario de Mercado Interior, ha afirmado que, “con el primer programa de la UE dedicado a la defensa, la cooperación europea, se logrará una integración mayor de las cadenas de valor de la industria de defensa europea. Solo en 2021, el FED financiará hasta 1.200 millones de euros en proyectos relacionados con las capacidades de defensa de alta gama, como aviones de combate, tanques o buques de nueva generación, así como tecnologías de defensa fundamentales, como la computación en la nube para las operaciones militares, la inteligencia artificial, los semiconductores, el espacio o las contramedidas médicas o cibernéticas”.
Durante el primer año, el FED cofinanciará proyectos complejos a gran escala por un importe total de 1.200 millones de euros que incrementa la cantidad presupuestada inicialmente. A los 930 millones de euros del presupuesto del FED para 2021, se suman 290 millones de euros del presupuesto del FED para 2022. Esto permitirá lanzar proyectos ambiciosos de desarrollo de capacidades a gran escala, al tiempo que se garantizará una amplia cobertura temática de otros temas propicios. La UE acaba de abrir las propuestas para el concurso público de estos nuevos proyectos.
En el primer año, el FED asignará alrededor de 700 millones de euros a la preparación de sistemas y plataformas de defensa complejos y a gran escala, como la defensa contra los misiles balísticos o los aviones de combate, la flota de vehículos terrestres y los buques digitales y modulares de nueva generación. Se destinarán alrededor de 100 millones de euros a tecnologías críticas, lo que aumentará el rendimiento y la resiliencia de determinados equipos de defensa como la inteligencia artificial y la computación en la nube para las operaciones militares, los semiconductores en materia de infrarrojos y los componentes de radiofrecuencia.
El FED incrementará asimismo las sinergias con otros programas y políticas civiles de la UE, especialmente en los ámbitos del espacio, con alrededor de 50 millones de euros; la respuesta médica, unos 70 millones de euros, y la cibernética y las tecnologías digitales , que cuentan con 100 millones de euros. El objeto es fomentar el enriquecimiento mutuo, permitir la entrada de nuevos agentes y reducir las dependencias tecnológicas.
El Fondo será punta de lanza de la innovación, con más de 120 millones de euros asignados a tecnologías disruptivas y con convocatorias abiertas de propuestas específicas para las pymes. Además, fomentará innovaciones revolucionarias, especialmente en los ámbitos de las tecnologías cuánticas, la fabricación aditiva y los radares más allá del alcance óptico, aprovechando el potencial de las pymes y las start-up.
En el marco del PEDID 2020, participaron también 10 empresas controladas por terceros países. Debido a su gran importancia estratégica, hubo dos importantes proyectos de desarrollo de capacidades que recibieron una subvención por un importe total de 137 millones de euros.
MALE RPAS, conocido también como Eurodrone, apoya el desarrollo de un dron de altitud media y gran autonomía (100 millones de euros). Se invertirán otros 135 millones para reforzar la soberanía tecnológica en materia de drones, un activo esencial para las fuerzas armadas de la UE, en proyectos seleccionados que apoyarán la carga útil para drones tácticos, los enjambres de drones, los sensores o los sistemas tácticos poco observables.
ESSOR, la Radio Europea Segura definida por Software (37 millones de euros), reforzará la interoperabilidad de las fuerzas armadas de la UE mediante la creación de un sistema normalizado para las tecnologías de la comunicación (radio definida por software). Se invertirán más de 48 millones de euros en sistemas de comunicación seguros para otros proyectos seleccionados que apoyarán la comunicación segura y resiliente (mediante distribución de clave cuántica), la comunicación óptica punto a punto entre plataformas militares y las soluciones para redes tácticas,
