MURCIA (EFE). La ministra en funciones de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, ha pedido la "implicación" a las comunidades autónomas para tratar de minimizar las consecuencias para la industria agroalimentaria de la subida de los aranceles en Estados Unidos.
Maroto ha reconocido que esta subida impositiva a productos extranjeros afectará especialmente al sector cárnico y vitivinícola.
Precisamente, para adoptar medidas frente a estos aranceles de Donald Trump, que han "roto las reglas de juego", la ministra en funciones ha subrayado que el Gobierno de España es partidario de los canales "multilaterales", al tiempo que ha recordado que las autonomías tienen asumidas varias competencias en materia agroalimentaria.
Por ello, lo primero que el Gobierno ha hecho es "proteger a las empresas nacionales" y, lo segundo, adoptar medidas para ayudar a las entidades españolas a "diversificar mercados o ganar tamaño", ha enumerado Maroto.
En este sentido, la ministra en funciones ha reconocido que un elemento a "mejorar" de la industria agroalimentaria en comunidades productoras como Castilla y León es su cadena de valor, como sí se hace en otros territorios nacionales, pues al añadir valor los productos se colocan de forma más fácil en el mercado internacional.
Precisamente, en este sentido, Maroto ha reconocido que el "brexit", a pesar de ser un proceso "costoso y duro" para la Unión Europea, también puede ser un "marco de oportunidades" para España, pues una salida dura de Gran Bretaña podría ir aparejada a deslocalizaciones industriales, como las plantas automovilísticas de Nissan en Gran Bretaña que podrían recalar en España.
Finalmente, sobre los augurios de una nueva crisis económica, Maroto ha incidido en que ni el Gobierno ni informes del Banco de España u otras entidades financieras hablan de crisis, sino de un "marco de desaceleración económica", y ha criticado a ciertos partidos el estar utilizando esta estrategia para intentar "desgastar al Gobierno".