lA feria de murcia en imágenes
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MURCIA. Con una afluencia total de hasta 250.000 personas durante los 12 días que ha durado la Feria de Murcia, Administración y empresarios celebran el buen funcionamiento de estos festejos, los primeros sin incidentes desde 2018.
Así pues, con una asistencia media de 20.800 personas cada día, los feriantes celebran haber encontrado en Murcia un "respiro para el sector", al que acusan de estar convaleciente tras "más de 20 meses sin poder trabajar".
Por tanto, han recibido como agua de mayo a los murcianos que han acudido estos últimos días al recinto ubicado en La Fica para montar en las atracciones, consumir en los puestos de comida y participar en las casetas de juegos. Sobre todo, destacan la buena predisposición de los ciudadanos del municipio a "usar la feria" de manera activa, es decir, a acudir con la intención de aprovechar al máximo todas las posibilidades que ofrecen estos festejos.
"En otros años la gente igual se acercaba al recinto para pasear y ver el ambiente, pero ahora que hay limitaciones de aforo las personas que han acudido ha sido porque querían usarla. Esto hay que valorarlo y darles las gracias", comenta el presidente de la Asociación de Feriantes de Murcia, Francisco Javier Fernández.
En consecuencia, el sector ha podido encontrar en este septiembre unos ingresos "más que aceptables" teniendo en cuenta las circunstancias en las que ha trascurrido esta edición: "Cada uno en su medida pero la Feria de este año sí que ha retribuido", asegura Fernández.
De esta forma, encontramos con que los 140 negocios que han acudido a esta Feria han podido encontrar beneficios en Murcia. Si tenemos en cuenta que cada puesto cuenta con 3 o 4 personas "como mínimo", encontramos que alrededor de 500 feriantes han encontrado un respiro económico en el municipio tras el año del coronavirus y el año de la DANA.
No obstante, las 250.000 personas que acudieron a la feria en esta edición aún distan de ser cifras similares a las que se habrían dado en este evento en un año sin el recinto vallado.
Debido a las limitaciones de aforo, la proporción de familias con niños ha disminuido respecto a otros años, por lo que las atracciones infantiles han visto reducida su demanda. Al fin y al cabo, resulta más complicado adaptar las condiciones de esta edición a los niños pequeños.
Por el contrario, los jóvenes sí han acudido con mayor fervor a la llamada de la Feria debido a una mayor facilidad para esperar en las colas o para llegar tarde a casa, por lo que las atracciones para adultos han ganado protagonismo en este 2021.
Por su parte, las casetas de juegos y los puestos de restauración también se han resentido por las restricciones. En este caso han sido las limitaciones de horario las que han perjudicado estos negocios, pues comienzan a cobrar relevancia conforme avanza la noche.
En cualquier caso, Fernández recuerda que para los feriantes haber podido celebrar esta feria sin incidentes ya resulta un evento lo suficientemente positivo en sí mismo, por lo que "no merece la pena" buscar la parte negativa de lo que podría haber sido en un año normal.
En este sentido, recuerda que ya no solo la parte económica influye en estos meses que el sector ha estado parado, sino que sus trabajadores también tenían la necesidad de trabajar por un aspecto de salud mental: "Nuestras familias y nuestras cabezas necesitaban trabajar", apunta Fernández.