MURCIA. Son vecinos de Águilas que miran de frente y con naturalidad a la cámara, en un día soleado y en un rincón paradisíaco como es la Torre de Cope, con el mar detrás. Han posado para la creativa murciana Cristina Navarro, quien ha realizado un proyecto fotográfico que sirve para visualizar una acción de protesta contra de la instalación de un camping-resort en el interior del Parque Regional de Calnegre y Cabo Cope. La han bautizado con el nombre de Damos la cara por Cope.
Fue el pasado domingo 11 de marzo cuando un grupo de vecinos del municipio de Águilas se dieron cita junto a la Torre de Cope. Allí la fotógrafa realizó una serie de retratos con la que los vecinos -y en ocasiones, también sus perros- buscan plantar cara a un complejo turístico que está proyectado a pocos metros de la Torre del Siglo XVI y las dunas fósiles. No se trataba de una recogida de firmas, sino de caras.
En su web, la fotógrafa ha recogido decenas de estos retratos de residentes de la zona que han querido 'dar la cara' por el paraje natural de la Marina de Cope. Adultos, niños, e incluso sus mascotas, se han unido a esta iniciativa que busca la protección del Parque Regional.
Cristina Navarro explica en sus redes sociales que ni ella ni los retratados representan a ningún grupo político ni asociación. "Simplemente somos vecinos de la zona y nos sentimos responsables de proteger este paraíso que es Cabo Cope, uno de los pocos parajes naturales que tenemos dentro de la Región de Murcia".
Cristina Navarro nació en Lorca en 1983 y actualmente trabaja en su propio estudio de fotografía en la ciudad de Murcia. De niña pasó los veranos en la casa de sus abuelos que tenían en la calle Teresa Rabal, a pocos metros de la playa de Calabardina. Y si ahora planta cara al proyecto turístico proyectado, anteriormente ya demostró su amor por esta pedanía aguileña donde pasó los veranos de su infancia, donde ha atesorado recuerdos y vivencias, y donde hoy en día sigue escribiendo páginas de su vida. Lo hizo con otro proyecto fotográfico que tituló Sencillamente Calabardina, con el que se acercó, desde el cariño y la cercanía, a la vida y costumbres de este pequeño pueblo costero.
"Calabardina es un sitio muy especial, de esos que se quedan parados en el tiempo y no evolucionan porque, sencillamente, no lo necesitan. En este lugar he vivido muchas cosas bonicas a lo largo de mi vida y he querido rendirle homenaje de la mejor manera que sé, a través de la fotografía", explicó entonces Cristina Navarro, quien comenzó este proyecto durante el verano de 2022 -durante el cual ha revivido su infancia en el pueblo a través de su hija-, pero que no considera cerrado. Su intención es ir ampliándolo a lo largo de los años, "como espero que lo hagan mis recuerdo". Asimismo, espera, en algún momento, poder exponer estas imágenes en Águilas y Murcia, o editar un libro con ellas, sumándole las historias del lugar y sus vecinos.
Cristina Navarro trabaja como fotógrafa publicitaria y tiene un proyecto personal llamado Murcia Mola con el que da visibilidad a personas, lugares y eventos de la Región.
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