CARTAGENA. El área de Infraestructuras del Ayuntamiento de Cartagena ha iniciado los trámites para la contratación del proyecto de construcción de un carril bici que una las poblaciones de Santa Ana y El Albujón pasando por Miranda, prolongando así el carril bici existente que une el Polígono de Santa Ana con Santa Ana, aumentando la trama actual de carriles bici dando conexión a las necesidades de movilidad.
El Ayuntamiento de Cartagena viene desarrollando una actividad de planificación y participación ciudadana para determinar las necesidades más urgentes de transformación del municipio, entre estas necesidades se encuentran las de movilidad urbana sostenible en el conjunto de núcleos urbanos e interurbanos del municipio. De este proceso participativo realizado, se han determinado los principales ejes de actuación en inversión del municipio, siendo las necesidades de movilidad sostenible uno de los más demandados. La necesidad de dotar de conexión a los carriles bici existentes completando la trama urbana e interurbana es una de las exigencias recogidas en los diferentes procesos participativos.
Esta actuación, que ha salido a licitación por un importe de 1.533.675 euros y un plazo de ejecución de doce meses, tiene financiación europea y está asociado al al Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. El nuevo tramo de carril bici viene a resolver una de las demandas y necesidades del municipio en cuanto a la infraestructura ciclista se refiere, recogida en el PMUS de Cartagena, así como en el Plan de Acción de la Agenda Urbana de Cartagena. La obra consiste en unir ,como ya se ha indicado anteriormente, las poblaciones Santa Ana y El Albujón, atravesando Miranda (indicado en azul), dando continuidad al carril bici existente entre el Polígono de Santa Ana y Santa Ana pueblo (indicado en rojo). El trazado discurrirá paralelo a la Carretera de Murcia.
La longitud total de la actuación proyectada (carril bici) es de 6200 metros lineales. Se proyecta un carril bidireccional de anchura mínima de 2,00 y máxima de 2,5 metros, dotándolo de seguridad al segregarlo de la vía principal , intersecciones y zonas de mayor peligrosidad como pueden ser túneles. La comodidad del carril viene garantizada por el trazado suave, su linealidad sin grandes pendientes, y su seguridad.
Todo el trazado contará con elementos de señalización de trazado y cruces con otras vías. Se considera suficiente la iluminación existente en el vial actual, por este motivo no se contempla la instalación de elementos de iluminación, ni sustitución de los existentes. En su diseño, se tienen en cuenta los criterios de seguridad y visibilidad en los cruces de vías.
Para ello, se evitará la existencia de elementos voluminosos (estacionamiento, carga y descarga, contenedores o mobiliario urbano) en los metros previos a la intersección que dificulten la visibilidad, y por otro lado se resaltará visualmente el itinerario ciclista para alertar a los usuarios de vehículos a motor de posibles cambios de dirección del carril bici.
