CARTAGENA. Fiscalía, en primera instancia, y el Tribunal de Cuentas, posteriormente, han archivado la denuncia de la empresa que se adjudicó los escenarios de La Mar de Músicas contra el que era entonces edil delegado de Cultura, Carlos Piñana, por alcance contable o, dicho de otro modo, por el perjuicio patrimonial que se hubiera podido causar al Ayuntamiento.
A comienzos del pasado mes de mayo, el Ayuntamiento de Cartagena alegó que de los 6 contratos a que hace referencia el Informe Propuesta, tres de ellos nada tienen que ver con el Festival, tratándose de festivales distintos de fechas también diferentes y de los tres específicos del Festival "observamos que las fechas de adjudicación no coinciden con lo que afirma el Informe que el objeto es distinto, no existiendo fraccionamiento alguno".
Llamaba, en dichas alegaciones, la atención que "el denunciante sea el que imposibilitó en su día la contratación, suspendiendo el procedimiento mediante recurso ante el Tribunal Administrativo de Recursos Contractuales, y ahora denuncie un fraccionamiento que consideramos inexistente al tratarse de tres contratos menores perfectamente diferenciados […]".
Fiscalía pedía el 31 de mayo de 2023, el archivo de las diligencias preliminares, al entender que "no se ha producido ningún menoscabo a los caudales públicos, por el mero hecho de haberse producido fraccionamiento de contratos".
De la misma opinión es el Tribunal de Cuentas, y así lo ha ratificado la consejera de Cuentas, Elena Hernáez Salguero, quien indica en su resolución que teniendo en cuenta las alegaciones y la documentación presentadas "en coincidencia con el criterio del Ministerio Fiscal y del Ayuntamiento de Cartagena", considera que los hechos objeto de estas diligencias preliminares "han quedado suficientemente esclarecidos, no pudiéndose apreciar que de ellos derive responsabilidad contable por alcance", por lo que ha decidido. "Decretar el archivo de las diligencias preliminares, al no existir supuesto alguno de responsabilidad contable".
"López empieza su campaña a la desesperada con denuncias sin ninguna base", responde el concejal, y añade: "lo que hizo la concejalía el año pasado fue salvar la edición porque una semana antes de los conciertos la empresa que debía montar los escenarios renunció al contrato".