MURCIA (EFE / F. V.). Fbex, la inmobiliaria que se encargó de la construcción del edificio calcinado por las llamas en el barrio valenciano de El Campanar, fue una promotora de origen catalán que llegó a tener a la Región de Murcia en sus zonas de negocio. La firma, nacida en Barcelona en 1918, llegó a tener más de 220 trabajadores y facturó más de 170 millones al año en 2007. Desapareció en 2022, liquidada tras no resistir los estragos de la burbuja inmobiliaria.
La compañía operaba especialmente en Cataluña, Baleares y la Comunidad Valenciana, además de la mencionada Región de Murcia. En el año 2006, en pleno boom del ladrillo, Fbex acometió un plan de expansión por la Región de Murcia y la Comunidad Valenciana y para ello anunció la venta de 1.300 nuevas viviendas en ambas comunidades, que se repartieron en 18 promociones, como así se puede leer todavía en portales inmobiliarios.
De hecho, la firma llegó a ofrecer viviendas en pedanías murcianas como El Palmar. Por entonces decía que Murcia y Valencia "eran sus comunidades de interés", hasta el punto de que compraron 500.000 m2 de suelo edificable con la intención de construir 5.000 nuevas viviendas. No en vano presumían de ser "especialista en la promoción de primeras viviendas, situadas principalmente en casos urbanos de Cataluña, Levante, Murcia y Baleares".
Sin embargo, aquella historia de éxito empezó a truncarse a raíz de la crisis de 2008. Poco después, según informa la Agencia Efe, comenzaron los problemas, y en 2010, último ejercicio declarado, se anotó unas pérdidas de más de 150.000 euros, además de contar con propiedades entregadas en garantía para hacer frente a sus deuda que superaban los 600 millones de euros. Ese año Fbex entró en concurso de acreedores declarando una deuda de 640 millones de euros, y con activos inmobiliarios en poder de los bancos acreedores por valor de 165 millones.
La sociedad estaba controlada por el administrador único, Juan Parada Henares, que poseía el 49,07% de las acciones de forma directa, además de un 23,28% a través de Gestión y Tramitación de Viviendas SL y un 9,69 % con la firma JP Sica; el 17,96 % restante estaba en poder de otros socios. Además de la deuda con la banca, Fbex debía 27,7 millones de euros a las administraciones públicas, según fuentes de la Agencia Efe.
En 2008, año en el que se terminó la promoción de viviendas de El Campanar, vio cómo su deuda se disparaba por encima de los 1.500 millones de euros, tras lo cal acordó un aplazamiento con la banca que finalmente no llegó a buen termino.
Parte de sus activos y créditos fueron traspasados a la Sareb, el banco malo español, que en 2018 vendió por 12 millones de euros a la promotora Flor Azahar Real Estate las torres de 19 plantas que Fbex dejó a medio construir en Canet d'en Berenguer (Valencia) en colaboración con Astroc, que en 2007 había protagonizado el segundo mayor concurso de acreedores de la historia de España.
En noviembre de 2022, la inmobiliaria inició la fase de liquidación del grupo, cuya deuda alcanzaba entonces los 463 millones de euros, tras rechazar la banca su propuesta de convenio, que preveía quitas del 85 %.
Juan Parada Henares figura en la actualidad como consejero delegado de Catalana Internacional de Valoraciones SA y es el administrador único de Nunda Project SL y Juanpar II SL, empresa que según el Boletín Oficial del Registro Mercantil (BORME) pasó a ser una sociedad anónima en septiembre de 2023.
El empresario era conocido por haber declarado como testigo en el juicio por blanqueo de capitales contra Jordi Pujol Ferrusola, primogénito del expresidente de la Generalitat, Jordi Pujol Soley, aunque negó ante el juez conocer a ningún miembro de la familia.
Fbex también salió a relucir durante el juicio al "Madoff" español, Germán Cardona, al que en 2018 el Tribunal Supremo confirmó la condena de 13 años y 3 meses de cárcel por asociación ilícita, estafa, falsificación documental y blanqueo al considerar que defraudó 390 millones de dólares a 186.000 personas entre 2007 y 2010.