Imagen de la planta de hidrólisis de Symborg en Alhama de Murcia. Foto: SYMBORG MURCIA. Jesús Juárez, fundador y CEO de Symborg, dejará la compañía cuando se complete la adquisición por parte de la multinacional estadounidense Corteva. No obstante, cuando eso suceda no renunciará a los bioestimulantes agrícolas, sino que seguirá vinculado al sector desde la hidrólisis, una porción del que era su negocio que ha quedado fuera del acuerdo con la firma norteamericana.
Según confirman fuentes de la empresa a Murcia Plaza, la actividad de hidrólisis de Symborg no ha entrado en la negociación al no tratarse de un negocio biotecnológico, por lo que Juárez podrá centrarse por completo en esta división del negocio una vez fuera de la compañía que él mismo impulsó.
Con 40.000 metros cuadrados, la fábrica de hidrólisis de Alhama está diseñada para la transformación de los desechos en bioestimulantes mediante la intervención de aminoácidos o de nitrógeno, lo que genera un producto final de interés agrícola. Para su construcción Symborg invirtió 28 millones de euros.
Este movimiento ya venía siendo preparado desde el comienzo de venta, pues tan solo una semana después de anunciarse la adquisición por parte de Corteva se publicaba en el Boletín Oficial del Registro Mercantil la segregación del negocio de la hidrólisis.
Para ello, se creó una nueva sociedad como escisión de Symborg Business Development SLU para que adquiriera "todos los derechos y obligaciones inherentes a dicha actividad". Nació así el 29 de septiembre Fabricación y Manufacturas Caramañola SLU -sociedad limitada unipersonal-.
"Daremos a la planta de hidrólisis ubicada en Alhama el empuje necesario para ser los mayores productores de bioestimulantes a partir de aminoácidos provenientes de residuos, con procesos basados en economía circular", explica Jesús Juárez a Murcia Plaza: "Optimizaremos procesos y apostaremos por la internacionalización para ser los principales productores del sector".
Las instalaciones se encuentran en funcionamiento desde el pasado 25 de marzo del 2021. Antes de anunciar la compra por parte de Corteva, Symborg ya se encontraba planeando una ampliación en la fábrica como consecuencia de la creciente demanda de este tipo de productos.
Tras iniciar relaciones en abril del 2021 por un acuerdo de distribución, la multinacional norteamericana Corteva anunció el pasado septiembre la compra de Symborg. La operación aún está supeditada al visto bueno de las autoridades competentes, lo que puede tardar en llegar varios meses.
Según ha podido saber Murcia Plaza, la intención es mantener la continuidad de la empresa murciana y no realizar cambios bruscos, por lo que se mantendrán la totalidad de sus filiales, así como la plantilla al completo. Respecto a la dirección actual, esta se mantendrá al frente de la compañía hasta que la adquisición se oficialice, tras lo que quedará en manos de la compañía estadounidense decidir quién encabezará esta nueva etapa de Symborg.
Corteva es una empresa agrícola global que cotiza en bolsa y se especializa en buscar soluciones para los desafíos agrícolas más apremiantes: "La adquisición de Symborg es un paso importante en la estrategia de Corteva para acelerar el desarrollo de una cartera de productos biológicos de primera clase, como parte de las soluciones integradas que ofrecemos a nuestros clientes", afirma Robert King, vicepresidente ejecutivo de la Unidad de Negocio de Protección de Cultivos de Corteva Agriscience.
Corteva compra Symborg: así crece una startup en Murcia hasta seducir a una multinacional de EEUU
