MURCIA. Las elecciones de este domingo se celebran en unas condiciones extrañas. De una parte, tenemos a un Gobierno que, a pesar de haber atravesado una etapa convulsa marcada por las consecuencias de una pandemia sin precedentes y una guerra imperialista a las puertas de Europa, puede exhibir unas cifras económicas y de empleo que le sitúan como uno de los más firmes de toda la eurozona. De otra, una oposición que ha situado el debate lejos de las condiciones materiales y lo ha llevado hasta una nueva dimensión, instalado en la crispación, en la mentira y en el cuñadismo más rancio ("que te vote Txapote"). Una oposición que, aunque liderada aún por el Partido Popular, ya ha sido fagocitada ideológicamente por la extrema derecha, a quien los del supuestamente moderado Feijóo ha decidido comprar todos los marcos y la forma de hacer política.
No es de extrañar, por tanto, que los demócratas y los progresistas estemos, cuando menos, preocupados ante la posibilidad de que llegue al gobierno un modelo que sitúa como enemigo declarado al feminismo, a los derechos para las personas LGTBI, o las conquistas en el ámbito laboral. En este contexto, muchos ciudadanos y ciudadanas tratan de posicionar su voto en el partido que más "útil" pueda resultar para frenar el ascenso de la derecha. Y se corre el riesgo, por tanto, de que haya quien piense que recurriendo a la fuerza mayoritaria de la izquierda a nivel nacional, se puede lograr un mejor resultado. Esto es falso, debido sobre todo a las leyes electorales y a los sistemas matemáticos utilizados para asignar los escaños en el Parlamento. En España se utiliza la Ley d’Hont, es decir, un sistema de reparto que tiende a ser representativo, pero que no lo es al 100%.
"si el 'voto útil' de la izquierda se desplaza hacia el PSOE, el efecto puede ser dar un diputado a Vox"
Aterrizando en nuestra tierra, para la Región de Murcia, si el llamado "voto útil" de la izquierda se desplaza hacia el PSOE, el efecto puede ser dar un diputado a Vox. El PSOE está muy lejos de alcanzar su siguiente diputado. Sumar, por el contrario, podría perder la representación que hoy le asignan las encuestas si se deja un puñado de votos. Un escaño que, en función de cómo se distribuya el voto de la derecha, acabará yendo a Vox o al Partido Popular. Dicho en bruto: que un votante progresista que hoy duda entre votar al PSOE o votar a Sumar acabe este domingo eligiendo la lista del PSOE, puede servir para que la derecha logre un escaño más en Murcia.
En la Región, históricamente los múltiplos del 8% garantizan el escaño. Según los últimos tracking y encuestas, el Partido Popular en Murcia ronda el 40% de intención de voto. De que supere o no ese 40% depende que logre 4 o 5 escaños. El PSOE sacaría alrededor del 20%, es decir, contaría con 2 representantes seguros, pero se sitúan muy lejos de lograr el tercero. Vox, sin embargo, con el 23%, se disputa pasar del segundo al tercer escaño. Sumar, en entre 8% y 9% según los sondeos, parece tener asegurado su diputado, pero si el voto útil hace que Sumar baje del 8%, aunque esos votos vayan al PSOE, éste nunca llegaría al tercer escaño. En cambio, sí bajaría el listón para que PP y Vox obtengan respectivamente el quinto o el tercer escaño. Es decir, lo que la gente piensa que es un voto útil al PSOE, termina siendo un voto para que el PP consiga el quinto diputado o que Vox saque el tercer escaño más fácilmente.
Ángel Luis Hernández
Candidato de Sumar al Senado por la Región de Murcia